¿Es recomendable comer hummus en la etapa del embarazo?

El hummus contiene 9 nutrientes claves para la gestación. Por ello, no es mala idea comer hummus en el embarazo. Sin embargo, deben tomarse las siguientes precauciones.

Consumir hummus embarazo

Es válido cuestionarse sobre la seguridad de consumir hummus durante el embarazo, no necesariamente porque sea un alimento que carezca de beneficios nutricionales o sea perjudicial para la salud de la embarazada, sino debido a ciertos aspectos de seguridad que deben considerarse.

A continuación, te contaremos todo sobre el consumo de hummus en el embarazo, tanto sus beneficios como sus contraindicaciones y qué debes hacer si quieres consumir esta deliciosa crema.

Comer hummus en el embarazo: ¿está permitido?

Sí, puedes disfrutar del hummus durante el embarazo, pero es esencial optar por la versión casera y prestar atención a algunos detalles importantes. El hummus tradicional se prepara con ingredientes nutritivos como garbanzos, tahini, especias, aceite de oliva y jugo de limón, lo que lo convierte en una excelente elección para las embarazadas.

Para garantizar su seguridad, debes seguir algunas pautas. Asegúrate de que las semillas de sésamo utilizadas para hacer el tahini se tuesten a altas temperaturas. Además, no dejes el hummus en la nevera por más de 2 días, ya que su frescura es fundamental.

Lo más destacado es que el hummus proporciona una buena cantidad de 9 de los 12 nutrientes clave recomendados durante el embarazo por el American College of Obstetricians and Gynecologists. Estos nutrientes incluyen proteínas, fibra, hierro, colina, magnesio, calcio, zinc, selenio y folato. Además, es una valiosa fuente de vitaminas del complejo B.

A pesar de que el Servicio Nacional de Salud de los Estados Unidos también incluye el hummus en su lista de alimentos saludables para embarazadas, es importante evitar el hummus comercial, tanto en tiendas como en restaurantes, debido a ciertas razones que te explicaremos a continuación.

¿Por qué el hummus casero es más seguro que el comercial?

La U. S. Food & Drug Administration (FDA) advierte sobre la importancia de que las mujeres embarazadas eviten las enfermedades transmitidas por los alimentos, ya que estas pueden tener graves consecuencias, como parto prematuro, aborto espontáneo, muerte fetal e incluso afectar la salud de la madre.

Por esta razón, la FDA recomienda que las mujeres embarazadas se adhieran a una dieta que incluya solo alimentos cocidos, evitando aquellos que se consumen crudos. El hummus tradicional, una mezcla de ingredientes que incluye garbanzos cocidos y tahini crudo, representa un riesgo para las embarazadas.

Las semillas de sésamo utilizadas para hacer el tahini se muelen en crudo, lo que aumenta el riesgo de contaminación. Las principales bacterias que pueden contaminar el hummus son la listeria y la salmonella, que causan síntomas como dolores de cabeza, fiebre, diarrea, vómitos y deshidratación, además de representar graves complicaciones durante el embarazo.

Para reducir el riesgo de contaminación por ingredientes crudos, se recomienda tostar las semillas de sésamo utilizadas en la preparación del tahini, ya que el calor puede eliminar las bacterias presentes.

Sin embargo, en el caso del hummus comercial, no se garantiza que las semillas de sésamo se hayan tostado durante su elaboración. Además, la pasteurización del producto aumenta el riesgo de crecimiento bacteriano debido a su baja acidez y alto contenido de agua.

Sumado a ello, se desconocen las condiciones de producción, distribución y almacenamiento del hummus comercial, lo que agrega incertidumbre a su seguridad alimentaria. Por lo tanto, la opción más segura es que prepares el hummus en casa.

