Mi bebé solo quiere estar en brazos: ¿qué hacer para solucionarlo?

El simple hecho de que un bebé solo quiera estar en brazos puede ser estresante para muchas madres. Sin embargo, ellos requieren de tu atención para sentirse protegidos y amados. Para que no te frustres, puedes optar por alternativas como las que aquí se proponen.

Revisado y aprobado por la psicóloga María Alejandra Castro Arbeláez.

Escrito por Equipo Editorial

Última actualización: 06 diciembre, 2022

La realidad es que cargar a tu bebé es natural; de hecho, ellos lo necesitan. Esto se debe a que llevar al niño en brazos es una de las principales maneras de fortalecer la relación entre padres e hijos. Ahora bien, no siempre hay tiempo para cargarlos. Es por eso que puedes preguntarte: ¿Qué hago si mi bebé solo quiere estar en brazos?

Cargados sienten confianza y protección. En términos evolutivos, la cercanía física facilita la alimentación, regula la temperatura, y el bebé escucha, conoce y ve mejor a sus cuidadores.

Hay estudios incluso, que relacionan el natural acunado en el brazo izquierdo con la cercanía al corazón y “la especialización cerebral con la que se procesan las emociones”.

Cómo hago tareas del hogar si mi bebé solo quiere estar en brazos

Es cierto que los bebés necesitan atención. Sin embargo, cómo puedes hacer para equilibrarte con las labores hogareñas si el bebé solo se calma en brazos. Puedes aplicar las sugerencias que verás a continuación:

• La solución más sencilla es aprovechar los momentos en los que tu pequeño está dormido. De esta manera, podrás realizar las tareas sin inconvenientes. La desventaja de esta opción es que, cuando él duerme, tú también deseas descansar.
• Por eso, otra sugerencia es que adquieras en el mercado un morral porta bebés, mejor conocido como canguro. Con este accesorio, tendrás las manos libres para trabajar con tranquilidad y tu bebé recibirá el afecto de mamá que tanto necesita. Pero eso sí: evita usar el morral al cocinar, pues es peligroso. Una ventaja de este elemento es que, al salir a pasear, tendrás más comodidad, sobre todo si tienes que llevar muchas cosas.
• Algunas madres optan por colocar al bebé en el coche de paseo y ubicarse en un lugar donde el niño aún pueda verla. El contacto visual con la madre puede tranquilizar al niño y disminuir la necesidad de atención. También es posible distraerlo con un juego y hablarle de vez en cuando para que se sienta acompañado.

Uno de los consejos más escuchados en estos casos es “déjalo que llore”, sin embargo, esto puede ser perjudicial para el bebé. Dejarlo llorar puede traer consecuencias en el desarrollo afectivo, ya que sentirá el abandono de sus padres y podría tener problemas de autoestima al crecer.

¿Y cuando solo quiere estar en brazos y no quiere su cuna?

En el tránsito de ganar autonomía los brazos y el colecho son la opción que exigen los bebés con apego. Cuando están despiertos necesitan y piden el contacto físico y visual, y cuando tienen sueño, el calor y la presencia de la madre.

Preparar las condiciones para que duerma en la cama con los padres garantiza una noche tranquila además de que se cultivan poderosos lazos afectivos. Se alimenta mejor, duerme más y llora menos.

Es preciso tomar las medidas necesarias para lograr que vaya a su cuna, sí, pero de manera gradual, sin afectar su tranquilidad y confianza. Una estrategia que suele dar resultado es, una vez dormido en su coche, llevarlo a su cuna.

¡Importante! Los coches no están diseñados para dormir, sin embargo lo adormecen el movimiento, la vibración y el ruido; por eso, al caer profundo, trasládalo a un lugar cómodo y seguro.

¿En qué momento el bebé necesita adquirir independencia?

Aunque durante los primeros meses de nacido tu bebé necesita estar en brazos para sentirse protegido y querido, a medida que va creciendo, es importante que le enseñes a ser un poco más independiente y a valerse por sí mismo.

Por ejemplo, si ya tiene 1 o 2 años, no deberías acudir a él apenas llore; esto hará que crea que puede controlarte con un simple llanto.

Aun así, eso no quiere decir que vas a ignorar a tu bebé por completo, pues todavía requiere de tu protección y cuidados. Sin embargo, tienes que evitar la sobreprotección.

¿Cómo evitar la sobreprotección?

Una manera es cambiando las perspectiva que se tiene del bebé como un ser frágil y que no está capacitado para desenvolverse en sus actividades. Al respecto, la teoría de Pikler postula que «El entorno es condición indispensable para el desarrollo autónomo de todo bebé y niño».

Esto pasa por un desarrollo de las actividades cotidianas en un ambiente que proporcione libertad, seguridad y confianza, que sea acogedor, seguro y saludable. Con la presencia del adulto para atender y cuidar, pero guardando distancia «durante la actividad libre y autónoma del bebé».

También, se han de tener a mano materiales adecuados a su momento evolutivo, en lo que refiere a vestido, alimento, juego, movimiento, entre otros elementos.

Quítate de la mente la idea de que tu bebé no entiende

Ellos son muy inteligentes y pueden captar lo que les enseñes. Así que, explícale que debe ser paciente y esperar a que mamá se desocupe o que mamá está agotada y precisa un descanso.

Tal vez al principio no te haga caso y siga quejándose. Esta reacción se debe a que no ha desarrollado autocontrol. Aun así, no cedas; solo de este modo aprenderá a pensar también en los demás y a entender que no siempre será el centro de atención.

Esto no implica que serás ruda con él, ya que puedes enseñarle a sentirse seguro a pesar de que no esté tan cerca de ti. Para alcanzar esta meta, puedes:

• Permitir que papá también lo cuide.
• Invitar a otras personas de confianza a tu casa y que jueguen con él.
• Proporcionarle juguetes coloridos y que produzcan ruidos, así se entretendrá.
• Darle una fruta o un pedazo de galleta, con lo que se calmará por un rato.
• Permitir que ande por la casa, bien sea en la andadera o gateando. Recuerda que debes tomar las medidas de seguridad necesarias para que no corra peligro mientras conoce su ambiente.

¿Y si mi bebé solo pide brazos al ir de paseo?

A los niños les encanta salir. En esos momentos, se sienten libres y aprenden nuevas cosas y por eso les gusta andar solos. Sin embargo, si tu pequeño quiere que lo cargues mientras andas de paseo, puede ser un síntoma de cansancio.

Es por esa razón que debes planear bien tus salidas. De lo contrario, te tocará llevarlos en brazos y te agotarás. He aquí algunas sugerencias:

• Antes de salir, guarda en tu mochila suficiente agua y comida. Así se mantendrá más tiempo con energías.
• También lleva juguetes para que se entretenga al aire libre, como un balón.
• Si aún no camina, opta por siempre cargar el coche para bebés. Este también funciona para los que ya han dado sus pasos; si se agotan, los traerás de vuelta a casa en él.

En último lugar, recuerda que si tu pequeño bebé solo ansía ir en brazos, no es solamente por capricho, sino que lo necesita. Entonces, ofrécele todo el amor que merece y poco a poco enséñale a ser más independiente.