Las 15 mejores canciones para niños

Las canciones para niños no pasan de moda. Son varias las generaciones en las que, con algunas novedades, se han ido utilizando las mismas. Todos guardamos recuerdos de nuestros abuelos, tíos, madres y padres, cuando en los encuentros familiares entonaban sencillas y melodiosas nanas.

Pero estas melodías no solo se entonan durante la niñez, sino en la gestación, cuando el bebé está dentro del vientre. Tal vez por eso nos resultan tan entrañables…

En este artículo tendrás a mano un repertorio de canciones infantiles, con el propósito de que las conozcan, las canten juntos, las aprendan, y la tradición continúe.

Algunas canciones para niños imprescindibles

A la hora de amenizar los juegos es bueno tener un manojo de canciones preparado. ¡Toma nota de las que nunca pueden faltar!

1. A bailar el Chipi Chipi

Los pequeños participantes del juego salen por turno a escena. La idea es que cada uno baile el «chipi chipi», que se realiza moviéndose hacia adelante y hacia detrás, doblando los brazos y arqueando el cuerpo.

Una vez que el primer jugador haya elegido a su compañero, cada uno de los niños del corro elegirá también al que será su «pareja de baile».

2. El corro de la patata

Es un clásico en lo que a canciones infantiles se refiere y una excelente opción para fomentar el juego en equipo. A los adultos nos suena muy repetida, pero los niños de hasta los siete años la recibirán muy bien. Para ellos será un juego divertido, que además les permitirá interactuar unos con otros.

3. ¿Dónde están las llaves?

Es un tema muy utilizado para conseguir que todos los niños participen y se integren al grupo. Los niños se ponen en hileras frente a frente y de manera alternativa se acercan y alejan al ritmo de la canción. Mientras esto sucede, un niño se pasea por el centro tocando palmas con el compañero que le toque al oír la palabra «¡Chimpón!»

4. El escondite o el pajarito inglés

Un juego-canción especial para trabajar la concentración y los reflejos. Un niño de cara a la pared o frente a un árbol, dice «Un dos tres pollito inglés», tiempo durante el cual los demás niños se le aproximan con sigilo.

Al terminar de pronunciar la frase, se gira rápido y los niños deben detenerse, quien sea pillado en movimiento debe volver atrás. Gana o libera a los demás, el que logre llegar a la base y tocar al que cuenta.

Canciones infantiles para cantar y divertirse

Hay piezas pegajosas que no pueden faltar en las fiestas, para los bailes en corro, de cantar y reír.

5. Estaba el señor Don Gato

El romance del señor Don Gato es un claro ejemplo de cómo las tradiciones perviven cuando se convierten en canciones que los niños cantan. Esta pequeña y divertida pieza viene remontando los siglos desde los tiempos de moros y cristianos, y vibra en los cancioneros de Castilla-La Mancha, como lo reseña esta publicación de la Revista de Estudios del Campo de Montiel.

6. Susanita tiene un ratón

https://www.youtube.com/watch?v=WY8c8_RBi90

Los padres recordamos con mucho cariño aquellos entrañables payasos de la tele que nos deleitaban con su buen humor. Este ratón chiquitín tiene gustos parecidos a los niños, en lo que a golosinas se refiere. Come bolitas de anís, chocolate y turrón. ¡A los pequeños se les hará la boca agua!

Según su autor, el compositor madrileño, Rafael Pérez Botija, es una canción que le ha brindado muchos frutos. La popularizó el cantante español Emilio Alberto Aragón, mejor conocido como el payaso Miliki.

7. El patio de mi casa

El patio de mi casa es particular, cuando llueve se moja como los demás. Se trata de una de las canciones infantiles más utilizadas a lo largo de la historia. Sin embargo, no pasa nunca de moda y continúa siendo una buena elección para que los más pequeños pasen un rato muy agradable.

Su origen es incierto, pero documentos la reseñan en España y las colonias de América y África en el siglo XIX, de modo que seguro data de mucho más atrás. Forma parte del repertorio de algunas bandas, que la interpretan aprovechando su eco marcial.

