5 actividades para la expresión emocional en la adolescencia
Las emociones deben expresarse desde la más tierna infancia, pero cuando se llega a la juventud aún adquiere más importancia. Por esto, vamos a explicarte algunas actividades para la expresión emocional en la adolescencia.
La expresión emocional en la adolescencia
La expresión emocional en la adolescencia adopta una gran importancia. En caso de no hacerlo correctamente, los jóvenes pueden tener serios problemas emocionales tanto en esa edad como posteriormente. La inteligencia emocional es fundamental en la vida de cualquier persona para mejorar la salud mental y el rendimiento, tanto a nivel personal, como académico o profesional.
Cuando hablamos de expresión emocional, junto con la inteligencia emocional, lo entendemos como la habilidad de identificar, entender y gestionar las emociones tanto propias como de los demás. Esto debe ser aplicable a cualquier ámbito de la vida.
¿Por qué algunos adolescentes tienen dificultades?
No es nuevo que algunos adolescentes puedan encontrar dificultades para poder expresar sus emociones correctamente. Por eso, es fundamental enseñarles que estas no son buenas ni malas.
Los jóvenes deben saber que no necesitan juzgar las emociones, sino simplemente notarlas y sentirlas. Solo de esta manera después serán capaces de identificarlas, pero no como buenas o malas, sino como cómodas e incómodas. Es por esto que resulta muy importante hacer actividades con ellos para que reflexionen sobre sus propias emociones y así, puedan desarrollar una buena inteligencia emocional.
Actividades para trabajar la expresión emocional
La educación emocional debería cursarse como asignatura obligada en todos los centros educativos. Aunque no sea así, la realidad es que los alumnos que son emocionalmente inteligentes tendrán mejor bienestar y una personalidad mucho más fuerte. Incluso, esto les ayudaría a desarrollar una buena resiliencia en el futuro.
Por todo esto, vamos a explicarte algunas actividades para que puedas trabajar con tus hijos o con tus alumnos y que, de este modo, sean capaces de gestionar mejor su expresión emocional y que encuentren las respuestas en sus emociones.
1. Escribir un diario
Hacer un diario es una actividad ideal para aquellos adolescentes a los que les gusta escribir. De esta manera, podrán redactar sus vivencias y ver objetivamente lo que les ha ocurrido y las sensaciones que han tenido al respecto. Incluso, esta práctica les servirá de desahogo emocional.
2. Hacer pausas emocionales en momentos tensos
Con la labilidad emocional de los adolescentes, es normal que, como padre, sientas que pueden ser un campo difícil de explorar. En este sentido, es necesario que aprendan a notar cuando van a explotar emocionalmente. De esa forma, antes de que eso ocurra, podrán hacer una pausa emocional de lo que les sucede.
Esta pausa emocional se puede dar en diversas opciones. Por ejemplo, retirarse del lugar de conflicto, cerrar los ojos y respirar durante algunos segundos, escribir lo que se siente, dar un paseo o simplemente parar de llorar. Después, habrá que pensar cómo continuar para resolver esa situación.
3. Escribir una carta
Cuando tienen un conflicto emocional con una persona, escribir una carta se convierte en una gran herramienta. Puede ser una carta simbólica, únicamente para ordenar su mente ante el conflicto; o bien, una para darle a esa persona que es importante para ellos. Si la persona con la que tienen el conflicto no está entre nosotros, también es una manera de conectarse con ella y trabajar las emociones que nos genera.
4. Realizar preguntas y respuestas con vocabulario emocional
Es fundamental que los adolescentes aprendan a poner palabras y nombres a lo que sienten. En este sentido, deben identificar la emoción que nos hace sentir una experiencia concreta y, de esta manera, poder describir los sentimientos y llegar a la causa raíz más fácilmente. Esto les permitirá lidiar mejor con lo que les sucede y buscar soluciones.
5. Convertir las críticas en palabras constructivas
Enseñar a los adolescentes a que las críticas las conviertan en palabras constructivas es fundamental. De esta manera, no se tomarán las cosas demasiado a pecho. Para ello, tienen que aprender a responder a estas preguntas cuando reciban una crítica: ¿qué puedo aprender de esas palabras? O, ¿cómo me pueden ayudar esas palabras a mejorar?
Cómo ser un buen referente de expresión emocional
Por supuesto, como padres, es fundamental ser un buen ejemplo de expresión emocional. Solo de esa manera los adolescentes aprenderán a tener una buena gestión en este aspecto. En caso de que seas una persona que grita o que bloquea sus emociones, ¿qué piensas que aprenderán tus hijos? Por eso, debes ser lo que quieres que ellos aprendan para su vida.
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- J. Siegel, D., y Berástegui Rubio, J., M. (2014) Tormenta cerebral: El poder y el propósito del cerebro adolescente. Editorial: ALBA