Ver cómo tu hijo crece y descubre el mundo es una experiencia maravillosa que llena cada día de momentos inolvidables. El desarrollo del bebé de 8 meses trae consigo cambios físicos, cognitivos y lingüísticos que te sorprenderán. Entender los hitos importantes de esta etapa te ayudará a sentirte más tranquila al saber que tu pequeño avanza como debería.
Como mamá, es fundamental saber qué observar y cómo apoyar a tu bebé durante estos meses tan cruciales. ¿Está alcanzando las metas que debería? ¿Cuántos dientes deberían aparecer? ¿Es normal que ya empiece a balbucear algunas palabras? ¡Vamos a descubrir juntos todo lo que tu angelito puede lograr!
Cambios en el desarrollo físico y la motricidad
Es impresionante cómo en tan solo unos meses tu bebé ha pasado de ser un recién nacido a un pequeño explorador lleno de energía. A los 8 meses, los cambios en el desarrollo físico y la motricidad son notables y reflejan el constante crecimiento y fortalecimiento de su cuerpo. Desde su capacidad para mantenerse sentado sin apoyo hasta sus primeros intentos de gatear, cada pequeño avance es un paso hacia una mayor independencia.
1. Peso y talla promedio
Acorde con la Academia Americana de Pediatría (AAP), a los 8 meses la mayoría de los bebés pesan entre 8 y 10 kilos. Por lo general, las niñas suelen pesar alrededor de medio kilo menos. Para cuando cumpla un año, tu pequeño habrá triplicado su peso al nacer y medirá entre 71 y 81 centímetros (28 a 32 pulgadas).
Estas cifras pueden variar según factores como la genética, el sexo y la alimentación, pero lo más importante es que tu bebé crezca de manera constante y saludable. Si tienes dudas, siempre es buena idea consultarlo con el pediatra para asegurarte de que todo marcha bien.
2. Habilidades motrices
A los 8 meses, tu bebé empieza a desarrollar habilidades motrices que le permitirán moverse y explorar su entorno de nuevas maneras. Estos avances no solo son fascinantes de observar, sino que también son cruciales para el desarrollo físico y la independencia de tu bebé. Según información de la Clínica Mayo, entre estos hitos destacan los siguientes.
- Sentarse sin apoyo: a esta edad, es probable que tu bebé pueda rodar en ambas direcciones y sentarse solo sin necesitar apoyo. Esto es un gran paso, ya que le permite usar sus manos para explorar juguetes y objetos a su alrededor.
- Comenzar a gatear: muchos bebés empiezan a gatear alrededor de esta edad. Aunque algunos se desplazan de otras maneras, como arrastrándose sobre el estómago o moviéndose en círculos, el gateo es un hito importante que ayuda a fortalecer los músculos y a coordinar movimientos.
- Manipulación de objetos: tu bebé mejora en la coordinación ojo-mano, lo que le permite agarrar y manipular objetos con mayor destreza. Puede pasar juguetes de una mano a otra y jugar con ellos, lo que también estimula su desarrollo cognitivo.
- Intentos de ponerse de pie: algunos pequeños empiezan a intentar levantarse con apoyo, ya sea agarrándose de los muebles o de tus manos. Este es el primer paso para caminar, y es emocionante ver cómo cada vez se siente más seguro en sus intentos.
Avances en el desarrollo cognitivo y social
A pocos meses de cumplir su primer año de vida, tu bebé experimenta importantes avances en su desarrollo cognitivo, lo que le permite interactuar de manera más compleja con el mundo que lo rodea.
La Asociación Española de Pediatría (AEP) resalta que los siguientes hitos son cruciales para el crecimiento de tu hijo a los 8 meses de edad, ya que le permiten entender mejor su entorno y comunicarse de manera más efectiva.
1. Reconocimiento de caras y objetos
En esta etapa, tu bebé puede reconocer a personas familiares y objetos importantes en su entorno. Es probable que reaccione de manera diferente a las personas, con una preferencia por aquellos con los que está más familiarizado. Debido a esto, es común que experimente la angustia por separación y prefiera estar cerca de sus padres.
También, empieza a entender que los objetos existen incluso cuando no los ve, una habilidad conocida como permanencia del objeto.
