¿Se puede perder peso durante el embarazo?

El embarazo es una etapa de la vida tan especial que lo que podías hacer «antes de» ahora tiene reglas. Y para muestra un botón, los expertos han establecido límites para el control del peso en las embarazadas. Así que, ante la duda de si puedes perder peso durante el embarazo porque te agarró con unos «kilos de más», debes revisar lo que dice este artículo.

Perder peso mientras tu bebé crece en el vientre no parece lo más conveniente, pues eres el transporte de nutrientes para su crecimiento. Por eso, si estás perdiendo peso sin causa aparente o lo haces de forma intencional, comienza por consultarle al profesional de salud.

En este artículo, te aclaramos la duda de si puedes perder peso en el embarazo, cuando por ejemplo, tienes sobrepeso, obesidad o falta de apetito, ¿cuáles son los riesgos?, y ¿qué hacer?

Ante el sobrepeso en el embarazo, ¿conviene perder peso?

Si tienes sobrepeso, estás embarazada y quieres adelgazar, lo cierto es que no es la ocasión. Durante el embarazo, ocurren tantos cambios en el cuerpo que se produce un aumento de peso natural.

Ese peso extra no solo lo da el bebé que crece, también la placenta y las reservas de grasa que se van acumulando para apoyar el embarazo, el parto y la lactancia.

De esta forma, el peso ganado se convierte en un referente para saber que todo marcha bien, aunque tengas o no unos «kilos de más».

Sin embargo, el Instituto de Medicina de los Estados Unidos, pensando en el cuidado de la salud de la embarazada con sobrepeso y obesidad, recomienda una ganancia de peso menor que para las que tienen un peso normal.

En el embarazo con sobrepeso se permite aumentar entre 6,8 y 11,3 kilos, mientras que en la obesidad entre 5 a 9 kilos. Las de peso normal aumentarán entre 11,5 y 16 kilos. Como ves, cuidan la ganancia de peso, pero desestiman que lo pierdan.

Sin duda alguna, el embarazo y su cuidado es la prioridad para los organismos de salud. Pero la condición de sobrepeso y obesidad representa un riesgo. Por ejemplo, el Comité del Instituto de Medicina menciona algunas complicaciones, como la diabetes gestacional, presión arterial alta, preeclampsia y un trabajo de parto prematuro.

Mayo Clinic también explica que los bebés pueden nacer con pesos y tallas mayores al promedio (macrosomía fetal), asma, trastornos congénitos, problemas cognitivos, obesidad infantil y retraso en el desarrollo.

¿Por qué no es recomendable perder peso en el embarazo?

La razón principal es el bienestar del bebé. Los casos de sobrepeso y obesidad pueden ser controlados por los profesionales sin necesidad de perder peso, siempre que se mantengan en la ganancia recomendada.

Sin embargo, puede haber excepciones en las que el médico lo considere necesario y redireccione las recomendaciones junto con el nutricionista. 

Si comienzas a perder peso durante el embarazo y sin ninguna orientación, es posible que el bebé no reciba la energía y los nutrientes necesarios para mantenerse saludable.

Además, se pueden tener bebés pequeños o que nazcan antes de tiempo, así como se expone en el estudio publicado en la revista PloS One. Por eso, no aconseja la pérdida de peso en embarazadas obesas.

El Colegio Américano de Médicos y Ginecológos también explica que, hacer dietas restrictivas durante el embarazo para bajar de peso o no tener una ganancia de peso saludable, puede aumentar el riesgo de muerte fetal o del recién nacido.

Por tanto, ante un sobrepeso desde el inicio del embarazo, se aconseja ajustar la dieta a una normal en calorías y que cubra los nutrientes claves para el bebé.

Cuando la pérdida de peso es muy acentuada en esta etapa o si algunas condiciones médicas como desequilibrio hormonal, diabetes no diagnosticada o tiroides muy activa, causan una pérdida de peso considerable, hay que consultar de inmediato con el médico.

¿Se puede controlar la ganancia excesiva de peso durante esta etapa?

En lugar de enfocarse en perder peso durante el embarazo, la atención debe estar en una alimentación equilibrada y un estilo de vida más activo. Es muy importante asistir a las consultas profesionales con el médico y el nutricionista, y que sean ellos los que orienten y autoricen un aumento menor de peso durante el embarazo, en casos de que se amerite.

La guía de los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés) establece algunos pasos que ayudan a controlar el peso en embarazadas que tienen sobrepeso y obesidad. Puedes cumplirlos para no aumentar por encima de lo recomendado.

Para no perder peso durante el embarazo y mantenerte en la ganancia adecuada, además de la asesoría profesional, requieres de un plan de alimentación individualizado, variado, equilibrado y balanceado.

Incluye frutas y verduras frescas, cereales integrales, grasas saludables como aceite de oliva, semillas y frutos secos, proteínas magras y lácteos descremados. Es crucial que excluyas los alimentos ultraprocesados, los azúcares añadidos y las grasas sólidas.

Todo esto lo acompañas con un plan de actividad física aprobado por el profesional. Puedes caminar, hacer ejercicios prenatales, nadar, yoga, pilates y otras actividades autorizadas.

¿Luego de dar a luz podré adelgazar?

Después de la llegada del bebé, viene la etapa de lactancia materna y se supone que te has preparado durante el embarazo para tener las reservas suficientes que permitan una lactancia saludable.

De manera natural irás perdiendo peso corporal, ya que según el Departamento de Salud y Servicios Humanos de Estados Unidos, para amamantar se gastan entre 450 y 500 calorías adicionales. Esto produce una pérdida de peso gradual y progresiva.

Se recomienda esperar de 6 a 8 semanas para la recuperación posparto. Luego, bajo la asistencia del nutricionista, se ajusta el plan de alimentación a una dieta equilibrada, balanceada y saludable.

¿Conviene o no perder peso durante el embarazo?

Salvo que en casos excepcionales el médico tratante considere lo contrario, no hay ninguna razón para perder peso durante el embarazo. Pues, hay que garantizar al bebé los nutrientes y la energía necesaria para crecer y desarrollarse de manera óptima.

Sin tener que perder peso, una ganancia adecuada asegura un embarazo saludable. Así que, debes mantener una dieta saludable, variada y equilibrada y una rutina de ejercicios para lograr un feliz termino.