Menú para bebés de 6 meses: las primeras papillas

Las papillas para los bebés de 6 meses son preparaciones excelentes con una elevada densidad nutricional. Resultan una gran manera de introducir distintos alimentos en la dieta del bebé. Además, permiten disimular los sabores de alimentos fuertes, lo que genera una gran aceptación entre los más pequeños.

De hecho, es muy habitual que la alimentación complementaria se inicie con el consumo de papillas. A pesar de que ahora se han puesto de moda otros métodos que consisten en dejarle al bebé manipular los alimentos, estas elaboraciones pueden seguir formando parte de las rutinas alimentarias de los primeros meses.

Cuando se pueden dar las primeras papillas

Empezar a introducir nuevos alimentos en la dieta de los bebés puede ser una gran fuente de dudas y preocupación entre los padres. Las papillas son una de las posibles formas de hacerlo y con unas recomendaciones generales esta tarea puede ser más fácil.

Antes de empezar a dar papillas a los bebés es preciso asegurarse que el pequeño/a está a punto para la introducción de alimentos sólidos. Los 6 meses de edad suelen marcarse como momento ideal, aunque existen señales que así lo indican:

• El bebé se puede mantener sentado con un poco de apoyo.
• Presenta interés activo por la comida y los alimentos.
• Es capaz de coger la comida con las manos y llevársela a la boca.
• El reflujo de extrusión ha desaparecido (expulsión de los alimentos no líquidos con la boca).

El momento de ir introduciendo nuevos alimentos no debe sustituir la toma de leche materna o de sustitución. Esta sigue siendo la principal fuente de energía y nutrientes hasta el primer año de vida.

Alimentos recomendados para las primeras papillas en los bebés de 6 meses

Al empezar a ofrecer los primeros alimentos y papillas es importante respetar el calendario de introducción de alimentos. A día de hoy estos ya no son tan estrictos y pueden ser muy variables según las regiones y costumbres culinarias de cada familia.

Un consejo que sí que es imprescindible es hacerlo de forma paulatina y de uno en uno. En caso de presentar una reacción alérgica o desfavorable es mucho más fácil detectar qué es lo que lo ha provocado. Lo mejor es ir probando un alimento nuevo cada dos o tres días, respetando algunas indicaciones concretas.

Papillas de frutas

Se puede empezar por cualquier fruta de la temporada, sin ningún tipo de restricción. Se aconseja siempre usar uno o dos tipos en cada puré para que puedan apreciar mejor el sabor de cada una. No es necesario agregar azúcar, zumos o galletas en su elaboración.

Papillas de cereales

Las papillas clásicas de cereales no son obligatorias y estos se pueden ofrecer en hervidos y triturados o en forma de copos remojados. Si se usan las preparaciones comerciales para elaborarlas es necesario fijarse en las etiquetas y la composición, para evitar aquellos que contengan más de 5 gramos de azúcar por 100 gramos de producto.

Papillas de verduras

Se pueden preparar con todo tipo de verduras según la aceptación de cada niño. En los primeros meses hay que evitar las espinacas, las acelgas y la borraja.

Las verduras se hierven en un poco de agua y se trituran. Estos se pueden enriquecer con algún tipo de hidrato de carbono (arroz o patata) y un poco de aceite de oliva al final. De esta forma se aumenta un poco su valor calórico.

En estos purés también se puede añadir la fuente de proteína siguiendo algunos consejos concretos:

• Empezar por las más digestivas como el pollo, el pavo y el pescado blanco.
• Una vez aceptadas estas se puede probar con el pescado azul pequeño.
• Un poco más adelante (en el octavo mes) introducir el huevo bien cocido.

Introducción de las papillas a lo largo del día

Al planificar los menús con papillas para los bebés las costumbres se han vuelto más laxas. Ya no es “obligatorio” ofrecer cereales por la mañana, papillas de carne y verduras a mediodía y fruta en la merienda.

Por el momento los pequeños de 6 meses no necesitan un horario establecido con las papillas. Antes de cada toma es aconsejable ofrecer el pecho o el biberón para evitar la ansiedad cuando tienen mucha hambre.

Lo que sí se recomienda es introducir las papillas con alimentos nuevos durante las primeras horas del día para poder estar alerta a las reacciones alérgicas.

La leche materna o de sustitución se sigue ofreciendo a demanda. Este alimento ha demostrado ser el de mejor calidad para la salud del bebé. Así lo confirma una investigación publicada en la revista Journal of Human Nutrition and Dietetics.

Al principio las cantidades que suelen comer son pequeñas y aumentan de forma progresiva a medida que el niño crece. Es importante respetar sus deseos de comer y las sensaciones de hambre y saciedad.

 

Otros consejos para preparar las primeras papillas de los bebés de 6 meses

Aparte de conocer los alimentos adecuados y cómo se pueden introducir existen otras recomendaciones a tener en cuenta a la hora de cocinar las primeras papillas de los bebés y planificar los menús.

• Al cocinar papillas no se debe añadir azúcar, edulcorantes ni sal.
• No existe un límite de edad en la que los bebés puedan tomar papillas. No obstante no se recomienda retrasar la introducción de algunos alimentos semi-sólidos y sólidos más allá de los 8-9 meses para evitar posibles problemas con la alimentación en el futuro.
• La consistencia de los purés debe ser homogénea y se han de triturar al momento.
• Se recomienda elaborar las cantidades adecuadas a cada toma. Se pueden preparar con antelación y conservar durante 48 en el frigorífico o congelarlos (en raciones individuales) a las pocas horas de su cocinado. 
• Los purés congelados y refrigerados se deben descongelar y calentar de la forma adecuada.

Por último hay que tener en cuenta respetar al máximo las medidas de seguridad e higiene alimentaria a la hora de manipular los alimentos y su cocinado.

Recomendaciones para dar de comer con cuchara al bebé

Ten en cuenta que a la hora de alimentar al bebé con cuchara será necesario tener cierta paciencia. No se debe forzar la ingesta si este no tiene hambre. Asimismo, será necesario garantizar el uso de un babero, ya que las manchas están aseguradas.

Es importante introducir la cuchara de forma suave en la boca del bebé para no generar incomodidades. Durante los primeros meses de vida salen los dientes de leche y el contacto de la cuchara con los mismos podría resultar molesto.

Si el bebé muestra interés se le puede dejar coger la cuchara y experimentar un poco con el plato y el puré. Sin embargo recuerda que no se puede dejar nunca un bebé solo con un plato de comida.

Plantea un menú saludable con papillas para bebés de 6 meses

Como has visto, es posible preparar distintas papillas con el objetivo de completar las necesidades nutricionales del bebé durante los primeros meses de vida.

Es importante ofrecer cierta variedad en los alimentos. De este modo, se reduce el riesgo de déficit de nutrientes y se contribuye a una mejor educación nutricional, acostumbrando al niño a los diferentes sabores.