Ayudar a tus hijos a pensar en su futuro

Si quieres saber cómo debes ayudar a tus hijos a pensar en el futuro, lo primero que deberás tener claro es que tienes que situarlos en el presente. Para que su futuro sea exitoso, la educación de un niño es fundamental y es una de las responsabilidades más complicadas de los padres. No tienes formación para ello o apenas nada, pero es esencial saber cómo hacerlo.

Normalmente, cuando los adultos se convierten en padres, suelen repetir patrones vividos en la educación recibida en su infancia, aunque esto no siempre es lo más adecuado para los hijos. Es posible que alguna vez te hayas escuchado regañando a tus hijos con frases que tus padres utilizaron contigo en su momento y que te prometiste no usar nunca.

En cualquier caso, es fundamental que ambos padres estén involucrados activamente en la educación de sus hijos y que la comunicación sea esencial para hablar sobre la disciplina y el comportamiento que esperan de sus hijos en el presente, porque es lo que les marcará en su futuro.

La importancia de la disciplina para pensar en el futuro

La disciplina que impartas hoy a tus hijos hará que piensen en su mañana. La disciplina les permite a los padres enseñar a sus hijos cuáles son los comportamientos aceptables y cuáles no. Si se establecen límites para el niño, este podrá aprender qué se espera de él y cómo debe comportarse tanto en privado como en público.

Esto es fundamental para que los niños de hoy piensen cómo será su futuro y se conviertan en adultos responsables. La disciplina debe ser positiva, justa y constante.

Aumenta la confianza en tus hijos

Es muy importante que tu hijo aumente su confianza para que su futuro sea prometedor. Debe ser consciente de sus sentimientos y de su comportamiento, así como del de los demás. Trabajar la empatía y la asertividad se vuelve fundamental en este aspecto.

La forma en la que hablas o te comportas con tus hijos tendrá una gran influencia en su desarrollo. Además, esto puede afectar a la confianza del niño en sí mismo. Cuando los padres elogian y ratifican a sus hijos, entonces podrán darse cuenta de que sus hijos crecerán con una autoestima adecuada.

Por otra parte, si los padres son demasiado críticos, inconstantes en la educación o disciplina, son poco cariñosos, etc., sus hijos crecerán subestimándose. No se darán cuenta del valor que tienen y, lo que es peor, su futuro en su mente no tendrá lugar.

Centrarse solo en el mal comportamiento de los hijos y criticarles todo el tiempo es una mala idea. Si un niño solo escucha por parte de sus padres enfados y criticas, su confianza quedará anulada. Aprenderá que solo portándose mal recibirá atención de sus padres.

Por eso, el elogio y el buen comportamiento es mejor y más beneficioso que la crítica constante. Si abrazas a un niño y le animas a que sea amable y bueno le ayudarás a tener una mejor autoestima.

El lenguaje que utilizas hacia tus hijos es fundamental para su autoestima. Burlarse de un niño o compararlo con otros pequeños o hermanos es muy prejudicial y dañará gravemente su autoestima.

Pasar tiempo de calidad en familia

Es muy importante que en el seno familiar se encuentre tiempo de calidad para pasar en familia; aunque todos tengan quehaceres diarios, es fundamental. Es ideal coordinar horarios para que todos podáis comer o cenar juntos. Lo esencial es tener tiempo para disfrutar en familia y hablar, cuidando y cultivando la comunicación entre todos los miembros de una familia.

Del mismo modo que es importante hablar y conversar, también es fundamental escuchar activamente a los hijos en todo momento. Siempre que quieran preguntarte o hablar sobre algo, escucharles atentamente y dejar de lado lo que tengas que haces es muy importante.

Si le dices cosas como “ahora no puedo, estoy ocupado”, perderá el deseo de compartir sus pensamientos contigo y crecerá con un resentimiento hacia ti pensando que nunca te has preocupado suficiente por él y que antepones otras cosas. ¡Hay que evitar esto!

Su mejor modelo de conducta para pensar en su futuro

Para ayudar a tus hijos eficazmente a pensar en su futuro de manera positiva, tendrás que ser un buen modelo constante de conducta. Tus hijos repetirán tu comportamiento e incluso las expresiones que dices. Por eso es tan importante que trabajes en ti mismo para ser el mejor modelo de conducta que pueda tener ahora y en el futuro.

Es necesario mostrar siempre signos de respeto, amabilidad, honestidad, amistad, hospitalidad y generosidad para que, de esta manera, tus hijos hagan lo mismo. Como padres, tenéis la responsabilidad de orientar a vuestros hijos para pensar en su futuro, respetando sus intereses y su forma de pensar y sentir la vida.