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Prótesis dentales en niños y adolescentes: preguntas frecuentes

6 minutos
El uso de prótesis dentales en niños y adolescentes no es una situación bastante frecuente. De todos modos, existen casos que ameritan este tipo de rehabilitación.
Prótesis dentales en niños y adolescentes: preguntas frecuentes
Última actualización: 26 julio, 2023

Las prótesis dentales son una solución efectiva para restaurar la función y la estética en niños y adolescentes a los que les faltan dientes. En esta etapa de la vida, reponer los elementos ausentes tiene un papel crucial en el desarrollo oro-facial y en el fortalecimiento de la autoestima.

Debido a que las piezas definitivas reemplazan a las de leche cuando se caen, no es habitual que los niños y adolescentes usen prótesis dentales. De todos modos, existen situaciones que ameritan este tipo de rehabilitación. En este artículo, respondemos las preguntas más frecuentes que surgen en torno al uso de prótesis dentales en la infancia.

¿Por qué los niños y adolescentes pueden necesitar prótesis dentales?

En la niñez, los dientes de leche se caen de manera fisiológica y son reemplazados por sus sucedáneos permanentes. De esta manera, la falta de piezas dentarias en los pequeños suele revertirse al cabo de un tiempo, cuando brota el nuevo elemento definitivo.

Pero existen situaciones en los niños y adolescentes que provocan la ausencia de piezas dentarias en la boca durante mucho tiempo, o incluso, para siempre. Estos tipos de problemáticas se pueden resolver con el uso de prótesis dentales durante la infancia.

Según un artículo publicado en la Revista Información Científica, las prótesis dentales están indicadas en niños y adolescentes cuando hay ausencia, pérdida total o parcial de dientes y esto provoca hábitos orales perniciosos, traumas psicológicos, defectos del lenguaje o simplemente por estética.

También en pacientes con labio y paladar hendido para permitir una correcta alimentación, pronunciación y mejorar la apariencia física. Según un estudio publicado en Case Reports in Dentistry, la ausencia congénita de dientes es uno de los motivos más frecuentes de que los niños y adolescentes requieran prótesis dentales.

Condiciones genéticas, como la displasia ectodérmica y el síndrome de Papillon-Lefevre, causan oligodoncia (ausencia de 6 o más dientes), o anodoncia (ausencia de uno o más dientes). También, los casos de agenesias dentales aisladas sin una causa identificable, requieren este tipo de rehabilitación.

Los defectos en el desarrollo oro-facial también requieren el uso de prótesis dentales para devolver la funcionalidad y la estética a la boca de los niños. Las placas que se utilizan en los pacientes con labio leporino y fisuras palatinas son un claro ejemplo.

Las prótesis en los niños también son necesarias cuando se pierden los dientes de manera prematura: por caries sin tratar o por traumatismos dentales.

¿Qué ventajas tiene la utilización de prótesis dentales?

Según un artículo publicado en el Balkan Journal of Dental Medicine, la ausencia o pérdida prematura de dientes, tanto temporales como permanentes, conduce a problemas funcionales y estéticos.

Por un lado, resultan afectadas la masticación y la pronunciación de las palabras. Además, la falta de dientes provoca la migración de las piezas adyacentes, dificultades en la erupción, pérdida de hueso alveolar y maloclusiones.

Los problemas estéticos tienden a afectar al pequeño en el ámbito psicológico. El niño puede ser objeto de burlas o intimidación, lo que conduce a sentimientos de inseguridad, desarrollo de complejos y baja autoestima. Entonces, rehabilitar la boca con una prótesis dental le otorga a los niños y adolescentes múltiples beneficios, dentro de los cuales destacan los siguientes:

  • mejora la estética,
  • garantiza la masticación y funcionalidad de la boca,
  • facilita la alimentación,
  • mantiene el espacio y evita el desplazamiento de los demás dientes,
  • previene malposiciones dentales y problemas de oclusión,
  • corrige los problemas en el habla,
  • mejora la autoestima y la seguridad,
  • previene malos hábitos, como la interposición lingual y la succión del labio.

