19 actividades con música y ritmo para estimular la creatividad en los niños

Las actividades con música son un recurso maravilloso para fomentar la creatividad de los niños. ¿Quieres conocer algunas para divertirte con tus hijos este fin de semana?

Revisado y aprobado por la psicóloga Mara Amor López.

Escrito por Mara Amor López

Última actualización: 09 febrero, 2023

Todos sabemos que la música es un excelente recurso educativo, pero ¿sabías que ciertas actividades con música contribuyen a estimular la creatividad de los niños?

Desde que los bebés están en la barriga de su mamá, se recomienda ponerles melodías para desarrollar su cognición. Pues se ha comprobado que la música ofrece muchísimos beneficios para el cerebro humano.

Por eso hoy te vamos a proponer 19 actividades musicales para trabajar con niños y, lo que es mejor, casi sin preparación ni materiales. Veamos.

Actividades con música para estimular el cerebro de los niños y su creatividad

La educación musical ha demostrado jugar un papel importante en el desarrollo de los niños, así lo explica este estudio que recopila algunos de sus beneficios.

Aprovechemos entonces para realizar en la casa o la escuela estas actividades que, además de estimular la creatividad infantil, son una forma de entretenimiento para chicos y grandes. ¡A tomar nota!

1. Tocar diferentes instrumentos musicales

La propuesta es tan simple como darles a los niños distintos instrumentos musicales para que los hagan sonar: maracas, flautas, tambores, panderetas, zambombas o guitarras infantiles.

Además de dejar que se expresen con espontaneidad, podemos ayudarlos a descubrir diferentes ritmos. De esta manera, la actividad resulta más divertida y creativa.

2. Utilizar el cuerpo para hacer música

Este tipo de actividad también se conoce como body percussion, pues se trata de hacer música con las partes de nuestro cuerpo: aplaudir, palmear la barriga, golpear los pies contra el suelo y mucho más.

3. Hacer sonidos con la boca

En línea con lo anterior, podemos invitar a los peques a experimentar con los sonidos que se obtienen de las diferentes posturas de la boca. Por ejemplo, decir una «a» larga no es igual que una corta, ni tampoco suena igual la «o» con la boca más cerrada.

Asimismo, podemos taparnos la nariz o silbar y con estos sonidos distintos inventar una melodía. ¡Seguro que suena genial!

4. Repetir sonidos

Si combinamos las dos actividades con música anteriores, podemos jugar al «Simón dice». Los padres podemos hacer diferentes sonidos con el cuerpo y la boca y los niños tienen que repetir esos ritmos.

Además de estimular la creatividad con este juego, los haremos ejercitar la memoria.

5. Imitar sonidos

Utilizar los sonidos del entorno para que los niños los imiten es muy educativo y didáctico. Probemos con el sonido de un animal, el ruido de un electrodoméstico, el de un coche o cualquier otro que se te ocurra. Además, podemos hacerlo en cualquier lugar, ya sea un parque, la casa o mientras salimos de excursión.

6. Escuchar y describir los sonidos del ambiente

Se pueden utilizar los sonidos del entorno para ampliar las habilidades del lenguaje de los peques. Basta con prestar atención a todos los sonidos de nuestro alrededor, ser más conscientes de ellos y tratar de describirlos con nuestras propias palabras. Vamos a hacerlo por turnos, primero los niños y después los adultos.

Aparte de educativa, esta actividad también nos permite conectarnos con el mundo que nos rodea y detenernos un momento para sentir y escuchar.

7. Imaginar e inventar historias a partir de música o sonidos

Ponemos una canción y les pedimos a los niños que escriban una historia o un cuento a partir de lo que la canción les sugiere. Eso si, debemos prestarles ayuda.

8. Bailar

Otra de las actividades con música fantástica para hacer con niños es el baile. Debemos poner distintas canciones y bailar hasta que duelan los pies.

Esto a algunos les resulta muy divertido, los ayuda a relajarse y desinhibirse mientras se ejercitan. Por otro lado, el movimiento corporal es la excusa perfecta para liberar esa energía intensa que todos los niños tienen.

9. Danzar la música

Esta es una actividad recogida en la « Propuesta didáctica para estimular la creatividad y la inteligencia emocional desde el Área de Educación Cultural y Artística». Consiste en crear dos grupos, una parte de los miembros de la familia se sienta, mientras la otra se libera en el espacio.

Se coloca una música, el investigador sugiere Sabre dance del compositor Aram Khachaturian. El grupo que está de pie comienza a mover su cuerpo con rapidez, cuidando de no lastimar a nadie, imaginando que son perseguidos, que son de plastilina, etc. El grupo que está sentado observa esperando su turno.

Una variante es hacer los movimientos lo más lento posible. Para esta parte se propone Générique et car de police de Jean Constantin.

10. Somos marionetas

En la investigación «Desarrollo de la expresión corporal a través de juegos musicales», se plantea esta original actividad: los niños están de pie y tienen que asumir que son marionetas. Cada uno adopta la forma que quiera, según como los tensan o los sujetan los hilos imaginarios.

