11 ejercicios para que el bebé gire y se encaje en el canal de parto

¿Estás lista para convertirte en mamá? Si estás en la recta final del embarazo, puede que tu niño ya esté ubicado cabeza abajo. En el caso de que aún no lo haya hecho, te proponemos varios ejercicios para que el bebé gire y se encaje en el canal de parto.

Utilizamos el término «encajar» para referirnos a que el futuro bebé adopte una situación, posición, presentación y actitud obstétrica adecuada. Todos estos términos se refieren a la disposición espacial del feto, por lo que lo deseable es que tenga una que favorezca el parto natural sin mayores incidencias.

Es normal que el futuro bebé cambie de disposición con frecuencia. Sin embargo, si el obstetra detecta que se encuentra de forma peligrosa (como la presentación de nalgas o podálica) hay algunas maniobras médicas especialmente destinadas a revertirla.

Ejercicios que se pueden hacer en el hogar para que el bebé gire y se encaje en el canal de parto

Hay muchas técnicas domésticas que se pueden aplicar fácilmente para intentar mejorar la disposición del futuro bebé, según explican los expertos de Cleveland Clinic.

Sin embargo, es importante saber que estas cuentan con evidencia limitada y efectividad anecdóctica, pero por contraparte son muy seguras y no te pasará nada malo si las haces de forma adecuada. De todas maneras, es conveniente consultar con tu médico antes de realizarlas.

1. Inversión inclinada hacia adelante

Se trata de un movimiento sencillo, pero que debes hacer con cierta precaución para evitar golpes en la cabeza. Solo debes colocarte de rodillas en una superficie elevada (como los bordes de tu sofá) e inclinarte poco a poco hasta el suelo, apoyando tu peso sobre los antebrazos y brazos. Repite este movimiendo algunas veces al día de forma lenta y según lo puedas tolerar.

2. Inclinación de nalgas

Esta técnica básicamente consiste en acostarse de forma inclinada, de tal manera que la cabeza se ubique en el suelo y las piernas hacia arriba. Para eso deberás conseguir una tabla más o menos rígida y colocarla sobre una superficie un poco elevada, como puede ser el sofá del caso anterior.

Asegúrate de poner una almohada abajo (en el extremo de la tabla y tocando el suelo) para apoyar tu cabeza. La idea es mantenerse durante unos pocos minutos en esta posición y, al igual que en el caso anterior, repetir a tolerancia algunas veces al día.

3. Yoga

El yoga puede considerarse una disciplina deportiva de bajo impacto muy recomendable para embarazadas. Más allá de sus múltiples beneficios para la salud, es posible que adoptar ciertas asanas ayude a que el bebé cambie su disposición.

Puedes intentar con el uttana shishosana o ‘postura del cachorro’. En el suelo y sobre una colcha cómoda, colócate de rodillas y extiende los brazos hasta que las palmas toquen el piso. En este ejercicio sí llevarás la cabeza hasta el suelo (sin voltearla demasiado) y permanecerás durante algunos minutos si te sientes cómoda con ello.

También está la marjaryasana o ‘postura del gato enfadado’. Es similar a la anterior, pero debes acercar mucho más las palmas a las rodillas, de tal forma que los brazos queden verticales y de forma paralela a los muslos. Procura mirar al suelo mientras esperas unos minutos.

4. Postura del puente medio

También se conoce como elevación de pelvis, ya que debes hacer movimientos repetitivos subiendo y bajando las caderas. Para ello debes acostarte boca arriba en una colcha cómoda (la misma que se utiliza para el yoga) o una alfombra, pero sin utilizar almohadas.

Flexiona las rodillas hasta que las piernas estén en una posición vertical respecto al suelo, con el tronco rígido y alineado con los muslos.

Si se te hace incómodo, también puedes hacerlo con la ayuda de una pelota de Pilates. Solo debes colocarla entre tu espalda y el suelo y repetir varias veces el ejercicio de forma armoniosa.

5. Hacer aeróbicos acuáticos

Los también llamados aquaerobics consisten en actividades dinámicas de bajo impacto en una piscina de poca profundidad, generalmente en grupos y con algo de música. Se trata de uno de los ejercicios para que el bebé gire y se encaje en el canal de parto más utilizados.

Se consideran ejercicios seguros en la mayoría de las embarazadas, y existe cierta evidencia de que podría favorecer el cambio de presentación (podálico) o situación (transversa) hacia una más favorable para el parto. Sin embargo, se requieren más estudios para corroborar estos resultados.

