Fisioterapia infantil para prevenir problemas posturales

La fisioterapia infantil resulta esencial en cada etapa para prevenir problemas posturales. Es un área específica orientada al pequeño desde que nace hasta culminar la adolescencia.

La fisioterapia cuenta con múltiples campos de trabajo dentro de las ciencias médicas. Desde la prevención y promoción de la salud, hasta el tratamiento y rehabilitación de innumerables dolencias. Además, se aborda al ser humano en todas las etapas de la vida.

A lo largo de las últimas décadas, los especialistas en fisioterapia pediátrica han ido enriqueciendo su labor. Así, han ejercido la actividad con equipos multidisciplinarios dentro del sistema de salud. Esto, además de influir positivamente en las distintas profesiones, brinda grandes beneficios en la atención integral del niño.

Dentro de la fisioterapia infantil, las especialidades más conocidas son las que tratan afecciones neurológicas y respiratorias. Sin embargo, en los últimos tiempos ha ido evolucionando la fisioterapia del desarrollo. Se desempeña tanto con otros profesionales de la salud, como con los educadores.

Fisioterapia desde la infancia

Entre los controles de los primeros años de vida, es fundamental incluir una cita con un fisioterapeuta. En estos controles se evalúa de manera integral al infante. En el caso de alguna alteración, se realiza el diagnóstico de forma temprana.
Un diagnóstico realizado a tiempo le brinda al niño mayores probabilidades de lograr una recuperación desde que inicia el tratamiento. Asimismo, promete beneficios importantes a largo plazo. Las distintas etapas del crecimiento suceden a gran velocidad. La fisioterapia infantil está orientada a acompañar esos cambios para prevenir problemas posturales, entre otras alteraciones.

¿Qué papel tiene el fisioterapeuta?

El rol del fisioterapeuta durante infancia abarca múltiples acciones. Dentro de la promoción de la salud y la prevención de la enfermedad, evalúa, educa y conciencia. Además, realiza un diagnóstico precoz, en el caso de presentar alguna dolencia.

En conjunto con los familiares y maestros, educan sobre los correctos cuidados del propio cuerpo. El objetivo es evitar que posibles lesiones o alteraciones puedan repercutir después en la adquisición de su habilidades. Por ello, influirá en las distintas etapas de la vida.

Desde la rehabilitación, trata y acompaña al infante a recuperar el estado de salud. Para esto, programa y diseña ejercicios adaptados individualmente. Además, utiliza métodos y técnicas de la fisioterapia dentro del tratamiento. En una fase más avanzada, ofrece seguimiento y supervisión en las indicaciones para el hogar y la vida diaria.

¿Cómo se producen los problemas posturales?

Los problemas posturales que se pueden prevenir con la fisioterapia infantil suceden por varios motivos. La gran mayoría son idiopáticos, es decir, que no se conoce su causa. Aunque muchas veces es posible determinar cuáles son los factores que influyen directamente. Otros causas suelen ser congénitas, es decir, que se producen en la etapa prenatal. Estos casos pueden ser hereditarios o no.

También existen los motivos traumáticos, ya sea desde el nacimiento, en el canal de parto, así como por alguna lesión traumatológica por golpes o caídas, que desencadenen una fractura o esguince, por ejemplo.

Las actitudes corporales desalineadas sostenidas en las diferentes fases del crecimiento suelen ser también un factor desencadenante de problemas posturales en la infancia.

Fisioterapia y problemas posturales en la infancia

En un principio, el fisioterapeuta establece los objetivos del abordaje con el infante y sus padres. Al diseñar el programa preventivo o de tratamiento, se evaluará la motivación del niño, además de las aspiraciones de los cuidadores, el contexto familiar y escolar. El propósito es prevenir, recuperar y readaptar, según se necesite en cada caso.

Lo que sucede desde los primeros momentos de vida del niño y la forma en la que evoluciona su sistema nervioso determinará su manera de desarrollarse. A esto se le suma la historia de vida de cada uno y las condiciones ambientales que influyen directamente en cada uno.

La fisioterapia infantil trata los problemas posturales más frecuentes. Entre ellos podemos nombrar las cifosis, escoliosis, hiperlordosis, y pie plano. Tanto estos, como el resto de las alteraciones o enfermedades, tienen mejor pronóstico cuando son diagnosticadas de forma precoz.

Los tratamientos más actuales incluyen ejercicios físicos de flexibilidad y fortalecimiento. Ademas, técnicas manuales específicas y, en algunos casos, el uso de agentes físicos.

Posturas y ejercicios para ayudar a los hijos desde casa

Es fundamental el rol de la familia para incluir hábitos saludables en la vida cotidiana. Además de impulsar al pequeño a realizar actividades deportivas que sean de su agrado. Es importante observar que mantenga una postura alineada. Así como también realizar ejercicios desde el hogar para favorecer la flexibilidad en el desarrollo muscular del niño. Entre ellos están los siguientes:

• Sentarse bien en la silla: el asiento debe ser cómodo y permitir una posición recta, con la parte baja de la espalda apoyada. Los muslos deben ir paralelos al suelo y los pies apoyados en el suelo.
• Andar descalzo: favorece el desarrollo de músculos y ligamentos que sostienen el arco del pie.
• Dibujar con los pies: al igual que el ejercicio anterior, estimula los músculos de los pies.
• Estiramientos frente al espejo: buscando alargar los músculos, enfocando la atención en mejorar la conciencia corporal.

Recomendaciones para evitar problemas posturales

Se debe evitar la exposición frente a las pantallas por periodos prolongados. Así como evitar pasar mucho tiempo en una misma posición, sin moverse. Es recomendable ofrecer variedad de actividades recreativas, buscando las de mayor interés del niño.

Los deportes deben seleccionarse como un modo de entretenimiento, sin sobreexigir las habilidades naturales. Puede resultar contraproducente en la salud integral del menor que realice un deporte competitivo en edad de desarrollo sin los cuidados pertinentes.

Durante la etapa escolar, hay que prestar especial atención a su actitud postural al momento de ubicarse en el pupitre. Además de no cargar peso excesivo en sus mochilas, lo que dañaría su columna vertebral con el paso del tiempo. El peso de la mochila no debe superar el 10 % del peso corporal del alumno.

Por lo tanto, desde la primera infancia es muy importante observar y acompañar al pequeño durante la vida diaria. Además de realizar controles preventivos, como asistir a un centro de fisioterapia infantil para prevenir problemas posturales. Una buena comunicación familiar, sumada a una vida activa, brindará numerosos beneficios al crecimiento del niño.