Los juegos de cocina para niños son más beneficiosos de lo que podemos ver a simple vista. De hecho, suponen una gran oportunidad para aprender a ser responsables y organizados, entre otros aspectos. Además, hoy en día hay muchas formas para disfrutar de esta actividad y aprender a la vez.
Al enseñarles a participar activamente en la cocina, incluso de vez en cuando, estaremos brindándoles un gran aporte para toda su vida. Como padres, la cocina es uno de los mejores aportes que podemos brindarles para su día a día. Descubre a continuación más al respecto.
Si bien la cocina puede ser a veces un tanto dura, por lo general, se trata de una actividad que permite dar rienda suelta a la imaginación y con ello, permite despejar la mente. De esta forma somos capaces de distraernos y, entonces, es cuando estamos más aptos adquirir nuevo conocimiento a través de la experiencia.
Bien sean nuestro delirio o no, los juegos de cocina para niños son un excelente modo de compartir tiempo en familia y de propiciar nuevas formas de aprendizaje.
Además, en el caso de que no seamos muy aficionados a la cocina, quizás podamos incluso redimirnos y aprender a disfrutarla, aunque sea un poco, gracias a nuestros hijos… Es una manera de crear una actividad conjunta que todos disfruten.
Muchas posibilidades en una cocina
La cocina es una actividad gratificante porque relaciona a las personas con un aspecto fundamental de la vida como es la alimentación. La cocina, además, es un lugar que representa el calor del hogar. Y evoca recuerdos, porque es un espacio lleno de historias y anécdotas.
Los juegos de cocina para niños brindan una oportunidad maravillosa para estrechar lazos, pasando tiempo de calidad juntos. Además, ayudan a desarrollar la capacidad de aprendizaje mutuo.
En la cocina se puede incluso hacer clases de matemáticas (indirectas) con los niños. Por ejemplo, al sumar o restar la cantidad de ingredientes para lograr una mezcla en específico, entre otros.
A su vez, se puede hablar de geografía, de los lugares de los que viene un determinado producto o del origen del plato que se piensa cocinar. Aquí pueden ir incluidos algunos consejos y curiosidades que definitivamente calarán en los pequeños. Esta es una forma distinta de acercarlos a la cultura general.
Por otra parte, mediante los juegos de cocina se pueden adquirir hábitos de higiene así como una noción acerca de la forma en la cual manipular los alimentos. Así también se aprende a identificar los diversos productos y sus respectivos estados de conservación.
Consejos para aprovechar bien los juegos de cocina para niños
No te pierdas los siguientes consejos para tener en cuenta:
- Elegir recetas sencillas y adecuadas para la edad de los niños.
- Elegir una receta complicada o de larga preparación puede terminar aburriendo a los niños. En las recetas se deberán utilizar ingredientes manejables que no sean muy delicados.
- Dejar que los niños escojan lo que cocinarán (dentro de las opciones disponibles).
- Dentro de un conjunto de opciones que se les dé, el niño debería poder optar lo que se cocinará para que su interés se vea acrecentado. Que sea incluido en el proceso resultará mucho mejor que solo ser invitado para que reciba órdenes.
- Ir de compras juntos para aumentar la emoción por el proyecto a la vez que se les brinda una noción realista de lo que implica cocinar.
- Ir de compras con los niños es un buen ejercicio para su educación. Permitir que busque entre los vegetales o en otras áreas le hará conocer la apariencia de cada uno de ellos. De igual modo, si el niño sabe escribir, puede ser muy provechoso que sea él quien escriba la lista de la compra.
- Cabe destacar que al guiar al niño en la cocina, estamos educándoles acerca de muchos aspectos a la vez. Colores, texturas, sabores, modo de empleo, etcétera.
La cocina es una actividad que enseña paciencia, organización y cooperación. Esto se traduce en un gran aporte para el niño, ya que al desarrollar estas habilidades, así como la destreza para cocinar le será de gran utilidad para el resto de su vida.
Seguridad, higiene y organización en los juegos de cocina
Es importante que tengamos en cuenta que todos los juegos de cocina para niños deben contar con las medidas de seguridad apropiadas. Esto implica que se debe delimitar una zona de trabajo que quede alejada de las hornillas encendidas para evitar quemaduras, y otros aspectos importantes como:
- No dejar los objetos afilados que empleamos normalmente en la cocina al alcance de los niños. Es decir, tijeras, cuchillos, corta-pizzas y objetos similares. Lo ideal es que ellos tengan un kit de cocina con utensilios apropiados para su edad.
- Tanto como si se cuenta como si no con dicho kit infantil de cocina, lo mejor es supervisar su progreso y estar atentos para ayudarles a lo largo de la preparación de la receta que hayan escogido. De esta forma, podremos enseñarles distintas formas de cortar una cebolla, por ejemplo, o simplemente cómo sostener adecuadamente un cuchillo.
- Fomentar la higiene. Debemos recordarle a los pequeños que deben lavarse las manos antes de comenzar a cocinar, a veces durante, y, por supuesto, al finalizar la actividad. Hay que recordarles que si comen mientras cocinan, no es higiénico, además, los alimentos crudos (especialmente las masas) pueden ocasionarles dolores de estómago.
Más consejos para los juegos de cocina
No te puedes olvidar los siguientes consejos también muy importantes:
- También es importante hacerle saber al niño que debe lavar los alimentos con los que va a trabajar. Para ello, debemos hacerles una demostración, en la cual puedan comprobar que no se trata sólo de colocar el ingrediente bajo el agua y listo. Hay que frotar un poco a veces, para asegurarnos de que queden bien limpios. Por ejemplo, las patatas deben quedar bien lavadas para eliminar los rastros de tierra.
- Organización preliminar. Tener un plan de acción previamente establecido ayudará a que ese momento especial pueda ser aprovechado al máximo. Este plan de acción debe dejar las cosas más complicadas/de riesgo para el adulto, mientras que las más sencillas como amasar, agregar sal, etcétera, pueden ser tareas para el niño.
- Dejar que los niños prueben los ingredientes. Es importante dejar que los pequeños cocineros prueben un poco de lo que van haciendo, siempre en cantidades pequeñas, para que así el niño pueda empezar a construir su memoria gustativa y desarrolle su paladar.
Las 2 recetas más fáciles para los niños
¡Probad a hacer alguna de estas dos recetas!
Tostadas francesas
Ingredientes
- 2 huevos.
- ½ taza de leche.
- 1 cucharada de mantequilla.
- 4 rodajas de pan.
Preparación
Batir 2 huevos en un bol y agregar la leche hasta que estén bien integrados. Luego, empapar los panes –uno a uno– en la preparación anterior. Finalmente, colócalas en una sartén caliente con un poco de mantequilla derretida.
Galletas de mantequilla
Ingredientes
- 250 gr de harina blanca.
- 150 gr de mantequilla fría.
- 100 gr de azúcar.
- 1/2 cucharadita de extracto de vainilla.
- 3 yemas de huevo.
Preparación
Mezclar todos los ingredientes hasta que queden bien integrados. Dejar reposar en la nevera por 30 minutos. Luego, con la ayuda de un rodillo estirar la masa hasta que quede de 1cm de grosor. Finalmente, corta con un molde y colocar sobre un papel antiadherente y meter al horno a 180 grados por un lapso de 10 minutos.
Un último detalle: no te olvides de disfrutar del proceso. Ten paciencia cuando veas el desorden en la cocina. No todo va a ser perfecto las primeras veces. Además, debemos dar el ejemplo para que puedan asimilar la idea de limpieza y/o organización que queramos inculcarles. Cocinar no tiene por qué convertirse en un pesar.