Papillas de cereales para bebés: lo que debes saber

Te vamos a enseñar buenas papillas de cereales para la dieta de los bebés. Ten en cuenta que las opciones saludables dependen de los ingredientes que escojas.

mano de madre prepara papilla de cereales industrial con leche y revuelve cuchara bol

Las papillas de cereales son preparaciones habituales en la dieta de los bebés y consiguen aportar una gran cantidad de nutrientes esenciales, necesarios para el crecimiento.

Ahora bien, para que resulten una opción saludable es determinante elegir buenos ingredientes. Sobre todo, evitar la presencia de azúcares simples y otros aditivos que condicionan la salud metabólica de los pequeños.

Lo primero que hay que tener en cuenta es que los carbohidratos simples pueden impactar de manera muy negativa en el organismo del bebé y predisponerlo al estrés pancreático y a la resistencia a la insulina a futuro. Además, resulta poco conveniente que los bebés se acostumbren a los sabores muy dulces, pues estos les condicionan las elecciones de los alimentos de mayores.

¿Cuándo introducir los cereales en la dieta?

Bebé tomando papilla hecha a partir de alimentos propios de una dieta vegana.

Para empezar hay que destacar que los cereales no se deben incluir en la pauta del bebé antes del sexto mes de vida. Hasta entonces el mejor alimento es la leche materna y a partir de ahí, se puede comenzar con la alimentación complementaria de forma segura.

Ahora bien, hay que tener en cuenta que las papillas de cereales no son imprescindibles en la dieta del bebé. Ni siquiera suponen la única forma de ofrecer estos alimentos. Además, hay que evitar añadir cereales al biberón ya que esto favorece a un desequilibrio energético y predispone al sobrepeso infantil.

Por otra parte, es necesario mencionar que existen diferentes tipos de cereales y que no todos cuentan con la misma calidad.

La mejor opción suele ser la avena, pues se compone de beta glucanos, unos elementos muy necesarios para asegurar la función digestiva. De acuerdo con un estudio publicado en The Journal of Nutritional Biochemistry, estos consiguen estimular el crecimiento de las bacterias que conforman la microbiota.

Cuidado con las papillas de cereales industriales

Es común encontrar en los comercios papillas de cereales ya preparadas. Si bien se promocionan como naturales, en muchos casos no lo son del todo. La principal razón es que contienen azúcares añadidos en elevadas concentraciones. Esto promueve el estrés pancreático desde edades tempranas de la vida.

Además, los cereales presentes en estas papillas suelen estar excesivamente triturados, condición que favorece a una rápida absorción de los carbohidratos y al incremento del índice glucémico. A medio plazo, esto se traduce en un descontrol de los niveles de azúcar en sangre y lleva a la resistencia a la insulina.

La mejor opción siempre resulta elaborar las papillas de cereales de manera casera, para evitar los aditivos y para combinar la avena con otros ingredientes (por ejemplo, copos de maíz o de trigo o sémola de arroz). De este modo, se obtiene un alimento repleto de carbohidratos de cadena larga, es decir, de buena calidad.

Además, las papillas caseras permiten complementarlas con leche (fuente de grasas y proteínas) o frutas (fuente de fibras).

¿Es positivo incluir cereales integrales en las papillas?

Lo óptimo es incluir siempre cereales integrales en la papillas para los bebés, pues estos destacan por su elevada concentración de fibra. Dicho elemento resulta fundamental para conseguir un tránsito intestinal eficiente y para lograr que la microbiota se vuelva competente.

Además, el consumo regular de fibra en cantidades suficientes se asocia a un menor riesgo de desarrollar problemas de salud crónicos y complejos a futuro. Por eso, también se recomienda aumentar la ingesta de frutas y verduras todos los días del año.

plato bebe papilla cereales frutas cuchara babero cubos alimentacion complementaria

Las papillas de cereales son beneficiosas para el bebé

Como has podido comprobar, las papillas de cereales son preparaciones que cuentan con varios beneficios para el bebé.

Es positivo que aparezcan en la dieta de los más pequeños con cierta regularidad, ya que le aportan energía y nutrientes de alta calidad. Así mismo, sirven para mejorar la función digestiva de los bebés. Ahora bien, hay que incluirlas en el contexto de una pauta variada y no limitarse solo a esta opción.

Finalmente, debes tener en cuenta que las versiones comerciales de las papillas de cereales no son tan beneficiosas como parece. Los ingredientes de las mismas suelen estar demasiado triturados y pueden contener altas cantidades de azúcares simples y aditivos químicos. Por eso, lo mejor es evitar los ultraprocesados y siempre es prepararlas en casa.

Bibliografía

Todas las fuentes citadas fueron revisadas a profundidad por nuestro equipo, para asegurar su calidad, confiabilidad, vigencia y validez. La bibliografía de este artículo fue considerada confiable y de precisión académica o científica.

  • Krol, K. M., & Grossmann, T. (2018). Psychological effects of breastfeeding on children and mothers. Psychologische Effekte des Stillens auf Kinder und Mütter. Bundesgesundheitsblatt, Gesundheitsforschung, Gesundheitsschutz61(8), 977–985. Disponible en: https://doi.org/10.1007/s00103-018-2769-0
  • Jayachandran, M., Chen, J., Chung, S., & Xu, B. (2018). A critical review on the impacts of β-glucans on gut microbiota and human health. The Journal of nutritional biochemistry61, 101–110. Disponible en: https://doi.org/10.1016/j.jnutbio.2018.06.010
Scroll al inicio