Seguro que alguna vez te has fijado en cómo los adultos hablamos con los bebés o a los niños pequeños. Cuando lo hacemos, cambiamos nuestra entonación y expresividad. A este fenómeno se le conoce con el nombre de baby talk.
Hay que tener en cuenta que el lenguaje es una habilidad que los niños van desarrollando a lo largo de los años, de manera gradual. En este sentido, la forma en la que los padres se expresan con sus hijos es un factor muy relevante en la adquisición y aprendizaje del habla.
“El aprendizaje es como una torre, hay que ir construyendo paso a paso”.
– Lev Vygotsky –
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Características del baby talk
El baby talk es la adaptación lingüística que utilizan los adultos, e incluso los niños mayores de 6 años, cuando se comunican con niños pequeños. Por tanto, se puede decir que es el habla dirigida a los bebés, presente en todas las lenguas y clases sociales.
Esta forma de expresarse se caracteriza por modular tres aspectos básicos del lenguaje oral:
- Duración.
- Intensidad.
- Frecuencia.
Así, según el logopeda Marc Monfort, las características esenciales del baby talk, son las siguientes:
- Ritmo lento.
- Tono de voz agudo.
- Pronunciación bien definida.
- Entonación expresiva.
- Enunciados cortos y simples.
- Redundancia, repitiendo con frecuencia parte o la totalidad de los enunciados.
- Número limitado de palabras, eligiendo, en general, la fórmula más sencilla y usando diminutivos.
- Referencias continuas al contexto.
- Lenguaje no verbal, con gestos y mímicas que acompañan al lenguaje oral.
“Los adultos deben adaptarse a los niños, y no al revés. Haz que la comunicación con ellos sea fácil y sencilla. Procura que te puedan entender”.
El bebé es muy sensible a la voz humana
En efecto, en los primeros meses de vida el bebé es sensible a la voz humana y en especial a la de su madre. Valga resaltar que al mes de su nacimiento sus primeras vocalizaciones ocurren cuando está tranquilo, atendido y satisfecho. Solo que no distingue la voz de su madre de la suya propia.
Pero, hacia el segundo mes comienza a darse cuenta de que esa voz es suya y, en ese sentido, comienza a usarla. Ya en el tercer mes produce un extenso repertorio de sonidos, lo que sería la etapa propia del balbuceo.
En esta etapa el bebé pronuncia todos los sonidos posibles, lo que le permitirá, según el educador y lingüista Francisco José Cantero: “aprender a hablar más adelante la lengua de su entorno, sea la que sea.”
“Sabemos que aún tiene que recorrer un largo camino antes de ‘hablar’, pero estas primeras vocalizaciones, el primer balbuceo de nuestro bebé, es uno de los momentos más emocionantes de su desarrollo”.
¿Cuáles son las funciones del baby talk?
La utilización del baby talk sirve para adaptarse a las peculiaridades y ritmo evolutivo de los más pequeños. De manera que se les proporcionen modelos de lenguaje abundantes, adecuados y variados.
Estas adaptaciones se llevan a cabo, de forma natural, con la intención de mejorar y controlar la eficacia de la comprensión comunicativa por parte del niño. Por tanto, suponen una ayuda básica para la imitación y el aprendizaje del lenguaje oral.
Como se ha mencionado antes, se suele hablar con los niños de manera lenta y sencilla, cuidando la pronunciación y el vocabulario. Esto permite que el niño preste mayor atención y facilita el inicio y el mantenimiento de conversaciones largas e interesantes.
Todas las ventajas del baby talk cuentan con una base científica sólida que las respaldan. De hecho, un estudio demostró que la modulación del habla al dirigirse a los bebés apoya la adquisición del lenguaje por parte del pequeño. También se cree que facilita el aprendizaje activo y mejora la atención de los pequeños.
Como lo afirma la psicopedagoga Magda Rivero: “El habla materna constituiría una buena base para la adquisición del lenguaje por ser un input organizado, estructuralmente más simple, más redundante y más contextualizado espacial y temporalmente en el aquí y el ahora que el habla entre adultos”.
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Otras pautas para hablar con los niños
Los padres deben cuidar la forma de comunicarse con los niños. Esto es muy beneficioso y enriquecedor para ellos, especialmente a edades tempranas. Pero, además de la utilización del baby talk, existen otras muchas estrategias que se deben aplicar para hablar con los pequeños de modo satisfactorio.
Algunas de estas pautas para estimular el lenguaje de los bebés, son:
- Inclinarse y ponerse a la altura del niño, estableciendo contacto visual.
- Disponer de momentos de juego, en los que se estimule el lenguaje oral y la escucha.
- Aprender y recitar canciones infantiles.
- Involucrar al niño en las tareas diarias, como ir al supermercado.
- Escuchar activamente, repitiendo y formulando con otras palabras lo que el niño ha intentado decir.
- Emplear el refuerzo positivo.
En conclusión
El lenguaje oral es una habilidad natural que se adquiere gracias a una serie de intercambios comunicativos con el entorno, desde el momento del nacimiento. Los niños aprenden a hablar escuchando a sus familiares y, especialmente, a sus progenitores. Por ello, es tan importante la utilización del baby talk y de otras pautas de comunicación positiva con los niños pequeños.
“El nivel de comprensión y expresión verbal del niño resulta determinante
para su desarrollo personal, su integración social y, por supuesto, su éxito
escolar”.– Marc Monfort –
Bibliografía
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- Díez-Itza, E. (1993). Variaciones tonales en el habla a los niños y adquisición del lenguaje. Estudios de Psicología, 14(50), 33-47.
- García, M. M. R. (1993). La influencia del habla de estilo materno en la adquisición del lenguaje: valor y límites de la hipótesis del input. Anuario de psicología/The UB Journal of psychology, 45-64. https://www.raco.cat/index.php/AnuarioPsicologia/article/download/61191/88756
- Monfort, M. (2001). El niño que habla. Madrid: Cepe.
- Serena, F. J. C. (2001) El balbuceo. Disponible en este enlace.