La adolescencia es una etapa de la vida en la que se es más vulnerable y sensible a cualquier crítica. Es en este momento cuando, entre los iguales, surgen críticas y, muchas veces, los adolescentes se ven ante situaciones en las que responden de manera inadecuada. Por ello, vamos a ver técnicas para afrontar las críticas en la adolescencia.
Estas técnicas se pueden utilizar también en la adultez, pero durante la adolescencia, por ser un periodo más sensible, es importante que los chicos aprendan a defenderse ante las críticas de una manera asertiva y adecuada, preservando siempre sus derechos asertivos.
¿Cómo solemos afrontar las críticas y qué tipos de críticas hay?
Normalmente, cuando recibimos una crítica, reaccionamos inmediatamente y de manera impulsiva, por lo que solemos contestar de mala manera y con malas formas. No obstante, ante una crítica podemos reaccionar de tres maneras.
Contraatacando con otra crítica
Como resultado de esta forma de actuar es que, aunque expresamos lo que sentimos, suele dañar las relaciones y termina perdiéndose el respeto entre ambas partes. Por ejemplo: “¡Anda que tú!; Pero si tú eres el que…, o Mira quién habla…”.
Negando frontalmente la crítica
Esta forma de responder deja el problema sin resolver. Por ejemplo: “Pero ¿qué dices?; ¿De qué vas, tío?, o Eso no es verdad…”.
Evitando la crítica, negándonos a discutir
El resultado es el mismo que el anterior. Por ejemplo: “Venga, vale, ya está; Vamos a dejarlo, ¿vale?, o No voy a tolerar esto, me voy”.
También es importante que tengamos en cuenta la diferencia entre técnica constructiva y la destructiva. La primera señala los fallos que tenemos aportando sugerencias o consejos para mejorar. La destructiva, por el contrario, ataca a la persona directamente para hacerle daño y no incluye consejo alguno.
Técnicas para afrontar las críticas en la adolescencia
Tras esta introducción, a continuación, vamos a hablar sobre algunas técnicas para afrontar las críticas que se pueden usar durante la adolescencia.
Banco de niebla
Esta técnica hay que utilizarla sobre todo ante las críticas con mala intención; es bueno aprender a usarla para recibir, de manera natural, cualquier crítica sin sentir vergüenza. Consiste en reconocer, de forma serena, que puede haber alguna parte de verdad en la crítica que estamos recibiendo.
Por ejemplo:
- “Parece que hoy tienes mala cara”. Respuesta: “Sí, puede ser que tenga mala cara hoy”.
- “¡Qué camiseta más fea llevas”. Respuesta: “Puede ser, pero a mí me encanta”.
Aserción negativa, una de las técnicas para afrontar las críticas en la adolescencia
Si cuando escuchamos la crítica nos damos cuenta de que esta es constructiva y estamos de acuerdo, la utilizaremos sin malas actitudes, sin justificarnos y sin enfadarnos.
Por ejemplo:
- “Has llegado 15 minutos tarde”. Respuesta: “Es verdad, me he retrasado mucho”.
Ironía asertiva
En este caso, respondemos de manera positiva a la crítica destructiva.
Pot ejemplo:
- “¡Qué gafas más feas llevas!”. Respuesta: “Gracias…”.
Interrogación asertiva para afrontar las críticas en la adolescencia
Esta técnica consiste en pedir aclaración. Así, obtendremos información acerca de si la crítica nos puede resultar útil o podemos descartarla, si es con una intención manipulativa. Lo haremos pidiendo a nuestro interlocutor que explique a qué aspecto específico de nuestra conducta se refiere.
Por ejemplo:
- “Vaya pinta traes hoy”. Respuesta: “¿Sí? ¿Qué es lo que te llama la atención de mi indumentaria?”.
Pasos a seguir para afrontar una crítica
Pensar asertivamente (de manera adecuada)
De esta forma, nos liberamos de la necesidad de aprobación de los demás y aceptamos que nos hemos podido equivocar.
Pedir detalles de la crítica
Pidiendo detalles de la crítica podremos saber cómo nos ven los demás y si hay un intento de hacernos daño o de manipularnos.
Mostrarnos de acuerdo si en alguna parte lo estamos
Podemos sentirnos de acuerdo en parte con la crítica. Reconoceremos nuestro error y le daremos las gracias por su crítica a nuestro interlocutor. De esta manera, desarmamos al adversario.
Explicar nuestra posición
En este caso, explicaremos con calma cómo lo vemos nosotros y, si estamos de acuerdo, lo aceptaremos, reconoceremos el error y nos disculparemos. Si no lo estamos, también debemos hacerlo diciendo que, quizá, la persona con la que estamos hablando esté en los cierto, pero que nosotros lo vemos de otro modo.
En definitiva, estas técnicas para afrontar las críticas en la adolescencia las podemos también incluir los padres en nuestro repertorio de habilidades sociales, así, enseñamos también con el ejemplo.
Es importante que los adolescentes sepan defenderse de las críticas de una manera adecuada, sin ser agresivos con las palabras y menos aún con los actos. Por eso, estas técnicas pueden ayudar todos los chicos a defenderse de una forma correcta, sin herir a la otra persona.