6. Sentadillas y rotaciones con balón suizo

Si incluyes las sentadillas en tus actividades cotidianas de verdad que sentirás los beneficios. No en vano es uno de los ejercicios más recomendados durante la gestación. Según los profesionales de la Clínica Mayo, este ayuda a la apertura pélvica para favorecer el descenso del feto.

El ejercicio consiste en realizar el mismo gesto que haces cuando te sientas en una silla, pero sin llegar a hacerlo. Si utilizas un balón suizo, lo ideal es colocarlo entre la espalda y la pared, de esta manera te otorgará cierto equilibrio. Con pocas repeticiones al día, varias veces a la semana, obtendrás los efectos deseados.

Debes estar atenta a la posición de las rodillas para que no pasen por encima de la punta de los pies al flexionarse. Una forma de evitarlo es tomarte de las manos de tu pareja para ganar mayor estabilidad.

También puedes hacer rotaciones pélvicas con el mismo balón. Tan solo deberás sentarte encima de él y hacer movimientos lentos y repetitivos de un lado a otro. Recuerda mantener la espalda firme y los pies apoyados en el suelo.

Ejercicios generales que podrían contribuir a que el bebé se encaje en el canal de parto

En realidad, no existe demasiada evidencia científica que justifique hacer ciertos ejercicios para obtener una presentación y situación fetal adecuados. Esto depende de varios factores, y en la mayoría de los casos el bebé adopta una disposición favorable de forma espontánea antes del inicio del trabajo de parto.

Los ejercicios que te proponemos a continuación podrían ayudarte a mantener una buena actividad física durante el embarazo, lo cual «promueve el tono muscular, la fuerza y la resistencia», según explican los expertos de la Clínica Mayo.

7. Caminata

Realizar caminatas a diario permite que los huesos y músculos de la pelvis se ejerciten. Además, este hábito mejora la circulación sanguínea y linfática, las cuales se ven afectadas por la presión del bebé sobre los grandes vasos.

Según los expertos de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), en un embarazo normal es recomendable hacer unos 30 minutos diarios de actividad aeróbica moderada. Esto incluye perfectamente hacer caminatas rápidas.

Procura mantener un ritmo moderado y hacer una respiración consciente, así como descansar las veces que sea necesario. Comienza con distancias cortas y auméntalas poco a poco.

Recuerda que el objetivo de la actividad es movilizar los músculos y los huesos de la pelvis, no efectuar un entrenamiento de resistencia. Aprende a «escuchar» las necesidades de tu cuerpo para regular el ejercicio.

8. Baile

Si lo que buscas es aumentar la movilidad y liberar las tensiones, el baile reúne todas estas condiciones y le agrega diversión. Además, esta actividad te permite compartir un momento placentero con tu pareja o tus seres queridos, mientras podrías ayudar a tu bebé a ubicarse en el canal de parto.

Al igual que con la caminata, haz las pausas necesarias para respirar y regula la intensidad cada vez que tu cuerpo te lo demande. Prioriza las oscilaciones pélvicas que favorecen el movimiento del bebé.

Además, aprovecha esta actividad y prepárate una lista con tu música preferida para escuchar cuando vayas a dar a luz.

9. Sentarse sobre el balón medicinal

Si tienes un balón medicinal o de Pilates, puedes usarlo durante el día como reemplazo de una silla común. Así, mientras descansas también relajas tu zona pélvica. Se trata de un excelente ejercicio para que el bebé gire y se encaje en el canal de parto.

Sobre el balón ejecuta movimientos hacia adelante y atrás con tu pelvis, y luego algunos movimientos circulares. También puedes menearte encima de la pelota, como si acunaras a tu bebé dentro de la panza.

Además de resultar un ejercicio muy relajante para los músculos lumbares y pélvicos, al igual que lo que ocurre con las sentadillas se podría favorecer que el bebé encaje correctamente.

10. Colocarse de rodillas

Desde la posición arrodillada puedes utilizar distintos apoyos, según cuál te resulte más cómodo. Puedes descansar los brazos sobre el regazo de tu pareja, un balón medicinal, una silla o el suelo.

Solo con estar de rodillas ayudas al cuerpo a descansar del peso del bebé, ya que lo ubicas en una «cama» formada por tus abdominales. Además, con esta posición podría liberarse cierta tensión muscular.

Puedes balancear la pelvis en todos los sentidos y mover asimétricamente una y otra pierna, a fin de darle mayor amplitud de movimiento a la cadera. Es uno de los ejercicios para que el bebé gire y se encaje en el canal de parto más seguros que hay.