8. Tengo una muñeca vestida de azul

No solo proporciona ternura y diversión. Este tema sobre la muñeca que se viste de azul consigue que los niños vayan encadenando números. Además, irán recitando las primeras sumas sin darse cuenta.

9. Los elefantes se balanceaban

La canción que no tiene fin, porque no hay límite de elefantes. ¿Cuántos paquidermos puede aguantar la superresistente tela de araña? Infinitos, o hasta que se cansen cantar y sumar.

Muchas de estas canciones las tarareamos sin preguntarnos de dónde vienen. Esta en particular existe en una versión de origen incierto, impresa en Francia, ya en el siglo XIX, y desde entonces hay variantes en diversos idiomas.

Canciones para niños que ayudan a educar

Entre las ventajas de las canciones populares es que enseñan sin proponérselo. Ayudan el ritmo, la repetición, la rima, como también la libertad de las asociaciones que mezclan sueño y realidad. Veamos algunas, nuevas y antiguas.

10. Soy una taza

Esta canción no es tradicional, sino una muestra de las canciones infantiles más recientes. Se trata de que los niños puedan identificar, al ritmo de la música, algunas cosas y utensilios de casa.

11. Al burrito le duele la cabeza

Aunque el burrito va padeciendo enfermedades, el médico se encarga de aliviar su dolor. ¿Qué consiguen los niños? A la vez que van repitiendo los versos de esta añeja canción de la tradición oral hispana, ejercitan su memoria.

12. Debajo de un botón

Esta canción popular ha sido versionada muchas veces, es contagiosa y fácil de memorizar. Acá la tienes en la versión de Rosa León.

Canciones de María Elena Walsh

La autora argentina de poemas-canciones infantiles es conocida por Manuelita la tortuga y los libros Tutú Marambá y El Reino del Revés. Sus letras son desopilantes y flotan en una atmósfera de sueño en las alas de la música popular.

Con esta muestra se trata, como lo sugiere el libro «Aprendizajes clave de la educación infantil», de buscar y seleccionar canciones con vuelo poético, que apelen al juego, a la rima y a la fantasía.

13. El reino del revés

https://www.youtube.com/watch?v=2wYqTIXKkLo&list=PL647D60262FC542BA&index=3

En el reino del revés la lógica es la del sueño, pero a veces las cosas de cabeza sueñan por encontrar la libertad donde hay opresión, en desbaratar la limitante lógica y en revelar lo oculto.

14. La canción del perro salchicha

https://www.youtube.com/watch?v=uG7fyAyfORQ&list=PL647D60262FC542BA&index=6

Esta canción con un ritmo trepidante narra algo insólito: una gaviota cree divisar un enorme camarón y decide llevárselo a su hambriento pichón. El marisco no era tal, sino un perro salchicha. Recomendación: cuando vayas a la playa, cuídate del sol, porque si te pones rojo como un langostino, una gaviota se puede confundir.

15. La calle del gato que pesca

En clave de jazz y desternillante juego de palabras, en especial de sílabas que se quedan como colgando de una ventana, logra María Elena Walsh una sabrosa historia musical. Para bailar, cantar y darle a conocer a los niños ritmos modernos e imágenes entrañables.

Por cierto, ¿sabías que la «Calle del gato de pesca», existe? Pues sí, y es la calle más estrecha de París.

Las canciones infantiles, un tesoro inagotable

Las melodías para grandes y chicos nos educan en la sensibilidad y nos llevan en sus versos a tiempos remotos en los que cantar y amamantar iban agarradas de la mano. Luego vendrían los primeros pasos y las primeras palabras, cargadas de memoria, de rondas infantiles y risas inolvidables.

Como bien lo refiere esta tesis desarrollada en la Universidad de Zaragoza, todo cuanto hace un niño puede ir acompañado de una rima folclórica. Comer, saltar, bañarse, romper una piñata, saltar a la comba. Porque, en definitiva, «Las raíces populares de la poesía infantil están en el folclore y a él hay que volver para entregarles a los niños, de nuevo, lo que es suyo y enriquece su vida».