¿Qué especias puedo tomar en el embarazo?

Cuando inicias el camino hermoso de la gestación, debes comprender ¿qué especias puedo tomar en el embarazo? Para llevar un estado tranquilo.

Escrito y verificado por la nutricionista María Patricia Piñero.

Última actualización: 23 agosto, 2023

Mereces una congratulación si te preguntas ¿qué especias puedo tomar en el embarazo? Pues ya debes saber que no todos los condimentos son seguros durante la gestación. Las especias son muy usadas en la gastronomía por sus principios activos que le otorgan un intenso aroma, color y sobre todo sabor a los platos. Sin embargo, algunos de estos compuestos pueden pasar directo hasta el bebé y causar daño.

Desde aquí te recomendamos ser precavida para no tener problemas con las especias que vas a usar en la cocina. Por eso, además de consultarlo con un profesional, te facilitamos la siguiente lista para que estés al tanto de cuáles puedes tomar.

¿Qué son las especias?

Para estar más claros, comencemos por definir las especias. Estas vienen del latín especies, también conocidas como condimento o condimentum y significa sazonar.

Se refiere a las partes duras de las plantas que se usan para aportar el sabor, el color o el aroma de los alimentos.

Entre estas tenemos cortezas (canela), semillas (mostaza), vainas (vainilla), raíces (jengibre) o bayas (pimienta). También se usa el término para referirse a las hojas de algunas plantas o a sus flores, como el azáfran.

En cambio las hierbas se refieren específicamente a las hojas o tallos de las plantas herbáceas como laurel, orégano, perejil y tomillo, entre otras. Cuando se mezclan las especias con las hierbas, hablamos de condimentos.

¿Qué hay sobre su seguridad?

Está extendida la creencia de que las especias y las hierbas son seguras porque se han empleado desde hace tiempo y por ser naturales. Pero estas características no son garantía de seguridad.

Sus principios activos como aceites esenciales, alcaloides, alcoholes, flavonoides y saponinas, entre muchos otros, son responsables del potente aroma y sabor.

Sin embargo, estos componentes no solo potencian lo sensorial, también pueden causar efectos adversos tanto a la madre como al bebé. Sobre todo si pasan directo a través de la placenta o la leche materna durante la lactancia.

En este contexto, la American Pregnancy Association comenta que su calificación como “seguro” para una hierba o especia puede ser confuso y difícil de interpretar, ya que depende del tipo de uso y la cantidad utilizada.

Por ejemplo, los efectos adversos pueden aparecer cuando se ingieren en altas cantidades, pero en bajas proporciones como las usadas en aderezar alimentos pueden no tenerlos.

Así mismo, no todas las especias cuentan con estudios que evidencien su seguridad para la embarazada. Por esta razón, hay que estar conscientes del riesgo al que se exponen al ingerirlas y, por tanto, hay que consultar a un profesional.

¿Qué especias puedo tomar en el embarazo?

A continuación te mostramos un listado con las especias que puedes ingerir durante el embarazo. Son pocas las que se pueden usar con cierto margen de seguridad, pero igual deben tener la aprobación de un especialista, ya que no todos los embarazos son iguales.

Canela

La canela es la corteza seca del árbol Cinnamomum verum de la misma familia del laurel. Se puede usar tanto entera como molida, y su aroma especial junto con el agradable y dulce sabor le permite aderezar tanto platos dulces como los salados.

Son dos las más populares: la que se utiliza en Europa, llamadas el canelo o canelero de Ceilán, que se enrolla formando las conocidas ramas de canela y, la Cassia o canela de la china, de sabor más picante y de mayor uso en América del Norte.

En cuanto a su seguridad, aún no hay evidencias que apoyen su uso para facilitar el parto. Por el contrario, el Departamento de Salud y Servicios Humanos de EE.UU. da el visto bueno a la canela de Ceilán en el embarazo. Siempre y cuando se tome en las cantidades habituales en las preparaciones.

En el caso de la Cassia, su uso está más restringido, por la presencia de una sustancia activa llamada cumarina que puede dañar el hígado. Sobre todo cuando se ingiere en personas sensibles y de manera prolongada.

Jengibre

El jengibre es la raíz o rizoma de la planta y se encuentra entera, en polvo o cortada en láminas. Es muy aromática y tiene un sabor especiado, penetrante, picante y dulzón.

En la culinaria se usa en platos dulces a base de fruta o para preparar la famosa galleta o pan de jengibre. También en preparaciones saladas como verduras salteadas, salsas, carnes, sopas cremas, pescados y mariscos.

Son reconocidas sus propiedades analgésicas, antiinflamatorias y digestivas. Una revisión sobre su uso en el embarazo reveló que es seguro y eficaz para aliviar los síntomas de náuseas y vómitos, comparable a la toma de vitamina B6 o piridoxina. Sin embargo, se enfatiza en la cantidad a utilizar, ya que no puede ser más de 1 gramo al día.

Semillas de mostaza

La mostaza es una planta de la familia de las crucíferas con un gran interés gastronómico. Sus semillas pueden ser blancas, amarillas amarronadas (Brassica alba) y negras (Brassica nigris). Cuando se muelen las amarillas se transforman en la tradicional salsa que tiene un fuerte sabor acre.

Su sabor es un poco picante y se usa para condimentar carnes y como aderezo de ensaladas y verduras. Mientras se use de manera moderada no está contraindicada en el embarazo.

Aunque la revista Offarm publicó desde hace tiempo que la mostaza negra no se recomienda en el embarazo ni en la lactancia, puesto que se desconocen datos que avalen su seguridad.

Clavos de olor

Los clavos de olor son capullos de flores secos y sin madurar, de una planta originaria de Indonesia llamada el clavero.

Es una de las especias más ricas en un aceite esencial llamado eugenol, también presente en la canela, el laurel y la nuez moscada. Es capaz de aliviar trastornos digestivos como náuseas y vómitos, por lo que puede ser usado en el primer trimestre de embarazo.

Su olor y sabor invasivo se usa en la cocina para platos dulces y salados como las carnes en estofados y el marinado de carne de caza.

A pesar de que hasta ahora no hay evidencias científicas que enciendan las alarmas sobre prohibir su uso en el embarazo, siempre hay que limitarse a la cantidad del principio activo ingerido con la especia.

Ajo en polvo

El ajo es una especia perteneciente a la familia Liliaceae, originaria de Asia. Desde la Antigüedad se usan sus bulbos con fines culinarios, en especial como aderezo y marinados a base de carnes y pescados. Sin embargo, también puede ser usado en verduras y hortalizas.

La farmacéutica López Luengo señala que no hay suficientes informes científicos acerca de los efectos adversos del ajo durante el embarazo o la lactancia. Sin embargo, se recomienda no ingerir dosis que excedan a las cantidades utilizadas en las preparaciones.

Las cantidades de ajo en polvo a consumir por la embarazada deben ser consultadas con un especialista. Tomando en cuenta que para un adulto es de 600 a 900 miligramos al día. Lo que si está claro, es que el ajo altera el sabor de la leche materna y en consecuencia afecta la conducta de los lactantes.

¿Qué hay con el resto?

Otras especias como la cayena, la nuez moscada, la pimienta, el azafrán, el comino, el regaliz, el hinojo, las semillas de fenogreco y la cúrcuma son de alta cautela en cuanto a su uso en la embarazada. 

Es importante consultar siempre a un profesional como un herbolario sobre otras hierbas tradicionales en la cocina y garantizar la inocuidad de estos productos.

Recuerda que las cantidades sugeridas de las especias que se pueden tomar en el embarazo son aquellas contenidas en los alimentos o preparaciones.