7 causas que pueden provocar contracciones antes de lo previsto

Las contracciones "prematuras" pueden relacionarse con algunos riesgos. Sin embargo, también pueden ser inofensivas. Descubre cuáles son los desencadenantes más frecuentes.

Si te encuentras en los primeros meses de embarazo y de repente comienzas a sentir una actividad abdominal anormal en la que posiblemente sientes que se endurece tu vientre bajo, podrías estar teniendo contracciones. Si estás a más de la mitad de la dulce espera, no hay por qué preocuparse, puede tratarse de una contracción de Braxton-Hicks.
Estas son algo común después del segundo trimestre de embarazo, casi todas las mujeres que están en la dulce espera las experimentan. Son diferentes a las que se sienten en el trabajo de parto porque son momentáneas y no aumentan de intensidad.

¿Qué son las contracciones de Braxton-Hicks?

Las también llamadas contracciones falsas representan una situación de incertidumbre, en especial en las madres primerizas. Según diversas publicaciones, representan la actividad del útero que se está preparando poco a poco para el momento del parto, a pesar de que este se encuentre todavía muy lejano.

Muchas madres no reciben suficiente educación respecto a este fenómeno, por lo que interpretan dichas contracciones como una señal inequívoca de una complicación o del inicio del trabajo de parto. Las contracciones de Braxton-Hicks tienen las siguientes características:

  • Son de leve intensidad.
  • Tienen una corta duración.
  • Son eventos irregulares.

7 factores que podrían estarte causando contracciones

Las contracciones falsas pueden ocurrir como consecuencia de varios eventos. A continuación te detallamos los más importantes.

1. Amamantar

Si quedaste embarazada muy pronto después de dar a luz a tu bebé, es probable que aún lo estés amamantando. Si no lo sabias, la acción de amamantar un bebé mientras estás en la espera de otro hijo, puede incrementar las molestias abdominales que se producen con las contracciones.

Por lo cual es prudente y se recomienda para estos casos que si ya tienes hijos, procura que hayan dejado la etapa de lactancia antes de buscar un nuevo embarazo.

2. Los antojos

Cuando se trata de antojos dulces en el embarazo, debes tener cuidado con no excederte. El azúcar que llega al bebé a través del cordón umbilical lo sobreestimula haciendo que este se mueva más dentro de tu barriguita, lo cual podría hacer que tengas ciertas molestias abdominales que originen estas contracciones.

3. Hacer el amor

El hecho de que estés embarazada no quiere decir que la actividad amorosa en tu cuarto deba cesar, por el contrario, estando embarazada es cuando más debes hacer el amor con tu pareja. ¿Por qué? El estado de excitación alcanzado durante el sexo hace que se relajen aún más los músculos pélvicos y las hormonas te darán aún más excitación.

Por otro lado, eso que hace que después de tener relaciones sexuales parezca que tienes contracciones es el semen. Así que para evitar que estas ocurran es prudente que utilices métodos de barrera como preservativos o diafragmas que impedirán el paso del mismo y así la actividad en tu alcoba no tendrá que acabar.

4. Hacer mucha actividad física

Este sin duda es uno de los retos más fuertes de la maternidad, sobre todo si eres de esas mujeres que están acostumbradas a hacer todo por sí solas. Te recordamos que el embarazo si bien no es una enfermedad para postrarte en tu cama, es una etapa donde debes extremar cuidados y dejar de realizar ciertas actividades por un tiempo.

La mayoría de los médicos obstetras recomiendan que empieces a andar más despacio, esto con el fin de evitar caídas y agitación y sobre todo no levantar peso. Si mantienes siempre estos consejos en cuenta lograrás evitar esas falsas contracciones que pueden asustarte.

5. Las infecciones

Otra gran causa de las contracciones prematuras y quizás la más común, son las infecciones que son tan habituales durante el embarazo. Las bacterias irritan tus zonas íntimas, por lo que lo más recomendable al sentir algo irregular es visitar a tu especialista. Síntomas como los que se experimentan en infecciones urinarias o vaginales pueden producirte contracciones en el desarrollo de tu embarazo.

6. Tocar el abdomen

Es una costumbre muy común acariciar el abdomen materno para sentir que se está cuidando al bebé. A pesar de no ser una práctica dañina en absoluto, la estimulación prolongada podría favorecer contracciones falsas en algunas madres predispuestas por cualquiera de los elementos en este listado.

7. El estrés

La mente maneja el cuerpo, eso es totalmente cierto. Por eso, durante tu embarazo trata de alejarte de situaciones de tensión y evita las fuertes emociones como la rabia o el enojo, estos factores psicológicos pueden desencadenarse en contracciones involuntarias.

Cuando te encuentres en situaciones de estrés, recuerda que la mente lo domina todo, respira profundo inhalando y exhalando o canta una canción y olvídate de todo lo malo y negativo. Lo más importante es mantener tu mente tranquila en esta etapa que solo durará unos meses.

¿Falsas contracciones o parto prematuro?

Lógicamente, toda madre puede llegar a pensar que las contracciones falsas pueden dar origen a un parto prematuro. Al respecto, un artículo de investigación explica que existen varias causas que pueden llevar a este evento, incluyendo las infecciones como la corioamninitis y la ruptura prematura de membranas.

Si las contracciones se hacen muy dolorosas, regulares y prolongadas, es importante acudir al médico. Esto es especialmente importante si se presentan otros síntomas como sangrado, fiebre o palpitaciones.

Contracciones prematuras: molestas pero no peligrosas

Si se trata de una contracción falsa, la buena noticia es que son temporales y que los cambios posturales pueden ayudar a que disminuya la sensación. Quedarte en reposo o acostarte de forma lateral ayuda mucho con esto.

Evitar lo que te pueden causar estas falsas contracciones es muy fácil ya que no son tareas titánicas, solo ten en cuenta estos pequeños consejos para que tu embarazo resulte muy tranquilo y sin sobresaltos. Mantente atenta a cualquier síntoma anormal y no dudes en consultar con tu especialista cualquier inquietud.

Bibliografía

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  • OCHOA, A. y PEREZ DETTOMA, J.. Amenaza de parto prematuro: Rotura prematura de membranas. Corioamnionitis. Anales Sis San Navarra [online]. 2009, vol.32, suppl.1 [citado 2022-08-27], pp.105-119. Disponible en: . ISSN 1137-6627.
  • Raines D, et al. Braxton Hicks Contractions. Disponible en: https://www.ncbi.nlm.nih.gov/books/NBK470546/.
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