Las heces con sangre en los bebés representan una importante preocupación para los padres, y lógicamente motivan la consulta a los servicios de urgencias cuando se presentan. Existe una enorme variedad de condiciones de gravedad variable que pueden ocasionar este síntoma, por lo que la consulta con el especialista es fundamental.
De llegar a presentarse, lo más importante es conservar la calma, verificar la situación y decidir cómo buscar ayuda profesional. No en todos los casos representa una emergencia vital, aunque es fundamental contar con la evaluación médica.
Las heces de los bebés y sus características normales
A lo largo del primer año de vida, las heces de los pequeños varían por múltiples factores. Estos cambios pueden ocurrir tanto en la consistencia, como en el color o en la frecuencia.
En general, los recién nacidos eliminan una caca negra y espesa en las primeras horas de vida, llamada meconio. Luego, a medida que se establece la lactancia, las heces se tornan amarillentas y la consistencia es un poco más líquida.
Alrededor del sexto mes, con la introducción de la alimentación complementaria, la consistencia aumenta un poco más y el color de las cacas suele tornarse más oscuro. De todos modos, las características de las deposiciones varían según la dieta del pequeño.
Señales de alarma en las heces de los bebés
A pesar de estas variaciones fisiológicas, los pediatras solemos orientar a los padres acerca de las señales de alarma en las cacas de los bebés. Estas son las siguientes:
- Ausencia de eliminación de meconio durante las primeras 24 horas de vida.
- En un recién nacido alimentado a pecho, deposiciones con frecuencia menor a 1 vez al día durante las primeras semanas.
- Cacas grandes, duras y secas que al bebé le cuesta expulsar.
- Aumento llamativo del número de cacas diarias.
- Presencia de cacas de color blanco-grisáceo, acompañadas de coloración amarillenta de la piel (ictericia).
- Cacas de color rojo o negro, con olor desagradable, fuera del periodo de meconio.
- La presencia de gusanos, moco, sangre o pus.
Heces con sangre en los bebés: ¿qué representan?
Como pauta general, siempre que aparezca sangre en las heces es necesario consultar al pediatra. Esta puede aparecer como estrías delgadas, en forma de gotas o coágulos de mayor tamaño o incluso, como una hemorragia intensa a través del ano del bebé.
Además del aspecto habitual, la sangre puede manifestarse de otras maneras menos comunes en las heces y es necesario conocerlas para no malinterpretar este hallazgo. Según cómo luce el sangrado, se puede inferir el sitio desde donde proviene:
- Heces con sangre roja: suelen indicar un sangrado en la última porción del intestino, e incluso de los órganos cercanos al orificio anal (como la vagina o la piel). Esto se conoce como hematoquecia.
- Heces oscuras, negruzcas y malolientes: adoptan ese color por la digestión de la sangre con el ácido estomacal y suelen indicar un sangrado digestivo alto (desde el esófago hasta el inicio del intestino). Este tipo de sangrado se conoce como melena. Los casos más leves pueden deberse a sangrados del pezón de la madre durante la lactancia.
- Sangre amarronada y abundante, de consistencia gelatinosa: se conoce como hemorragia en jalea de grosellas y representa una condición clínica crítica. Suele indicar una patología a nivel del intestino delgado o de la unión entre el intestino delgado y el colon (invaginación intestinal).
Las 7 causas más frecuentes de sangre en las heces de los bebés
Los sangrados digestivos pueden ocurrir por distintos motivos y estos varían en frecuencia según la edad del niño. A continuación, mencionaremos las causas más comunes de sangre en heces de los bebés:
- Fisura anal: se trata de lesiones de la piel o de la mucosa que rodea el ano, que ocurren como consecuencia del pasaje de heces duras. En general, se manifiestan con estrías de sangre roja y molestias luego de la defecación. En caso de haber iniciado la alimentación complementaria, los pediatras suelen recomendar mayor inclusión de fibra en la dieta y consumo de agua.
- Enfermedad hemorrágica del recién nacido: esta condición se produce por un déficit de vitamina K en los primeros días de vida debido a la inmadurez de la flora intestinal. Este micronutriente es necesario para sintetizar varios factores de la coagulación, por lo que el bebé tendrá cierta tendencia al sangrado, presentando hematoquecia y melenas.
- Alergia o intolerancia a la proteína de la leche de vaca: es una colitis que produce inflamación de las paredes del intestino del bebé tras el contacto con un componente de la leche. Se puede manifestar a partir de un sangrado leve o de mayor cuantía, pero en todos los casos es posible confirmar el diagnóstico por medio de estudios específicos.
- Enterocolitis necrotizante: se trata de una patología potencialmente grave, que afecta a los recién nacidos prematuros. Según una publicación en Medicina Legal de Costa Rica, puede representar entre el 5 y 7 % de ingresos a unidades de cuidados intensivos neonatales. Se manifiesta como melena o hematoquecia.
