Las 6 preocupaciones más comunes de los adolescentes

A primera vista puede parecer que a los adolescentes no les importa nada más que divertirse, pero lo cierto es que no están exentos de preocupaciones. En medio de corazones acelerados y risas espontáneas, los jóvenes se encuentran ante un abanico de inquietudes que abarcan desde su futuro vocacional hasta la insatisfacción con su imagen corporal o la mala comunicación familiar.

Comprender sus principales preocupaciones es crucial para brindarles apoyo y acompañamiento en su camino hacia la adultez. ¡Continúa leyendo para conocerlas!

¿Cuáles son las preocupaciones de los adolescentes?

Dado que cada adolescente es único, cada uno de ellos se enfrenta a diferentes inquietudes que lo atormentan al acostarse. Sin embargo, podemos encontrar ciertos puntos en común que parecen repetirse en la mente de jóvenes de entre 13 a 18 años.

Dos psicólogas de la Universidad Católica del Perú realizaron una investigación para dar cuenta de las preocupaciones más comunes de los adolescentes. En el estudio participaron más de 400 jóvenes, quienes compartieron sus mayores desvelos. ¿Quieres conocer qué les preocupa? Te lo contamos a continuación.

1. Cómo les irá en el futuro

El 40.2 % del grupo total de los participantes manifestó que una de sus principales inquietudes tiene que ver con su futuro laboral o profesional. Tener dudas con relación a qué carrera estudiar o qué tipo de empleo buscar produce mucho malestar y sensación de incertidumbre.

Pero también es muy habitual e incluso coherente. ¿Quién podría imaginar que a los 17 años una persona debe tener claro a qué quiere dedicarse? Esta es una situación que podría desencadenar ansiedad y estrés en los adolescentes.

Algo que me preocupa es qué va a ser de mí en el futuro. Aún no decido qué carrera estudiar; me gustan varias y no sé decidirme. A veces me siento mal al saber que otras personas de mi edad ya están decididas acerca de su futuro.

Más allá de esto, a algunos adolescentes también les preocupa que su elección sea errada o que obstaculice sus proyectos económicos o personales. En el mundo actual tan cambiante, es posible entender las preocupaciones de estos jóvenes.

2. Su rendimiento escolar

De acuerdo a la investigación, las calificaciones escolares también representan una fuente de preocupación en los jóvenes. El 17.9 % hizo referencia a esta inquietud. Las dificultades académicas que pueden surgir en la escuela secundaria suelen estar asociadas a problemas de aprendizaje o a aspectos emocionales y psicológicos propios de la adolescencia.

La magnitud e intensidad de los cambios a los que se enfrentan los pueden llevar a presentar inconvenientes al momento de llevar hábitos de estudio que favorezcan el desempeño académico.

A su vez, el miedo al fracaso, la competencia y la necesidad de cumplir con las expectativas familiares, pueden generar ansiedad relacionada con el rendimiento escolar. 

3. Que sus padres limiten su libertad

Las dificultades en la comunicación con sus padres afecta la conquista de su libertad. Con relación a esto, un ensayo llevado a cabo por psicólogos españoles reveló lo que ya sabemos: los adolescentes tienden a buscar mayor autonomía, aunque los padres pueden percibir el ritmo de madurez de sus hijos de una forma distinta. Asunto que genera discusiones y frustraciones.

4. Ser excluido del grupo social

Las preocupaciones sociales aparecen en los adolescentes con gran intensidad. La identidad está marcada por el grupo de pertenencia, por lo que perderlo puede ser muy desestabilizador para un adolescente.

El miedo a ser rechazado y el temor a quedarse solo, se vive con mucha angustia y agobio. Pocas cosas generan tanto malestar para un adolescente como sentir que no encaja o que sus pares no los aceptan o valoran. A su vez, problemas de salud mental, como depresión o ansiedad, afectan de forma considerable a los jóvenes e interfieren en las diferentes áreas de su vida.

5. No sentirse a gusto consigo mismos

La insatisfacción corporal o de autoimagen son más que habituales en este momento. Al estar atravesando un período de profundos cambios psicológicos y físicos, es común que transiten cierta sensación de extrañeza o malestar con su propio ser.

El espejo representa una amenaza que se suma a las exigencias sociales y, a menudo, dan como resultado una autoestima golpeada.

Otro estudio publicado en la Revista Española de Educación Física y Deportes, arroja datos alarmantes: casi el 100 % de los jóvenes entrevistados están insatisfechos, en mayor o menor grado, con su imagen corporal.

6. Tener conflictos con amigos o parejas

Las peleas entre pares pueden preocuparlos. Estas pueden surgir por distintos motivos, como diferencias de opinión, rivalidades o malentendidos. Las disputas entre compañeros son una parte esperable del proceso de crecimiento, ya que están aprendiendo a regular sus emociones.
Además, también les genera estrés la idea de no tener éxito en el amor o no ser deseado. Asimismo, la exploración sexual no transcurre sin una cuota de nerviosismo e inseguridad que se basa en la falta de conocimientos y experiencia. 

Acompañar con empatía

Como vemos, las inquietudes que atormentan a los adolescentes son variadas y significativas. Recordemos que están pasando por una etapa de caos y descubrimiento. Por ende, es esencial que como adultos comprendamos y abordemos sus principales preocupaciones con empatía, escucha y cierta dedicación.

La mejor manera de contribuir con su crecimiento y bienestar integral, es escuchándolos con atención, brindándoles apoyo emocional y orientación para que puedan aclarar sus ideas y fortalecer su identidad. Un acompañamiento guiado por el diálogo, a fin de un entendimiento mutuo.