¿Tu hijo se deja la chaqueta en el colegio con frecuencia? ¿Se le olvida dónde deja las cosas o incluso, las pierde? ¿Se le pasa apuntar las tareas del cole en su agenda? Si la respuesta es que sí, probablemente tu hijo sea muy despistado, pero hoy te daremos algunas claves para ayudarlo.
Un niño despistado no es lo mismo que un niño distraído. Cuando hablamos de distracción nos referimos a la dificultad para concentrarse, no al hecho de ser olvidadizo. Puede que esto también sea un rasgo típico suyo o bien, que no descanse bien o necesite establecer más rutinas y organización.
Como padres, debemos acompañar a nuestro hijo para que esos despistes no interfieran de forma negativa en su día a día. ¡No dejes de leer!
Posibles causas por las que tu hijo es muy despistado
Las causas por las que un niño es despistado pueden ser variadas, pero te vamos a contar las más frecuentes y aquellas que deberías conocer:
- Falta de descanso. No dormir las horas suficientes para su edad o no lograr un sueño de calidad pueden afectar a su memoria. Incluso, el cansancio acumulado provocado por una sobreestimulación o un exceso de actividades también puede dejar mella en esta capacidad.
- Depresión infantil.
- Problemas visuales o auditivos.
- Preocupaciones permanentes.
- Estado nervioso. El cortisol, la hormona del estrés, interfiere negativamente en la capacidad de registrar y evocar recuerdos.
- Malnutrición. La alimentación poco saludable y carente en nutrientes esenciales condicionan negativamente a la memoria.
- Trastorno por déficit de atención con o sin hiperactividad (TDAH).
¿Cómo ayudar a tu hijo si es muy despistado?
Si nuestro hijo es muy despistado podemos ayudarle para que esta situación mejore, pero ¿cómo? Te damos las claves a continuación
1. Comprende de dónde vienen esos despistes
Ya hemos visto anteriormente que son varias las causas posibles de que el niño sea despistado. Es importante indagar para averiguar cuál puede ser el motivo o si, simplemente, es parte de su forma de ser. Esto lo podemos saber si siempre ha sido despistado o es de un tiempo a esta parte cuando se han acentuado estos despistes.
Ten en la mente estas preguntas para conocer la génesis del problema: ¿le preocupa algo? ¿Ha pasado algo en la familia o en casa? ¿Ha habido algún cambio importante en su vida? ¿Está bien en el colegio?
2. Incorpora rutinas en su día a día
Es muy importante que el niño tenga unas rutinas bien establecidas, así como una buena organización para reducir sus despistes.
Cuando una rutina se transforma en un hábito, la acción se hace de forma automática y no se depende de “recordatorios” para hacerlo.
De esta forma, no tendremos que repetirle constantemente que no se olvide la campera en la escuela, porque guardarla en la mochila formará parte de sus actividades cotidianas.
3. Utiliza recordatorios
Los recordatorios ayudan a tu hijo a que no olvide ciertas cosas, por ejemplo, lo que debe llevar al cole a otro día, las tareas que tiene que hacer o las actividades de cada día. ¡Puedes utilizarlo para cualquier cosa!
La intención es que con el tiempo no necesite estos recordatorios o sea él mismo quien se los haga. De esta manera, estarás fomentando su autonomía.
Algunos elementos útiles que se pueden emplear son los siguientes:
- Alarmas.
- Post-it®.
- Anotaciones en su agenda.
- Planificador u horario en algún lugar visible de la casa.
- Notas o recordatorios verbales grabados.
4. Reduce sus distracciones
En general, los niños suelen despistarse con frecuencia, pues cualquier elemento de su entorno puede captar su atención. Por eso, es importante evitar el exceso de distracciones a la hora de hacer una tarea. Te enseñamos algunos ejemplos:
- Que no tenga televisor en su habitación y si lo tiene, que lo apague mientras hace sus deberes.
- Ayudarle y animarle a mantener su habitación en orden: guardar sus juguetes donde corresponde, el suelo despejado y la ropa en el ropero.
- Mantener el móvil o tableta fuera de su campo visual al momento de los deberes o al hacer alguna tarea especial en la casa.
5. Anímale a que utilice su agenda
La agenda es un excelente recurso que nos ayuda a todos a organizarnos mejor y a planificar la semana para que no se nos pase nada. Enséñale esta virtud a tu hijo e incentívalo a utilizarla para poder recordar mejor las cosas que tiene que hacer.
Para motivarle aún más, puedes proponerle decorarla a su gusto y así tal vez le resulte más atractiva.
El objetivo final es contribuir a que se establezca un hábito de registrar los pendientes y consultarlos cada día para que no se le olvide nada.
Si tu hijo es muy despistado, ¡no desesperes!
Si tu hijo es muy despistado puede que su comportamiento consuma tu paciencia, sobre todo cuando pierde las cosas. Aquí lo importante es averiguar si ese despiste obedece a alguna causa concreta para ayudarlo a resolverla.
No debes enfadarte con sus errores y debes hacer el esfuerzo de aceptarlo tal y cómo es. Pues, muchas veces, esto es parte de su forma de ser y es fundamental contar con la empatía de la familia para mejorar su desempeño.
Bibliografía
Todas las fuentes citadas fueron revisadas a profundidad por nuestro equipo, para asegurar su calidad, confiabilidad, vigencia y validez. La bibliografía de este artículo fue considerada confiable y de precisión académica o científica.
- Alonqueo, P., & Soto, P. (2011). ¿Es despistado o está despistado?: Infiriendo la estabilidad de los rasgos psicológicos. Psykhe (Santiago), 20(2), 87-100. En internet: https://scielo.conicyt.cl/scielo.php?pid=S0718-22282011000200008&script=sci_arttext&tlng=n
- De la Gándara, J., García, X. R., & Pozo, J. V. (2006). Despistado, acelerado e inquieto.¿ Es hiperactivo. Barcelona: Planeta Prácticos.
- Hasan, H. (2020) TDAH. Disponible en: https://kidshealth.org/es/parents/adhd.html