5 diferencias entre una guardería y una escuela infantil

Llega la hora de dejar a tu hijo porque debes comenzar a ir al trabajo y no te decides, si en una guardería o en una escuela infantil. Encuentra aquí 5 pautas para elegir la mejor opción.

Revisado y aprobado por la psicóloga María Alejandra Castro Arbeláez.

Escrito por Equipo Editorial

Última actualización: 12 septiembre, 2022

Estás pensando en llevar a tu hijo a un centro infantil. Tienes que volver al trabajo después de la baja maternal o simplemente crees que sería bueno que tome contacto con otros niños. Es el momento para elegir; conoce aquí las diferencias entre una guardería y una escuela infantil.

Lo primero es que el término “guardería” ha quedado obsoleto en muchos países y la mayoría optó por redefinirse como “escuela o centro de educación infantil”.

En efecto, la guardería se reducía a un lugar donde los niños eran ‘guardados’ mientras los padres trabajaban. Sin embargo, la escuela infantil adopta un proyecto educativo determinado y cuenta con personal calificado. Además sigue todas las normas del organismo competente para garantizar la seguridad de los niños de 0 a 3 años.

La escuela infantil ideal

Determinar cuál es la escuela más adecuada para nuestros hijos suele convertirse en todo un dilema para los padres. Te vamos a explicar cinco pautas básicas para distinguir las diferencias entre una guardería y una escuela infantil, las cuales te ayudarán a elegir la mejor para tu hijo.

1. Es amplia y segura

En una escuela infantil las aulas deben ser amplias y estar bien iluminadas mediante luz natural. También han de estar provistas de luz artificial por si se necesita. Todo el mobiliario y los materiales con los que trabajen han de estar homologados y preparados para los niños. Por ejemplo mesas, sillas, cambiadores, menaje, suelo, columnas, lápices…

Hay que evitar cualquier tipo de peligro. Se deben seguir las normas de seguridad vigentes para niños tan pequeños en este tipo de centros educativos.

Por ejemplo las escaleras tienen que tener barandilla, las puertas tienen que ser de seguridad… Muy importante es que los productos de limpieza deben estar lejos del alcance de los niños. A partir de los dos años el centro debe tener baños adaptados a las medidas de los niños.

2. Posee un proyecto educativo

Una escuela infantil de 0 y 3 años, debe tener como mínimo un Maestro de Educación infantil titulado, responsable del proyecto educativo de centro. También debe tener un Técnico de Educación infantil por aula. Además tiene que seguir unas normas específicas como tener un patio superior a 75 metros cuadrados, unas aulas luminosas y espaciosas… Es importante que tenga un plan de emergencia y evacuación.

3. Cada salón tiene el número adecuado de niños

El número de niños por educador debe cumplir la normativa vigente en su comunidad autónoma o país. Por ejemplo, el aula para niños hasta 1 año puede tener en muchas comunidades como máximo 8. El aula de 1 a 2 años suele tener 13 niños como máximo.

4. Tiene una línea educativa

Cada guardería o escuela infantil tiene que tener una línea educativa. Nos tenemos que informar cuando nos interesemos por el centro. En esta etapa los niños desarrollan muchas capacidades. Conozcamos qué actividades de aprendizaje van a realizar.

Es bueno también saber si tienen profesores de inglés o del idioma que queramos que aprendan. A esas edades son verdaderas esponjas y puede repercutir de manera positiva en su futuro.

5. Queda cerca de la casa o del trabajo

Otro tema decisivo cuando vamos a elegir el centro educativo es que no se encuentre muy lejos de nuestra casa o del trabajo. Evitaremos a nuestros hijos pequeños los trayectos muy largos en coche o en autobús.

Otro detalle importante para la salud de los niños es si la escuela hace su propia comida o si encargan un catering. También cómo organizan la hora de la siesta. Tenemos que preguntar si duermen todos juntos en colchonetas y cuántos educadores los cuidan durante la siesta. También qué ocurre si nuestro hijo no puede dormir.

Una buena elección

Muchos países no reconocen los centros que no tienen un proyecto definido o que no están sujetos a la normativa. Nuestro consejo es que antes de matricular a tu hijo en ningún centro vayas al mismo. Puedes entrevistarte con los profesionales que lo dirigen. Intenta que te enseñen todas las instalaciones. Tienes que pedir que te expliquen su funcionamiento y proyecto educativo.

No te quedes con ninguna duda. Pregunta todo lo que consideres necesario para estar segura de que estás haciendo la elección adecuada. Una buena idea es que preguntes a las madres que llevan a su hijo a ese centro. Te será de mucha ayuda la opinión que manejan.

En la mayoría de los casos la elección del centro infantil adecuado para tu hijo será personal. Dependerá de una valoración conjunta de las sensaciones que te haya dado el centro. Puede resultar decisivo el trato que veas del personal a los niños y en general si logras constatar la calidad de su funcionamiento.

¿Qué es un proyecto educativo?

Como existen diferencias entre guardería y escuela infantil, y en muchos casos resultan determinantes a la hora de tomar una decisión, definamos qué es el proyecto educativo.

Se trata de un documento de carácter programático en el que se exponen los objetivos comunes y los principios educativos, organizativos y normativos que mueven a la Comunidad Escolar. Será considerado como un proyecto matriz, contentivo de los lineamientos a partir de los cuales se elaboran los diversos proyectos que le dan vida a la escuela.

Organiza y orienta los esfuerzos de todos los miembros de la institución en función de objetivos comunes. En ese sentido, le confiere identidad ante la comunidad del entorno y las otras instituciones.

Es un instrumento político y técnico, que facilita la gestión y la administración, además de dictar las pautas para la participación y el desarrollo de todos los actores, en función del crecimiento orgánico de la escuela.

Como enumera Isabel Cantón cuando habla de la organización educativa, el proyecto:

• Proporciona canales para la participación y la colaboración.
• Limita la autoridad y da líneas de comunicación.
• Asigna el poder y la responsabilidad.
• Establece un patrón de relaciones.
• Vincula de manera estable a todos los miembros de la organización.

La idea con el proyecto educativo es cumplir el efecto sinérgico según el cual el resultado coordinado del hacer de todos es mayor que la acción de cada uno por separado.

Qué le ofrece al niño un centro de educación infantil

La brindará la oportunidad de aprender, desarrollarse, relacionarse con sus iguales, y vivir experiencias cada vez más difíciles de lograr en casa. Esto sobre todo, porque las familias extensas de antes han cedido a las familias nucleares de muy pocos miembros.

Pese a ello, los padres debemos lograr que el medio familiar sea lo suficientemente ríco para participar en el pleno desarrollo de los niños y organizar el tiempo para lograr una crianza satisfactoria.

Por otro lado, y muy importante, la escuela infantil será un lugar de juego, para relacionarse con los demás niños, con experiencias especialmente di señadas para responder a sus necesidades.