¿Sabías que decir “te quiero” a nuestros hijos tiene unos efectos muy beneficiosos y positivos para ellos? Por eso, deberíamos usar esta frase cada día. Tan solo dos palabras tienen el enorme poder de hacerlos sentir felices por lo que son y por lo que pueden ser.
Es muy común que los padres tengamos muchos gestos cariñosos con nuestros hijos pequeños y les recordemos con frecuencia lo mucho que los queremos. Pero a medida que crecen y avanzan en su desarrollo, estas manifestaciones disminuyen su frecuencia y se tiende a perder esa conexión mágica que habíamos logrado con ellos.
Para evitar que esto pase, queremos recordarte la importancia de decirle a tu hijo cuánto lo quieres hoy y todos los días de tu vida.
Decir “te quiero” a nuestros hijos: dos palabras sencillas con un gran poder de unión
Todos estamos de acuerdo en que estas dos palabras tienen un potente significado y por eso mismo, las reservamos para aquellas personas especiales para nosotros. Esas que queremos con toda el alma y que son lo más importante de nuestras vidas.
Las palabras que conforman un “te quiero” tienen el poder de acabar con el estrés, el enfado, la dejadez y el olvido. Incluso, vuelven a conectarnos con aquellas personas a las que se lo decimos. Este mensaje es muy positivo a nivel emocional, pues despierta pensamientos y sensaciones gratificantes, tanto en quien las dice como en quien las recibe.
Por eso, decir “te quiero” a nuestros hijos debería formar parte de nuestra comunicación diaria, tanto en los momentos buenos como en los malos. Cuando fluya naturalmente y cuando cueste un poco más.
Razones por las que es importante decir “te quiero” a nuestros hijos
A continuación, vamos a ver algunas de las razones por las cuales decir “te quiero” es tan valioso, para que empieces a incorporarlo a tu rutina todos los días de tu vida. No te olvides de que son dos palabras muy potentes y que con ellas les recuerdas a tus hijos cuánto te importan.
1. Les permite crecer felices
El amor nos ayuda a superar lo malo y a disfrutar lo bueno que nos ofrece la vida. También, a aumentar la comprensión y la empatía. Esto les permite a los niños crecer felices, en un ambiente amoroso, sano, libre de celos y de control desmedido.
2. Fomenta la confianza entre padres e hijos
Si le decimos “te quiero” a nuestros hijos y este mensaje lo acompañamos con acciones positivas, les haremos saber que pueden confiar en nosotros.
Es normal que en ocasiones haya conflictos y discusiones, pero ellos siempre sabrán que les quieres y que buscas hacer siempre lo mejor para ellos.
3. Refuerza la autoestima
El amor que le transmitimos a nuestros hijos tiene un gran impacto en sus emociones. Cuando le decimos a un niño que lo queremos mucho, también le reforzamos que lo aceptamos tal cual es. Esto hace que él también se quiera y se acepte más.
La autoestima es la creencia que cada uno tiene de sí mismo, cuánto valor se da y cómo se acepta, tanto con sus fortalezas como con sus debilidades. Una persona que logra entender que es valioso para los otros, se valora mejor a sí mismo.
4. Les produce una gran alegría
Tengan 5 o 95 años, recibir un “te quiero” produce una alegría inmensa que dibuja una sonrisa en el alma. Dos palabras tan sencillas pueden cambiar el curso completo de un mal día o de la vida entera.
5. Da el mensaje de que no es malo errar
El perdón es una manifestación más del amor, porque cuando amamos, también perdonamos los errores.
Los niños que se sienten queridos saben que, incluso después de cometer algún error, serán perdonados. Eso no quita que debamos corregirlos, pero debemos hacerlo desde el amor y el respeto. De esta manera, les transmitiremos que errar es humano y que no hay nada de que avergonzarse cuando nos equivocamos.
6. Transmite tranquilidad y bienestar a los niños
El afecto y el amor les ayuda a los peques a crecer tranquilos y seguros y en este sentido, las palabras “te quiero” tienen un gran impacto en su bienestar emocional.
7. Les ayuda a no sentir miedo
El amor aleja a los miedos, sean por el motivo que sean. Las personas que se sienten amadas están más preparadas para lidiar con los momentos de temor e inseguridad de la vida.
8. Proporciona esperanzas
Sabernos queridos nos ayuda a sentirnos valiosos y esto en la vida de un niño es muy importante. No solo le produce bienestar en el presente, sino que también le dará esperanza para tener un gran futuro y conseguir lo que se proponga.
9. Estimula el vínculo entre padres e hijos haciéndolo inquebrantable
Si les decimos “te quiero” a nuestros hijos y además lo acompañamos con acciones positivas, nuestro vínculo se verá fortalecido hasta el punto de ser irrompible. Nuestro hijo crecerá con el amor más puro, honesto y verdadero que existe, que es el que tenemos con ellos.
Sobre lo importante que es decir “te quiero” a nuestros hijos
Como hemos podido ver en este artículo, estas son algunas de las razones por las que decirle “te quiero” a un hijo importa. Pero, además de palabras, el amor se acompaña de gestos y de acciones. Por lo tanto, enséñale el valor de los abrazos, de la comunicación positiva, de la escucha activa y de las sonrisas.
Definitivamente, los niños necesitan sentirse queridos, más aún cuando creen que no merecen serlo. También en la adolescencia, donde los padres pasamos a ocupar un segundo lugar. El amor debe demostrarse todos los días con palabras y gestos, para lograr que nuestros pequeños crezcan con plenitud y transmitan ese amor al mundo.
“El verdadero amor no es otra cosa que el deseo inevitable de ayudar al otro para que sea quien es”.
-Jorge Bucay-
Bibliografía
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- Lyford-Pike, A. (2001). Ternura y firmeza con los hijos. Alfaomega.
- Marulanda, A., & Gómez, A. M. (1999). Creciendo con nuestros hijos. Editorial Norma.
- Sánchez, M. D. C. V. (2010). Madres y padres competentes.: Claves para optimizar las relaciones con nuestros hijos e hijas (Vol. 17). Graó.