2. Interacción social
A los 8 meses, tu pequeño manifiesta un rango más amplio de emociones y reacciones. Puede reírse, sonreír y expresar desagrado de manera más evidente. Además, empieza a disfrutar del juego interactivo, como el juego de esconderse y buscar, y puede intentar imitar tus acciones, como aplaudir o hacer sonidos.
Desarrollo del lenguaje y la comunicación
A pesar de que tu bebé aún no dice palabras completas, entre los 8 y 12 meses el desarrollo del lenguaje aumenta y puede balbucear y hacer sonidos que imitan el habla. Estos sonidos son una forma de explorar y practicar la comunicación.
Al principio, las primeras palabras más usuales suelen ser combinaciones de dos sílabas, como «ma-ma» o «da-da». Luego, empieza a juntar varias sílabas, como «ba-da-ma», y a imitar como suenas cuando hablas. Para cuando cumpla un año, muchos niños ya pueden decir «mamá» o «papá», y tal vez alguna otra palabra que tenga un significado.
A esta edad, los bebés también suelen responder a su nombre y a algunas palabras simples, como «no» o «adiós».
Cuando le leas o hables, dale muchas oportunidades para participar. Hazle preguntas y espera a ver si responde. Si dice «papapa», repítelo y observa su reacción. Aunque estos intercambios puedan parecer simples, le enseñan a tu bebé que la comunicación es una conversación de ida y vuelta, y que está invitado a participar.
Los libros ilustrados son una gran herramienta para ayudar a tu bebé a aprender que las cosas tienen nombres. Elige aquellos con páginas grandes, de tela o de vinilo que puedan pasar solitos, y con dibujos sencillos y coloridos de cosas que pueda reconocer con facilidad.
Aparición de los dientes
Por lo general, el proceso de dentición en los bebés comienza alrededor de los 6 a 8 meses de edad. Así, es probable que ya veas su primer diente asomarse. Los incisivos centrales inferiores suelen ser los primeros en salir. Después de ellos, esperarás la llegada de los incisivos centrales superiores.
Este proceso de erupción dental puede traer consigo algunos malestares. Tu bebé puede tener encías inflamadas, babear más de lo habitual y buscar morder objetos para calmar el dolor. También es posible que notes cambios en su sueño o en su apetito debido a las molestias.
Para ayudar a tu pequeño a sobrellevar esta etapa, puedes ofrecerle mordedores fríos o masajear con delicadeza sus encías con una tela suave envuelta en tu dedo limpio. No olvides mantener una buena higiene dental desde el principio. Limpiar sus encías con un paño suave después de cada comida es una de las tantas formas de hacerlo.
Consejos para estimular el desarrollo de tu bebé de 8 meses
Para ayudar a tu pequeño a desarrollar habilidades físicas y cognitivas, fortalecer el vínculo y hacer que el aprendizaje sea una experiencia divertida y enriquecedora, te recomendamos los siguientes ejercicios.
- Fomentar el juego activo: proporciona juguetes que incentiven el movimiento y la exploración, como pelotas suaves o bloques de construcción. Estos juguetes ayudan a tu bebé a mejorar su motricidad fina y gruesa mientras se divierte.
- Ofrecer experiencias sensoriales: permite que tu bebé explore diferentes texturas y materiales. Los juguetes con distintas texturas y los alimentos con variadas consistencias enriquecen sus sentidos y fomentan su curiosidad.
- Estimular el juego social: jugar con otros niños o adultos enseña habilidades sociales importantes. Promueve el juego imitativo y anima a tu bebé a compartir y cooperar con otros.
- Brindar oportunidades para el movimiento: asegúrate de que tu pequeño pase tiempo en el suelo para estimular el gateo y otros movimientos. Crea un espacio seguro y cómodo donde pueda explorar y moverse con libertad.
- Leerle y hablarle a diario: la lectura y la conversación diaria son esenciales para el desarrollo del lenguaje. Elige libros con páginas fáciles de pasar y dibujos coloridos. Habla con tu bebé sobre lo que hace y hazle preguntas para estimular su participación.
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El desarrollo del bebé de 8 meses es una etapa fascinante
Cada bebé se desarrolla a su propio ritmo, así que confía en el proceso y celebra los pequeños logros a medida que llegan. Recuerda que los anteriores hitos son solo el comienzo de un emocionante camino de aprendizaje y crecimiento que continuará desarrollándose a medida que tu bebé avanza hacia nuevas etapas de su vida.
Bibliografía
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