Los purés son una excelente preparación para incrementar el aporte nutricional. Cuentan con vitaminas, antioxidantes e incluso proteínas de alto valor biológico. Ayudan a mantener la homeostasis en el medio interno y generan un buen estado de salud a medio plazo.
Por otra parte, cabe destacar que existen múltiples recetas para preparar purés. Son muchos los alimentos que se pueden triturar y combinar, generando, de este modo, platos con diferente concentración de nutrientes. Con las recetas que te enseñaremos a continuación asegurarás que el bebé se encuentra un poco más saludable.
¿Por qué purés nutritivos?
Lo cierto es que los purés cuentan con una gran ventaja: la comodidad en cuanto a su consumo. Su textura permite que los niños los coman desde muy pequeños, por lo que resultan preparaciones ideales en el contexto de la alimentación complementaria.
Por otra parte, cuentan con un sabor que también genera gran aceptación. La mezcla de ingredientes suele enmascarar los gustos más fuertes, lo que permite la inclusión en la dieta de ciertos vegetales que pueden ser rechazados durante las primeras etapas de la vida.
¿A qué edad se puede empezar a tomar purés?
A partir de los 6 meses, cuando se inicia la alimentación complementaria, se puede incluir el puré en la dieta. En cuanto a su textura, no presentan complicaciones; se degluten de manera óptima. Sin embargo, sí que hay que tener cuidado con los ingredientes que los constituyen, pues hay que evitar antes del año aquellos susceptibles de generar alergias.
Recetas de purés
A continuación, te vamos a presentar ahora unas recetas sencillas de purés para niños.
Puré de calabaza
La calabaza destaca fundamentalmente por su contenido en vitamina C. Este nutriente es clave para mantener una buena función inmune, según un estudio publicado en Nutrients. También incrementa la síntesis de colágeno, la proteína más abundante en el cuerpo humano.
Para preparar puré de calabaza tan solo hay que añadir en una olla 500 gramos de calabaza, 2 puerros, 2 zanahorias y 1 patata mediana cortadas en trozos. Todos los vegetales sin piel. Se rehogan ligeramente con aceite de oliva virgen extra y se cubren de agua con sal. Tras 30 minutos, se bate todo con una trituradora y listo.
Puré de calabacín
La elaboración del puré de calabacín se asemeja mucho a la de la versión anterior, aunque varían ciertos ingredientes. En este caso, se añaden a la olla 400 gramos de calabacines cortados, 200 gramos de patatas, 1 puerro, 1 cebolla y 1 diente de ajo. Se rehoga ligeramente y se cubre de agua. Tras 30 minutos a fuego medio, se tritura y se corrige de sal.
Puré de verduras y arroz
No siempre han de ser los tubérculos las fuentes principales de carbohidratos. Es posible también introducir arroz en la dieta de los niños. Este cuenta con una gran concentración de fibra, que ayuda, entre otras cosas, a reducir el riesgo de estreñimiento, según un estudio publicado en Alimentary Pharmacology & Therapeutics.
Para llevar a cabo esta receta es necesario seguir los siguientes pasos. Se introducen 2 zanahorias, 1 tomate y 1 calabacín grande en una olla, junto con el puerro. Se cubre de agua y se cocina hasta que rompa a hervir. En este momento se añade el arroz y se deja al fuego unos 10 minutos más. Una vez pasado el tiempo se tritura todo y ya está listo para su consumo.
Puré de verduras y pollo
En este caso tenemos una opción con un mayor contenido en proteínas. Además de un tomate, 2 zanahorias, 1 puerro y 1 calabacín, será necesario introducir en la olla 60 gramos de pechuga de pollo magra. Se cuece el conjunto durante 30 minutos a fuego medio y se tritura.
Puré de verduras y pescado blanco
Cuando se utiliza pescado para la preparación de puré hay que ser especialmente cuidadosos. Un fallo higiénico en este punto podría resultar negativo para la salud del bebé. Es importante utilizar especies de peces que cuentan con poco riesgo microbiológico y cocinarlas adecuadamente.
Lo mejor será siempre usar lomos de merluza congelados para esta receta (unos 300 gramos). Se introducirán en una olla junto a un calabacín, 2 zanahorias, 1 tomate, 1 puerro y un chorro de aceite de oliva virgen extra. Tras un breve rehogado, se cubre con agua y se cocina durante 40 minutos, triturando el resultado final. Es fundamental que los lomos de merluza estén libres de espinas; hay que cerciorarse de ello.
Puré de zanahoria y patata
Es una de las versiones más clásicas de purés. Simplemente se añaden en la olla 2 patatas medianas, 2 zanahorias y puerros y se sofríe con aceite de oliva. Se cubre de agua y se cocina durante 25 minutos antes del triturado.
Prepara purés de verduras
Con estas recetas podrás obtener unos excelentes purés de verduras para niños, asegurando, así, un correcto aporte de nutrientes. Existen muchas otras variedades, solo se trata de cambiar los ingredientes. Los métodos de preparación son siempre muy similares entre sí. Son recetas sencillas y rápidas de elaborar.
Bibliografía
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- Carr AC, Maggini S. Vitamin C and Immune Function. Nutrients. 2017 Nov 3;9(11):1211. doi: 10.3390/nu9111211. PMID: 29099763; PMCID: PMC5707683.
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