Un adulto coloca una música y los niños marionetas bailan. Luego quita la música y con un pandero va tocando, y cada vez que toca nombra una parte del cuerpo cuyo hilo imaginario se corta. Cuando esto ocurre, esa parte ‘se cae’.

El juego termina al romperse todos los hilos que sostenían las distintas partes del cuerpo. Se practica así el equilibrio, la conciencia corporal y el control del cuerpo.

11. Construir instrumentos

Además de utilizar los instrumentos tradicionales podemos hacer nuestros propios instrumentos con los materiales que tengamos en casa. Por ejemplo, unas maracas con botellas vacías y un poco de arroz o una guitarra con un trozo de cartón y lana.

12. Pintar la música

Aquí combinamos dos formas de arte distintas: la música y el arte gráfico.

Debemos elegir dos canciones con ritmo, estilo, velocidad e intensidad distinta y cuando las encontremos, haremos lo siguiente:

• Taparle los ojos al niño para que la escuche así.
• Pedirle que trate de dibujar lo que le ha sugerido esa canción.
• Hacer lo mismo con la segunda canción y cuando tenga los dibujos de ambas, comentaremos con él o ella lo que significan.

13. Canciones en el aire

Esta actividad forma parte de una Propuesta con base en la música para promover la creatividad y aprendizajes significativos en los niños. Se realiza acostando a los niños en círculo con los ojos cerrados para que escuchen una canción.

Luego, con los dedos en el aire, dibujan los ritmos que escuchan y sienten. Una variante es, sentados en columnas, dibujar la música con los dedos en la espalda de un hermano o primo.

Después, cambiar de posición y repetir el ejercicio. Finalmente, comentar la sensación al dibujar y al sentir cuando dibujan en su espalda.

14. Buscar una canción para explicar nuestro estado emocional

Podemos jugar a ponerle una canción a nuestro estado emocional. Debemos preguntarle al pequeño cómo se siente y qué canción representa para él este estado. De igual manera, indagaremos qué música le viene a la mente cuando está enojado, triste o contento.

Como lo afirma la investigadora Ximena González, en un artículo recogido en el libro Las emociones en los procesos pedagógicos y artísticos en el que se explora la interacción musical como forma de comunicación, «la música se muestra como una importante herramienta para cultivar y reforzar  la emocionalidad y las identidades sociales».

15. Karaoke en casa

Podemos poner en YouTube alguna canción que nos guste y que conozcamos todos los miembros de la familia. Optamos por su versión en karaoke y a continuación, elegimos algunas de las siguientes actividades con música:

• Jugar a la banda de rock: imaginemos que somos la banda del momento y cantemos en duetos, cuartetos o de forma individual las canciones que más nos inspiran. Lo importante es pasarlo bien y reír a carcajadas.
• Hacer un concurso de talentos: si somos muchos, podemos hacer equipos y batirnos a duelo. Un miembro del clan debe oficiar de jurado y otorgar puntos a cada interpretación. Al final, el equipo que mayor puntaje tenga ganará el premio.

16. Crear una Webquest musical

La actividad consiste en suministrar a los niños enlaces a archivos de audio, videos e imágenes, referidos por ejemplo, a música folclórica de cualquier país del mundo. En el artículo «La educación musical como potenciadora de la creatividad», los autores proponen música de los indios navajos, japonesa, valenciana, una canción zulú, una hebrea y una inglesa.

17. Cazar sonidos

Los niños se organizan en grupos y se les pide que elaboren un listado de sonidos que se pueden escuchar en lugares determinados. Luego, un representante por equipo reproduce los sonidos que el grupo anotó. Los integrantes de los otros grupos deben descubrir de qué sonidos se trata.

Al final, seleccionan cinco sonidos y crean una historia que pintan y exponen a todos.

18. Historias de papel

Los niños aprenden una canción y con materiales de reciclaje se disfrazan para dramatizar la canción seleccionada.

Esta actividad y la anterior, forman parte de un conjunto de propuestas para desarrollar la inteligencia musical presentadas en un Programa educativo para descubrir y estimular las inteligencias múltiples en niños de educación inicial.

19. Contar una historia con sonidos

Para realizarla necesitamos que los niños puedan acceder a un banco de sonidos: de la naturaleza, de la ciudad, ambientales, domésticos, de animales, etc. Hay muchas opciones gratuitas en la red.

La idea es construir una historia empleando para la trama solo sonidos. Se necesitan personajes y una historia con principio, desarrollo y final. Y con el concurso de estos elementos, lograr a través de distintos sonidos reproducir escenas y situaciones.

Beneficios de las actividades con música para estimular la creatividad

Las ventajas de este arte son incontables y le ofrece a los niños múltiples beneficios. Según un estudio publicado en la Revista Paidagogo, las actividades con música:

• Favorecen el desarrollo de la inteligencia.
• Ayudan a superar algunos problemas de aprendizaje porque optimizan la concentración.
• Funcionan como estrategia terapéutica para algunos trastornos y deficiencias de los niños.
• Mejoran la autoestima.
• Nos permiten pasar tiempo de calidad en familia. 

Por todo lo mencionado, no dudemos en poner en práctica estas actividades para desarrollar la creatividad de los hijos y pasar ratos muy divertidos. ¿Te animas?