Las boqueras en los niños son muy frecuentes. Esta es una afección que suele producir dolor y molestias al abrir la boca, hacer gestos con los labios o consumir alimentos. Por tal razón, deben tratarse a tiempo para aliviar los síntomas y para ello es importante saber sus causas y tratamientos.
¿Qué son las boqueras?
Se trata de una enfermedad conocida por los profesionales de salud como queilitis angular. Según afirma una investigación publicada por la Revista Cubana de Estomatología, los especialistas la describen como un estado inflamatorio de la submucosa labial o las comisuras labiales.
La infección por hongos y bacterias es la causa más frecuente. Además, ciertos trastornos nutricionales y hematológicos también originan esta condición.
¿Cómo saber si un hijo tiene boqueras?
Las boqueras se caracterizan por inflamación y enrojecimiento en la comisura de los labios, así como costras, úlceras o pequeñas fisuras. Como consecuencia, se produce dolor al abrir la boca. En los bebés, el llanto siempre es la primera señal; en el caso de los niños mayores, podrán expresar sus malestares o dolor al contar lo que les pasa.
Las lesiones tienden a ser dolorosas e irritantes, por lo que los niños suelen rozarlas y humedecerlas. Esto último complica aún más las heridas y alarga el tiempo de curación. Al humedecer las grietas, las mismas se vuelven a abrir y todo el proceso patológico inicia de nuevo.
En general, las boqueras se clasifican en unilaterales o bilaterales, dependiendo si afecta solo a un lado de la boca o a ambos, tal y como describe el Atlas a color de enfermedades bucales (2011). En casos avanzados, la queilitis está recubierta por una membrana amarillenta o blanquecina que genera la sensación de bloqueo al mover los labios.
Es importante destacar que las lesiones no suelen sangrar. No obstante, son propensas a infectarse; ya que se trata de una herida abierta por la que pueden entrar agentes patógenos.
Causas comunes de las boqueras infantiles
Es conveniente determinar el origen de la queilitis o las boqueras en los niños para dar un tratamiento adecuado. Las causas más frecuentes son las siguientes:
1. Saliva
La acumulación de saliva y el babeo constante en la comisura labial permite la proliferación de bacterias (sobre todo, del estreptococo y el estafilococo). Estos gérmenes pueden contagiarse al estar en contacto físico con otras personas. Si el bebé está en etapa de dentición, es propenso a la queilitis.
Por el contrario, como bien determina un estudio publicado en el Acta Clínica Croática, a medida que disminuye la secreción de saliva, la sequedad es la encargada de promover el agrietamiento y la descamación en los labios. Además, existe el riesgo de contraer Candida albicans como consecuencia de la inflamación de la queilitis angular.
2. Deficiencia de vitaminas
Algunos niños tienen carencias de vitaminas A, B, D, ácido fólico, hierro y zinc, o presentan cuadros anémicos debido a la mala alimentación. La deficiencia de estos nutrientes les hace más susceptibles a sufrir boqueras, según una investigación desarrollada en 2021 por varios especialistas italianos.
Si presenta inflamación y enrojecimiento en la comisura de los labios, costras o pequeñas fisuras, es probable que sufra boqueras.
3. Uso del chupete
En el caso de bebés, el uso del chupete y el biberón pueden ocasionar la acumulación de saliva en la comisura de los labios. Esto provoca que el niño sea más propenso a desarrollarlas.
De igual forma, los pequeños tienden a llevarse las manos u otros objetos a la boca cuando inicia la dentición. Esto favorece la aparición de heridas que pueden contaminarse.
4. Reacciones alérgicas
En algunos casos, las boqueras son originadas por procesos inflamatorios en la boca ante una reacción de hipersensibilidad. Según sugiere un artículo publicado por la Revista de Atención Primaria, este tipo de queilitis tiene características clínicas similares a la alergia de contacto. Algunos alérgenos asociados a las boqueras por alergia son las siguientes:
- Perfumes, colorantes y cremas cosméticas.
- Alimentos que contienen especias y alcoholes.
- Pasta dental, enjuagues o colutorios.
5. Otras causas de las boqueras en niños
- Uso de los mordillos o chuparse los dedos.
- Exposición a temperaturas extremas o estar expuesto al sol mucho tiempo.
- Uso de prótesis dentales que no encajen bien.
- Trastornos nerviosos.
- Deshidratación.
- Problemas digestivos.
- Temperaturas extremadamente bajas.
- Sistema inmunológico débil.
Además, si está en edad escolar, el estrés provocado por los exámenes, actividades en clase u otros motivos puede generar boqueras, como bien sugiere la siguiente investigación publicada en 2021 por la Revista Universitas Medica. Asimismo, puede deberse a un virus que incube el niño, como el de la gripe, o también debido a la fiebre.