11. Hidroterapia prenatal

El mero hecho de entrar a una piscina y descansar en el agua libera las tensiones de todo el cuerpo. De hecho, un estudio evaluó un método de hidroterapia durante 4 días en mujeres gestantes, evidenciándose mejorías en la calidad de vida (menos estrés, dolor y mejor «salud mental»).

Otras investigaciones explican que la fisioterapia acuática ayudaría a reducir la presión sobre las articulaciones, disminuyendo la probabilidad de lesiones y favoreciendo que se puedan hacer ejercicios (como los que ya mencionamos antes) en condiciones más cómodas.

Maniobras que puede hacer un profesional para que tu bebé gire y se encaje en el canal de parto

Hay otras técnicas que no son realizadas en el hogar, sino que deben hacerse con un experto en la materia para obtener cierto beneficio. Existe más evidencia científica que las sustenta y, aunque son escasas, son una opción alternativa cuya finalidad es evitar cesáreas.

Versión cefálica externa

Un artículo de investigación publicado en Progresos de Obstetricia y Ginecología explica que la versión cefálica externa es uno de los métodos más aceptados para revertir una disposición anómala del feto (podálica principalmente) en las últimas semanas del embarazo.

Consiste en que el obstetra manipule ambos polos fetales palpando el vientre de la madre, provocando poco a poco un movimiento externo que facilite que la cabeza del bebé encaje en la parte superior del canal de parto.

Suele ser bien tolerada y tener buena respuesta, aunque no es eficaz en todos los casos. Está contraindicada cuando ya hay una necesidad de cesárea por cualquier motivo (placenta previa, malformaciones fetales, etc.), gestación múltiple y preeclampsia, entre otras.

Técnica Webster

La técnica Webster forma parte de la quiropráctica, por lo que puede entenderse como un tipo de medicina alternativa. Esta debe ser realizada por un experto en la materia, basándose en una correcta alineación del sacro y el equilibrio de los músculos y ligamentos de la zona para favorecer la flexibilidad.

Su efectividad es anecdótica, siendo la evidencia al respecto escasa. Un reporte de caso clínico publicado en el año 2020 relató la experiencia en una primigesta de 28 años de edad que obtuvo un parto vaginal satisfactorio luego de haberse realizado la técnica a finales del embarazo.

Técnicas para que el bebé gire y se encaje en el canal de parto más novedosas y en estudio

Hay otras alternativas novedosas que incluyen métodos poco convencionales o referentes a la medicina tradicional. No siempre son efectivos y dependen mucho de cada contexto, por lo que se necesita de la aprobación médica y, de hecho, ambas son asistidas.

Ultrasonido

Existen algunas hipótesis que sugieren que el uso de ultrasonidos podría favorecer el movimiento del feto y, con eso, el cambio de su disposición. Los autores de un estudio publicado en International Journal of Soft Computing & Engineering en 2012 explican que se trataría de un método seguro y económico que ayudaría a disminuir la necesidad de cesáreas electivas para aquellos fetos en presentación podálica. De todas maneras, se trata de un tema polémico y todavía no bien sustentado.

Moxibustión con acupuntura

La moxibustión es un tipo de medicina tradicional china que consiste en pulverizar y quemar hojas de Artemisia abrotanum para aliviar ciertos malestares corporales, aunque con evidencia limitada al respecto.

Es curioso que se han hecho varias investigaciones recientes sobre su efectividad en combinación con la acupuntura para revertir presentaciones fetales inadecuadas. Estas han arrojado resultados satisfactorios, pero sin entender realmente cuál es la razón detrás de estos efectos.

¿Qué sucede si el bebé no se encaja en el canal de parto?

Las causas posibles de que un bebé no se encaje en el canal de parto son múltiples. Si está de nalgas (sentado) o en posición transversal, ¡no te asustes! Aunque la mayoría de los niños se ubican en posición cefálica (de cabeza) entre la semana 33 y 38 de gestación, algunos lo logran unos días antes de nacer.

Si esto no ocurre naturalmente, los obstetras pueden practicar una maniobra especial en algunos casos puntuales. Pero en general, la opción más indicada es la cesárea, ya que minimiza los riesgos asociados al parto de nalgas o podálico.

Consulta con tu médico y decide la opción más apropiada para ti

Ante una disposición desfavorable del feto en las últimas semanas del embarazo que haya sido detectada por ecografía, es cuestión de hablar con tu médico sobre las opciones más favorables en tu caso. Es probable que te autorice a realizar muchos de los ejercicios para que el bebé encaje en el canal de parto reseñados, mientras que en sus manos estará aplicar otras maniobras como la versión cefálica externa, si así lo decide.