- Colitis infecciosa: si bien es una causa poco frecuente en los bebés pequeños, las infecciones digestivas suelen ocurrir por la manipulación inadecuada de los alimentos. Algunos de los microorganismos que las producen generan inflamación en las paredes del intestino y dan lugar a rectorragia escasa. Es importante consultar al pediatra porque suele ser necesario recibir terapia de antibióticos.
- Invaginación intestinal: como se mencionó con anterioridad, se produce por la introducción de un segmento intestinal dentro de otro. Es una patología potencialmente grave, que requiere ser evaluada con urgencia. Produce de forma característica una melena en «jalea de grosella».
- Divertículo de Meckel: se trata de un defecto congénito de las paredes intestinales que las vuelve más propensas a los sangrados. En general, se manifiesta en los primeros 2 años de vida, como un sangrado masivo indoloro.
Además, según algunos estudios epidemiológicos, los episodios de sangrado digestivo en los neonatos suelen acompañarse de otros problemas de salud que motivan el ingreso hospitalario y que, además, empeoran el pronóstico. Algunos de ellos son la sepsis y la dificultad respiratoria.
¿Las heces de color rojizo siempre tienen sangre?
Llegado a este punto, es importante hacer una aclaratoria. Al igual que lo que ocurre con los adultos, las heces pueden teñirse de color rojo debido a cambios en la alimentación o medicamentos, como ocurre en los siguientes casos:
- Al consumir tomates, remolachas o gelatinas luego de haber iniciado la alimentación complementaria.
- Bebidas azucaradas para niños con colorantes o sabores artificiales.
- Fármacos como la amoxicilina (usualmente usada en infecciones respiratorias) y cefdinir.
Descubre más:: Señales del bebé para llamar al pediatra inmediatamente
¿Cuándo hay que acudir a urgencias?
Cuando se detecta sangre en las heces es necesario consultar al pediatra de cabecera. No obstante, esto no siempre representa una urgencia o un riesgo de vida.
Por este motivo, es importante conocer ante qué signos o síntomas concurrir a la central de emergencias, cuando se sospecha un sangrado intestinal. Algunos de los síntomas que indica la clínica Mayo son los siguientes:
- Las heces permanecen negras aún varios días de su nacimiento.
- Las heces se vuelven de color blanco.
- Niño en regular estado general (decaído, con tendencia al sueño, agitado).
- Sangrados abundantes o reiterados en el pañal.
- Vómitos con sangre u oscuros.
- Palidez en la piel o las mucosas (de los ojos o la boca).
- Dolor abdominal intenso.
- Irritabilidad, que a veces se intercala con períodos de somnolencia (sensorio alternante).
- Rechazo al alimento o dificultades para hidratarse.
Las heces con sangre en los bebés deben tomarse en serio
En definitiva, las causas de este tipo de sangrados son bastante variadas. Por fortuna, en la mayoría de los casos solo habrá que tomar algunas previsiones, lo que no quita el hecho de acudir al especialista ante cualquier duda.
Bibliografía
Todas las fuentes citadas fueron revisadas a profundidad por nuestro equipo, para asegurar su calidad, confiabilidad, vigencia y validez. La bibliografía de este artículo fue considerada confiable y de precisión académica o científica.
- Asociación Española de Pediatría (2023). Protocolos diagnósticos y terapéuticos en Gastroenterología, Hepatología y Nutrición Pediátrica. Protocolos de la AEP. https://www.aeped.es/sites/default/files/documentos/13-HDB.pdf.
- Bonilla, E., Ramírez, L., Rojas, P., & Zúñiga, B. (2020). Enterocolitis necrotizante. Medicina Legal de Costa Rica, 37(2), 63-70. http://www.scielo.sa.cr/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S1409-00152020000200063&lng=en&tlng=es.
- Kamath, B. K., Mamula, P. (2008). Gastrointestinal bleeding. Pediatric Gastroenterology: The Requisites in Pediatrics. Mosby.
- Pai, A. K., Fox, V. L. (2017). Gastrointestinal Bleeding and Management. Pediatr Clin North Am, 64(3), 543-561. https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/28502437/.
- Ramos, J., Camarero, C. ()
- Schmitt, B. Symptomviewer: Taburetes - Color Inusual. Consultado el 17 de mayo de 2023. https://www.healthychildren.org/English/tips-tools/symptom-checker/Pages/symptomviewer.aspx?symptom=Stools%20-%20Unusual%20Color.
- Storch, P. Cacas de los bebés. Consultado el 17 de mayo de 2023. https://enfamilia.aeped.es/edades-etapas/cacas-bebes.
- Mayo Clinic. (2022). I'm breastfeeding my newborn and my baby's bowel movements are yellow and mushy. Is this normal for baby poop?. Consultado el 23 de mayo de 2023. https://www.mayoclinic.org/es-es/healthy-lifestyle/infant-and-toddler-health/expert-answers/baby-poop/faq-20057971