¿Cómo tratar la queilitis angular en tu hijo?
Un aspecto importante que debes tener en cuenta es conocer la causa que ha provocado las boqueras en el niño. Sin embargo, la patología suele remitir por sí sola al cabo de 5 o 6 días.
Según cómo esté tu hijo de afectado, puedes acudir a su médico tratante. Este le indicará medicamentos adecuados como los antiinflamatorios, los antibióticos y las cremas bactericidas o fungicidas de uso tópico.
Consejos para tratar las boqueras en casa
Si la afección es leve, pueden tratarse desde casa con algunas recomendaciones y remedios caseros. Algunos de ellos son los siguientes:
- Seguir una alimentación rica en vitaminas y minerales.
- Mantener el niño bien hidratado (sobre todo, con agua).
- Conservar la higiene en el hogar.
- Secar la boca del niño a menudo con un paño limpio y suave.
- Aplicarle las cremas medicadas.
- Evitar cualquier alimento o producto que le cause alergias.
- No darle alimentos calientes o demasiado ácidos.
- Impedir que el niño bese a sus hermanos u otras personas; ya que cuando se contagia por un hongo o una bacteria, como bien señalan los expertos de la Clínica Dental los Valles, es contagiosa.
- Evitar, en lo posible, que se toque o rasque la zona afectada.
- Colocar manteca de cacao antes de dormir para mantener la zona hidratada y evitar que la lesión empeore.
5 remedios naturales a base de plantas para aliviar las boqueras en niños
Existen algunos remedio útiles para el alivio de las boqueras en los más pequeños. Ten en cuenta que esta afección dura entre 5 a 6 días. Si persiste, debes consultar con un especialista.
- Aloe vera: el aloe tiene propiedades hidratantes, antibacterianas y cicatrizantes, las cuales han sido comprobadas por diferentes estudios, como el siguiente publicado en 2020 por la Revista Moléculas. Para aprovechar sus beneficios, frota con suavidad parte de la pulpa unas 3 veces al día de forma directa en las boqueras.
- Parietaria: aunque no hay evidencia científica, se dice que permite aliviar la queilitis de forma natural; puedes colocarle una cataplasma de la planta por las noches. No obstante, es necesario tener sumo cuidado; ya que algunos niños presentan alergia al polen de esta planta.
- Aceite de rosa mosqueta: es hidratante y cicatrizante. De hecho, según un estudio publicado en Planta Medica, acelera la curación de las heridas. Aplica un par de gotas, 3 veces al día. Es recomendable usarlo cuando las boqueras acaban de salir.
- Miel: la miel debe ser natural para que sea efectiva; ya que ayuda a combatir la infección y es cicatrizante, según un artículo publicado por la Revista Internacional de Acupuntura. Antes de dormir, coloca unas gotas en las lesiones. No obstante, no debe utilizarse en niños menores de 1 año por ser fuente de esporas; ya que se corre el riesgo de desarrollar botulismo (enfermedad rara, pero grave, que ataca a los nervios del cuerpo).
- Flores de caléndula: contiene emolientes, es antiséptica y cicatrizante. Procede a lavar la zona afectada varias veces al día o aplicarle cremas a base de esta planta. Como bien determinan los resultados de una investigación publicada por la Biblioteca Nacional de Estados Unidos, estas cremas aumentan la hidratación y la firmeza de la piel; por lo que son capaces de acelerar la cicatrización de las boqueras en los niños.
¿Cómo prevenir la aparición de queilitis angular?
Es posible evitar la aparición de las boqueras en los más pequeños si aplicas algunas recomendaciones. El aseo y cuidado de la piel de la cara y los labios es fundamental para evitar que esta tienda a agrietarse. Además, el consumo adecuado de agua previene la deshidratación y las lesiones en la boca.
Tal y como señala un estudio publicado en 2015 por la Revista Fronteras en Microbiología, la limpieza mecánica y cuidadosa de los dientes es la piedra angular de la prevención de infecciones bucales por cándida.
Por otro lado, se aconseja no exponerse a temperaturas extremas de forma brusca o por demasiado tiempo. De igual manera, la alimentación balanceada es vital para proveer un adecuado aporte de vitaminas y nutrientes (en especial, de hierro, ácido fólico y vitamina B12).
La higiene y el tratamiento oportuno son claves para aliviar las boqueras en niños
Como ves, las boqueras son lesiones dolorosas que aparecen en la comisura de la boca. Existen diversas causas, pero la acumulación de saliva y el déficit de vitaminas son los principales factores que afectan de forma directa a los niños.
