La lactancia materna es un proceso importante posterior a la gestación y el parto. Mediante este, tu bebé recibe los nutrientes necesarios para continuar con su formación fisiológica, por lo cual es una etapa fundamental. Pero, ¿sabes cuánto dura y qué restricciones debes tener? En este artículo te contaremos si es posible hacer ejercicio durante la lactancia.
Si eres una mamá primeriza, es probable que tengas más preguntas que respuestas acerca de la lactancia materna. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS) este proceso comprende un tiempo estimado de entre 6 y 12 meses. Sigue leyendo para conocer qué ejercicios puedes realizar en esta etapa.
Ejercicio durante la lactancia materna
Hacer referencia a la actividad física y al ejercicio se hace necesario, especialmente después de culminar el proceso de gestación, que puede ser una experiencia traumática a nivel físico y psicológico.
La necesidad de moverte se hace menester para regresar a tus índices corporales normales. Además, el ejercicio te ofrece una serie de beneficios que pueden contribuir con tu bienestar mental. Por otra parte, empezar a incluir actividades durante la lactancia materna puede ayudarte a construir un hábito de vida saludable.
Mitos sobre el ejercicio y la lactancia materna
La pregunta anteriormente planteada sobre la posibilidad de hacer ejercicio durante la lactancia surge gracias a diversos pensamientos y afirmaciones que se resumen en mitos. Es común que esto suceda, especialmente si no se cuenta con la información adecuada.
No te sientas culpable por cuestionarte algo que desconoces. Para ello, necesitas ponerte en la tarea de investigar y buscar la manera más sana de criar a tu hijo. En ese orden de ideas, te enseñaremos los mitos más mencionados sobre el tema con el fin de desmentir cada uno de ellos.
El ejercicio afecta la producción de leche
Suele afirmarse que la realización de ejercicio físico afecta la producción de leche materna durante la lactancia. Este es uno de los principales argumentos por los que se evita hacerlo, pero es una afirmación errónea. Eso sí, se recomienda contar con medidas apropiadas de higiene para evitar que la sudoración quede impregnada en tu pezón luego de la actividad.
Debes tomar sustancias para aumentar la energía
Existen muchas bebidas que sirven para aumentar la energía de tu organismo a la hora de realizar cualquier actividad física. A pesar de ello, no es muy recomendada su ingesta durante la lactancia materna, ni fuera de ella.
Sustancias como el café o los energizantes pueden afectar tu salud al incrementar la probabilidad de ataques cardíacos, episodios nerviosos o insomnios, entre otros. Por ello, te aconsejamos evitar su consumo. Recuerda que también puedes afectar a tu bebé por medio de la leche materna.
Tienes que hacer ejercicio inmediatamente
Otro pensamiento importante acerca del tema es el de la realización de ejercicio inmediatamente después del parto. Aunque no es negativo realizar actividad física, esto dependerá de tus capacidades y de cómo te sientas.
Algunas mujeres, especialmente las que cuentan con una vida activa, continúan con sus rutinas de entrenamiento luego de unos días después del parto. No obstante, las que son sedentarias requieren de más tiempo para comenzar a moverse. En ese orden de ideas, todo depende de ti, de cómo te sientes en ese momento y del aval de un médico profesional.
Ejercicio sí, pero con algunas restricciones
En esta etapa, el organismo no se encuentra en condiciones normales, por lo tanto, el ejercicio debe contar con algunas restricciones. Es decir, puede llevarse a cabo, pero no debes perder de vista cuál es tu capacidad física y de qué manera deseas retomar.
Ejercicio de baja intensidad
Procura realizar actividad física moderada o una rutina de ejercicios de baja intensidad. De dicha manera, podrás retomar tus hábitos o comenzar a implementar unos nuevos. Además, durante el proceso de lactancia materna la intensidad alta del ejercicio sí puede incidir de manera negativa.
En dicho punto, la producción de leche puede bajar y los índices de ácido láctico llegar a aumentarse, lo que modifica el sabor de la leche. A pesar de ello, basta con disminuir la intensidad del ejercicio para evitar este tipo de inconvenientes.
Realizar actividades comunes
Esta recomendación o restricción va de la mano con la anterior. En este caso, para hacer ejercicio durante la lactancia materna, lo más aconsejable es recurrir a actividades físicas comunes. Por ejemplo, se puede salir a caminar, nadar, dar paseos en bicicleta o incluir rutinas de pilates y yoga.
Ejercicio y lactancia materna, con autorización
Puedes contar con las recomendaciones posibles y los deseos intactos por realizar ejercicio durante la lactancia materna. Sin embargo, no debes implementar ningún tipo de rutina sin la autorización médica. Para ello, debes permanecer en control constante con tu médico de cabecera. Este se encargará de evaluarte, de ofrecer más recomendaciones y de darte luz verde para comenzar a hacer ejercicio.
Bibliografía
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- OMS. (2017). OMS | 10 datos sobre la lactancia materna. Organizacion Mudial de La Salud.
- Sánchez García, J. C., Rodríguez Blanque, R., Sánchez López, A. M., Baena García, L., Suárez Manzano, S., & Aguilar-Cordero, M. J. (2016). Efectos de la actividad física durante el embarazo y en la recuperación posparto: protocolo de estudio. Nutrición Hospitalaria. https://doi.org/10.20960/nh.756