¿Cómo hacer un slime casero para niños?
Este artículo ha sido revisado en profundidad para garantizar que la información presentada sea lo más precisa posible, cumpla con nuestros estándares de calidad y presente datos respaldados por fuentes confiables, reflejadas en la bibliografía y los enlaces dentro del texto. Más información
La tendencia de hacer un slime casero para niños no ha dejado de crecer. En la actualidad, el moco de unicornio, moco de gorila o moco loco, se ha convertido en uno de los materiales preferidos de los pequeños y aficionados a las manualidades.
Ya lejos han quedado la plastilina, la arcilla o la arena mojada y puesta al sol para elaborar creaciones. Si tú también quieres aprender a hacer esta masa especial, no te puedes perder estas propuestas originales para elaborarla y decorarla. ¡Manos a la obra!
¿Cómo hacer un slime casero para niños?
Aprende más sobre este nuevo juguete que, según explican los expertos en el área, incentiva a los niños a desarrollar su creatividad, a canalizar toda su energía y a desarrollar su concentración, entre otros beneficios.
Eso sí, ten en cuenta que alguna de las elaboraciones requieren de la ayuda de un adulto, al igual que para cualquier buena receta de cocina. Además de ofrecerles entretenimiento, les permitirá estrechar vínculos juntos. ¡Empezamos!
1. Slime con maicena
El original, el que marcó furor, está hecho con un activador llamado bórax. Sin embargo, te presentamos una versión con maicena (almidón de maíz) para que no tengas que utilizar esta sustancia. Eso sí… ¡No dejes de mover la masa o se endurecerá!
Materiales
- ½ taza de pegamento transparente.
- ½ taza de agua.
- ¼ taza de maicena o almidón de maíz (también vale líquido de lentillas).
- Colorante alimenticio o pintura acrílica.
- Purpurina, estrellitas, brillantina, y otros accesorios decorativos.
Paso a paso
- En un recipiente de vidrio, amplio y seco, mezcla el agua y el pegamento.
- Cuando consigas una mezcla homogénea, añádele el colorante alimenticio que prefieras.
- Para darle un toque personalizado, agrega un poco de purpurina, estrellitas o cualquier otro elemento similar.
- Ahora, echa dos vasitos de maicena poco a poco, sin parar de menear. Si queda muy líquido, añade más.
- Para finalizar, mezcla la masa con ambas manos hasta que notes que adquiere una consistencia pegajosa.
2. Slime con espuma de afeitar
Si quieres darle una consistencia diferente al material sin recurrir al bórax y lograr una textura suave, esponjosa y con un olor agradable, ¡anímate a utilizar espuma de afeitar en la elaboración!
Materiales
- Espuma de afeitar.
- Cola blanca escolar o pegamento transparente.
- Detergente líquido.
- Colorante alimenticio o pintura acrílica.
- Un bol de cristal.
- Una lengua de gato de silicona.
- Una cuchara.
Paso a paso
- En primer lugar, agrega la cola blanca o transparente al recipiente de vidrio que, como en el caso anterior, tiene que estar limpio y seco.
- Para que tu slime tenga color, añádele colorante alimenticio o pintura acrílica del tono que más te guste.
- Después, remueve hasta que la cola y el colorante queden bien mezclados.
- Ahora, es el turno de echar la espuma de afeitar para conseguir esa textura especial. Es muy importante que los movimientos sean envolventes, de arriba hacia abajo, para no perder la forma esponjosa.
- Agrega más pasta según cómo esté la masa y finalmente, añade el detergente líquido poco a poco, sin dejar de remover. Verás que para este momento la masa tendrá buena consistencia.
- Por último, saca el slime del bol y amásalo con ambas manos, hasta que dejes de sentirlo pegajoso. ¡Y listo!
3. Slime con champú, una forma original de hacer tu masa casera para niños
Al igual que con la espuma de afeitar, el champú también conseguirá que tu slime tenga un olor riquísimo. Si estás pensando en regalar una creación hecha con este material, este es un detalle que esa persona le agradecerá.
Materiales
- ½ taza de champú.
- Azúcar.
- Palito de helado para mezclar.
Paso a paso
- En un recipiente grande, vierte el champú.
- Añade una cucharadita de azúcar y mezcla.
- Una vez hecho esto, continúa añadiendo azúcar hasta que el champú adquiera una textura pegajosa y elástica.
- Guarda el recipiente en el congelador durante, al menos, dos horas.
- Por último, cuando veas que ya ha adquirido la textura deseada, sácalo de la nevera y úsalo.
4. Slime de arcoíris con pasta de dientes
En línea con la idea anterior, te invitamos a aprovechar la pasta de dientes y a darle otro enfoque a este material. De esta forma, los pequeños se familiarizarán con aquellos elementos que ya conocen y la experiencia será aún más divertida.
Materiales
- Pasta de dientes.
- Cola blanca.
- Colorantes alimenticios de diferentes colores.
- Palito de helado para mezclar.
Paso a paso
- Vierte la cola a partes iguales en los recipientes (necesitarás tantos como slimes de colores quieras crear, ya que tendrás que añadir un color por recipiente).
- Después, vierte poco a poco la pasta de dientes y mezcla con el palito de helado hasta conseguir la textura deseada.
- Trabaja cada una de las masas para hacer tiras.
- Finalmente, combina todas las tiras (una al lado de otra) para crear un precioso slime arcoíris.
5. Slime magnético
Gracias al hierro que tiene esta masa, todo se acercara hacia donde tú estés. Eso sí, procura que haya un adulto en la elaboración, ya que necesitarás utilizar bórax.
Materiales
- 250 g de pegamento blanco.
- ½ taza de agua tibia.
- 1 cucharadita de bórax.
- 30 g de limadura de hierro.
- 1 imán fuerte.
Paso a paso
- Para empezar, pon el pegamento y el bórax en un recipiente de plástico (esto es muy importante) y añádele media taza de agua tibia.
- Una vez que mezcles, coloca las limaduras de hierro y vuelve a amasar.
- Toma el imán y muévelo hasta conseguir que el slime reaccione. ¡A disfrutar!
Hacer un slime casero para niños, una actividad perfecta para pasar tiempo en familia
Como has podido comprobar, hay diferentes formas para elaborar esta masa de juguete, según las preferencias y los gustos de cada niño. ¿Lo mejor? Que los materiales son totalmente caseros y fáciles de manejar.
Además, los pequeños podrán crear con sus propias manos el material para realizar sus propias figuras; algo que, como bien explican los especialistas de la Academia Americana de Pediatría, favorece a su desarrollo personal e intelectual.
Por otra parte, también hay diferentes tipos de slime comestibles que os encantará probar: de Nutella, de leche condensada, de nubes o de ositos de gominola. ¿Qué estáis esperando para poneros manos a la masa y dejaros sorprender con esta tendencia?
Te podría interesar...