Si tu hijo tiene boqueras, no debes alarmarte. Con una higiene adecuada y el tratamiento correcto, puede curarse en poco tiempo. Sin embargo, ante cualquier duda, lo mejor es consultar al médico. Él será quien reconozca las posibles causas y determine el mejor tratamiento según el caso.
Bibliografía
Todas las fuentes citadas fueron revisadas a profundidad por nuestro equipo, para asegurar su calidad, confiabilidad, vigencia y validez. La bibliografía de este artículo fue considerada confiable y de precisión académica o científica.
- Akhtar, N., Zaman, S. U., Khan, B. A., Amir, M. N., & Ebrahimzadeh, M. A. (2011). Calendula extract: effects on mechanical parameters of human skin. Acta Poloniae Pharmaceutica, 68(5), 693–701. https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/21928714/
- Bermúdez Bermúdez, M., Cuadro Montero, K. M., Parra Sanabria, E. A., Rueda Jiménez, A., & Peña Vega, C. P. (2021). Manifestaciones en la cavidad bucal y en la cara asociadas a la COVID-19. Universitas Médica, 62(3), 115–131. https://doi.org/10.11144/javeriana.umed62-3.mcbc
- Cazzolla, A. P., Cosola, M. D., Ballini, A., Santacroce, L., Lovero, R., Testa, N. F., Lacarbonara, V., De Franco, A., Troiano, G., Cantore, S., Di Comite, M., Nocini, R., Muzio, L. L., Crincoli, V., & Dioguardi, M. (2021). The association between nutritional alterations and oral lesions in a pediatric population: An epidemiological study. BioMed Research International, 2021, 9992451. https://doi.org/10.1155/2021/9992451
- Clínica Dental Los Valles. (2018). Causas, tratamiento y contagio de las Boqueras. Clínica Dental Los Valles. https://www.clinicalosvalles.es/boqueras-causas-tratamiento-y-contagio/
- García López, E., Blanco Ruiz, A. O., Rodríguez García, L. O., Reyes Fundora, D., & Sotres Vázquez, J. (2004). Queilitis: Revisión bibliográfica. Revista Cubana de Estomatologia, 41(2), 0–0. http://scielo.sld.cu/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0034-75072004000200009
- Izquierdo Martinez, M., & Avellaneda Fernandez, A. (2004). Enfermedades raras: un enfoque práctico. Instituto de Salud Carlos III. https://repisalud.isciii.es/handle/20.500.12105/4984
- Langlais, R. P., Miller, C. S., & Nield-Gehrig, J. S. (2011). Atlas a color de enfermedades bucales. Editorial El Manual Moderno. https://books.google.es/books?id=RXfLCQAAQBAJ&dq=las+boqueras+o+queilitis+se+clasifican+en+unilaterales+o+bilaterales&lr=&hl=es&source=gbs_navlinks_s
- Lei, Z., Cao, Z., Yang, Z., Ao, M., Jin, W., & Yu, L. (2019). Rosehip oil promotes excisional wound healing by accelerating the phenotypic transition of macrophages. Planta Medica, 85(7), 563–569. https://doi.org/10.1055/a-0725-8456
- Lugović-Mihić, L., Pilipović, K., Crnarić, I., Šitum, M., & Duvančić, T. (2018). Differential diagnosis of cheilitis - how to classify cheilitis? Acta Clinica Croatica, 57(2), 342–351. https://doi.org/10.20471/acc.2018.57.02.16
- Patil, S., Rao, R. S., Majumdar, B., & Anil, S. (2015). Clinical appearance of oral candida infection and therapeutic strategies. Frontiers in Microbiology, 6, 1391. https://doi.org/10.3389/fmicb.2015.01391
- Pelta, R., & Vivas, E. (1997). Piel y Alergia. I.B.D. https://books.google.es/books?id=AQDAiWLj8_YC&dq=Parietaria:+permite+aliviar+la+queilitis+de+forma+natural%3B&lr=&hl=es&source=gbs_navlinks_s
- Ras Monleón, R. M., & Riera Ras, P. (1998). Manejo de las queilitis de contacto en atención primaria. Atencion primaria, 22(1), 53–58. https://www.elsevier.es/es-revista-atencion-primaria-27-articulo-manejo-queilitis-contacto-atencion-primaria-14851
- Sánchez, M., González-Burgos, E., Iglesias, I., & Gómez-Serranillos, M. P. (2020). Pharmacological update properties of aloe Vera and its major active constituents. Molecules (Basel, Switzerland), 25(6), 1324. https://doi.org/10.3390/molecules25061324
- Siedentopp, U. (2010). La miel: producto alimenticio y medicinal eficaz contra la inflamación, la tos y la ronquera. Revista internacional de acupuntura, 4(1), 48–51. https://doi.org/10.1016/s1887-8369(10)70013-2