Cómo es la terapia LEGO para niños con autismo

¿Sabes en qué consiste la terapia LEGO para los niños con autismo? Te va a gustar descubrirla.

Niños jugando con bloques de construcción.

¿Conoces la terapia LEGO para niños con autismo? Es una terapéutica que les ayuda a relacionarse y que se convierte en una opción maravillosa para muchos niños con esta condición. Podrán relacionarse e interactuar con otras personas mientras participan en la actividad con piezas LEGO.

El autismo se conoce también como trastorno del espectro autista (TEA) y conlleva problemas de interacción social y de comunicación de la persona afectada con el resto del mundo. Es muy amplio y no todos son iguales, ya que los síntomas y habilidades pueden variar mucho de un niño con TEA a otro.

Problemas de comunicación

Es habitual que las personas con autismo tengan problemas de comunicación, de comprensión y empatía. Todo esto les hace más complicado poder expresarse con normalidad, ya sea a través del lenguaje oral, gestual o corporal.Padres jugando con su hijo llevando a cabo la terapia LEGO para niños con autismo.

Además, pueden tener problemas de aprendizaje y de adquisición de habilidades, algo que puede hacer que su desarrollo sea desigual en comparación con otros niños de la misma edad. La interacción con los demás también suele estar muy afectada. Pero sin afán de generalizar, también debemos decir que suelen ser propensos a tener excepcionales habilidades en matemáticas, en arte, en música, en memoria…

Siempre, y como ocurre en cualquier niño con o sin TEA, el juego puede ser el mejor medio para que los más pequeños aprendan y se socialicen. De hecho, para los niños con autismo también resulta un desafío extra, ya que en el juego se tienen que relacionar.

No obstante, con la terapia LEGO los resultados suelen ser maravillosos, pero,¿en qué consiste exactamente y cómo puede ayudar a los niños con autismo?

La terapia LEGO

Generalmente, las construcciones LEGO suelen gustar mucho tanto a niños como a niñas, a pequeños y a mayores. Es una manera de juego que potencia el pensamiento creativo gracias a la construcción. También ayuda a mejorar la cooperación, el trabajo en equipo y a seguir reglas cuando la construcción así lo requiere.

Es una actividad predecible, sencilla y que consta en repetir movimientos y construcciones, por lo que se vuelve bastante interesante para los niños con autismo y se divierten mucho pudiendo jugar realizando este tipo de actividad.

Jugar con LEGO se puede hacer en soledad o con ayuda y a los niños con autismo se les puede incluir en grupos pequeños. Así, podrán hacer una construcción de LEGO con otros niños para que, de esta manera, se potencie una relación interpersonal sin presiones y sin bloqueos emocionales.

Cambio de roles

El niño se convierte en un arquitecto que se encarga de pensar cómo realizar su obra. Después, pasa a ser el ingeniero que llevará a cabo el proyecto con éxito. También puede haber otro compañero en el equipo que facilite las piezas de LEGO, otro que las construya y otro que sea el ayudante principal.

Por supuesto, son ejemplos, pero también son roles que pueden ir rotando en los niños para que la actividad se haga más amena y divertida para todos. El adulto tendrá un rol de mediador por si existen emociones encontradas.

También por si surgen conflictos entre los niños que están haciendo la construcción de LEGO. Es necesario apoyar las interacciones que sean positivas y dar soluciones adecuadas a los conflictos que puedan surgir, siendo el guía y el mediador en todo momento que se necesite.

Todo esto ayuda a que el aprendizaje social sea divertido para el niño con autismo, que se fortaleza esta parte de su interior. Disfrutará de las relaciones interpersonales en una actividad guiada y predecible que le hará sentir bien.Niños jugando con piezas LEGO.

Trabajo en equipo con la terapia LEGO

En definitiva, la actividad consiste en trabajar en grupo asumiendo diferentes roles:

  • Ingeniero y arquitecto (da las instrucciones).
  • Proveedor (proporciona las piezas y elementos necesarios para la construcción).
  • Constructor (el que pone las piezas en el tablero siguiendo las indicaciones del ingeniero/arquitecto).
  • Mediador (el adulto).

El adulto, además de mediador y guía, trabajará en conjunto con el grupo para potenciar varios aspectos como la comunicación, la participación de todo el equipo y para que exista una buena resolución de problemas ante cualquier conflicto que pueda surgir entre los participantes. De esta manera, se mejorará la socialización, las habilidades comunicativas y también las motoras. ¡Es, sin duda, una terapia maravillosa que los niños con autismo deben disfrutar!

Bibliografía

Todas las fuentes citadas fueron revisadas a profundidad por nuestro equipo, para asegurar su calidad, confiabilidad, vigencia y validez. La bibliografía de este artículo fue considerada confiable y de precisión académica o científica.

  • Baron-Cohen, S. (2014) LEGO®-Based Therapy: How to Build Social Competence Through Lego®-Based Clubs for Children with Autism and Related Conditions. Editorial:  Jessica Kingsley Publishers.
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