¿Cuándo se debe colocar una prótesis dental?

El momento adecuado para considerar el uso de una prótesis dental en niños y adolescentes varía según la situación individual de cada paciente. Será el odontopediatra o el ortodoncista quien recomiende su uso y el mejor momento para colocarla. Estos son algunos de los motivos que ameritan tener en cuenta este tipo de rehabilitación:

  • pérdida prematura de los dientes de leche sin signos de erupción de los dientes definitivos,
  • malformaciones dentales que afectan la apariencia y la función,
  • dificultades para masticar o hablar debido a la falta de dientes,
  • problemas emocionales o sociales debido a la apariencia bucal.

¿Cómo son las prótesis dentales que se usan en los niños y adolescentes?

Las prótesis dentales utilizadas en niños y adolescentes deben adaptarse y acompañar el proceso de crecimiento que sucede en esa etapa de la vida. El diseño, el tamaño y la forma del aditamento se piensa para que devuelva las funciones y la estética sin interferir con el desarrollo oral ni dificultar la erupción dentaria.

Por este motivo, una vez colocada en la boca, la prótesis debe ser reajustada o reemplazada a medida que los dientes erupcionan y la boca del niño crece. Los controles dentales periódicos son fundamentales para realizar estas modificaciones.

Existen diferentes tipos de prótesis dentales que se pueden utilizar en los niños y adolescentes según las necesidades de cada caso. Estas son las más habituales.

  • Prótesis parciales removibles: se trata de dentaduras postizas que reemplazan uno o varios dientes ausentes. Son removibles, por lo que el niño puede sacársela y colocársela por sí solo. Se mantienen sujetas en su lugar mediante ganchos que se apoyan en las piezas vecinas.
  • Prótesis completas: se utilizan cuando faltan todos los dientes del maxilar superior o inferior. El diseño incluye los dientes artificiales y parte de la mucosa de la encía y el paladar. Se apoyan en los tejidos bucales y se mantienen en su sitio mediante succión o adhesivos dentales.
  • Prótesis fijas: son aquellas que se cementan sobre las piezas dentarias naturales del niño, como los puentes. En general, se tratan de evitar durante el crecimiento.

Es importante destacar que el tipo de prótesis indicada depende de la situación dental específica de cada paciente. Luego de evaluar el caso, el odontopediatra ofrecerá la mejor opción para satisfacer las necesidades individuales del niño.

En general, se recomienda la utilización de prótesis removibles en las primeras etapas de crecimiento, que permitan establecer una nueva dimensión vertical y relaciones intermaxilares adecuadas. Posteriormente, siempre que sea posible, se puede optar por prótesis fijas provisionales.

¿Cómo cuidar las prótesis dentales en la infancia?

El cuidado adecuado de las prótesis dentales es esencial para mantenerlas en buenas condiciones y evitar daños en la boca. La limpieza diaria, retirando el aditamento de la boca y utilizando un cepillo suave, es fundamental para eliminar residuos y evitar la proliferación de hongos y bacterias. También es beneficioso usar una vez por semana un limpiador de prótesis dental que complete la higiene.

Cuando la prótesis no se utiliza, es importante almacenarla en un recipiente limpio con agua o en una solución de limpieza. Mantener el aparato en buenas condiciones y en un lugar seguro evitará que se rompa o se pierda.

Por último, las visitas regulares al dentista son importantes para evaluar el estado de la prótesis dental y realizar los ajustes necesarios. Además, el odontólogo podrá detectar posibles daños en las mucosas, hacer una limpieza profesional y ofrecer consejos personalizados sobre los cuidados necesarios.

Prótesis para mejorar la calidad de vida

Las prótesis dentales desempeñan un papel importante en rehabilitar la función y la estética oral en niños y adolescentes a los que les faltan dientes. Aunque se trate de bocas pequeñas que están creciendo, este tipo de tratamiento mejora la salud oral y la calidad de vida de los más chicos.


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