Claves a tener en cuenta para preparar hummus casero

Aunque se recomienda preparar el hummus en casa, es importante seguir estas recomendaciones para evitar cualquier tipo de contaminación:

  • Lávate las manos con abundante agua y jabón antes de comenzar la preparación.
  • Asegúrate de que los utensilios de cocina que utilices sean solo para preparar el hummus y no los hayas empleado previamente para manipular ingredientes crudos como carnes o pescados.
  • Si planeas incorporar hierbas frescas, lávalas de forma minuciosa. Lo mismo aplica para los limones que utilizarás en la receta.
  • Una vez que hayas terminado de preparar el hummus, déjalo reposar brevemente y, a continuación, refrigéralo de inmediato en un recipiente hermético.
  • Recuerda consumir el hummus lo más fresco posible y no dejarlo en la nevera por más de 2 días desde su elaboración.

Nutrientes presentes en el hummus

Una vez preparado, puedes consumir una porción diaria de hummus, que equivale a aproximadamente 2 cucharadas o 34 gramos. Según los datos del U.S. Department of Agriculture, esta porción proporciona los siguientes nutrientes.

  • Proteína: 2,49 gramos
  • Grasa total: 5,8 gramos
  • Carbohidratos: 5,05 gramos
  • Grasa monoinsaturada (omega-9): 2,16 gramos
  • Grasa poliinsaturada (omega-6 y omega-3): 2,54 gramos
  • Fibra: 1,83 gramos
  • Zinc: 0,5 miligramos
  • Calcio: 14 miligramos
  • Hierro: 0,8 miligramos
  • Selenio: 5,5 microgramos
  • Magnesio: 24,1 miligramos
  • Colina: 15,8 miligramos
  • Vitamina E: 0,6 miligramos
  • Ácido fólico: 12,2 microgramos

Consumir una porción diaria de hummus puede ayudarte a alcanzar tus necesidades de legumbres, ya que es un alimento muy rico en nutrientes. Además, estos nutrientes están asociados con una dieta de alta calidad y beneficios para la salud.

Algunas ideas para combinar el hummus casero en tu dieta

El hummus es una opción deliciosa y nutritiva que puedes incorporar a tu dieta de diversas maneras. Disfrútalo untado en tostadas integrales durante el desayuno o como una sabrosa opción para tus meriendas.

Además, sirve como un sustituto saludable de la mayonesa y la mostaza en tus sándwiches favoritos. También es un excelente acompañamiento para los chips de pan pita y puede añadir un toque delicioso al puré de papas.

Asimismo, el hummus es perfecto como relleno para huevos. Incorpóralo en tus comidas de proteínas, como pescados o pollo, o disfrútalo como un aderezo sabroso para tus ensaladas. Por último, siempre tienes la opción de degustarlo solo para apreciar su sabor único.

Este versátil alimento no solo aporta una amplia variedad de nutrientes beneficiosos para tu salud, sino que también se adapta a tus preferencias culinarias, lo que lo convierte en una elección perfecta para enriquecer tu alimentación diaria.

¡Prepáralo tú misma y disfrútalo!

El hummus es un alimento nutritivo que brinda una serie de nutrientes clave para las mujeres embarazadas. Sin embargo, para garantizar su consumo seguro durante el embarazo, es fundamental prepararlo en casa y asegurarse de no dejarlo en la nevera por más de 2 días.

Es esencial seguir medidas de seguridad e higiene rigurosas durante su preparación, incluyendo el tostado de las semillas de sésamo. Se recomienda evitar el hummus comercial, ya que puede representar un riesgo para la salud tanto de la madre como del bebé durante el embarazo.

Como siempre, es aconsejable informar a tu médico acerca de cualquier decisión relacionada con la inclusión de alimentos en tu dieta durante el embarazo para recibir orientación y supervisión.

Bibliografía

Todas las fuentes citadas fueron revisadas a profundidad por nuestro equipo, para asegurar su calidad, confiabilidad, vigencia y validez. La bibliografía de este artículo fue considerada confiable y de precisión académica o científica.

Scroll al inicio