Diez libros sobre los abuelos

El vínculo con los abuelos es algo único. Una infancia con estos seres que cuidan, consienten y ofrecen los abrazos más dulces es un regalo para toda la vida. Los libros sobre los abuelos presentados en este artículo captan algunos de esos momentos mágicos: sentimientos y sensaciones tan simples como extraordinarias.

Libros sobre abuelos para quererlos más todavía

1. Quiero a mis abuelos, de Claire Freedman

La posibilidad de pasar el día con los abuelos permite zambullirse en un ritmo diferente, en otro tiempo. La compañía de los abuelos enriquece no solo al nieto, sino también al abuelo mismo.

En este libro, la autora refleja en diálogos cercanos y situaciones cotidianas ese amor tan especial. Esta obra es ideal para niños de dos a cuatro años; las ilustraciones acompañan con mucha ternura las 32 páginas del texto.

2. Abuelas de la A a la Z, de Raquel Díaz Reguera

Una taxonomía de las abuelas puede servir para que cada lector ubique a la suya. Las coleccionistas, las arregla cosas, las abuelas modernas y las tacañas; todas conviven en un libro repleto de poesía y cariño.

Claro, también se puede encontrar a las abuelas brujas, que son las mejores. Una vez clasificadas, comenzará el juego.

3. Cosas que me gustan de mis abuelos, de Tracey Moroney

Como parte de una colección para primeros lectores titulada Cosas que me gustan de…, este libro se suma a la idea de que enumerar cosas agradables genera un pensamiento positivo en los niños. El personaje principal enumera con detalle las cosas que le gustan de cada uno de sus abuelos.

4. Mi primer coche rojo, de Peter Schössow

Se trata de otro de los libros sobre los abuelos sugerido para niños pequeños. El abuelo regala al nieto un antiguo coche rojo a pedales; para que el primer paseo sea emocionante, el conductor debe estar al tanto de las normas de convivencia y tránsito.

5. Manolito con gafas, de Elvira Lindo

Este clásico cuento infantil es relatado por un niño sarcástico, que juega diariamente con sus amigos. Sin embargo, el más amigo, en las buenas y en las malas, es su ‘abu’, Nicolás. No hay cosa que Nicolás no esté dispuesto a emprender con tal de hacer feliz a su nieto.

6. ¡¡¡Abuelaaa!!!, de Carles Cano y Paco Giménez

Dentro de esta selección de libros sobre los abuelos, se encuentra esta historia, en la que lo fantástico irrumpe en lo cotidiano. ¿Quién si no la abuelita es la que prepara una sorpresa de cuentos de hadas a su nieta? Algo es seguro: el miedo de la noche quedará en el olvido.

“El amor perfecto a veces no llega hasta el primer nieto”
—Proverbio galés anónimo—

7. La abuela de Olivia se ha perdido, de Elvira Lindo

¿Dónde está la abuela? En vez de ser los niños quienes se pierden en el supermercado, en este cuento es la abuela quien no aparece. Olivia no se impacienta más de la cuenta; sabe muy bien qué hacer en estos casos: usar los altavoces. ¿Cómo terminará esta divertida historia?

8. El jardín del abuelo, de Lane Smith

Repleto de metáforas maravillosas sobre la vida, los recuerdos, las tradiciones y el paso del tiempo, este cuento emocionará a grandes y niños. El abuelo, en otro tiempo artista, se dedica más tarde al arte topiario. El hecho de dar forma a los arbustos es para él como dar forma a los recuerdos.

9. Las gafas del abuelo, de Roberto Aliaga Sánchez

¿Qué nieto no intentó descifrar la mirada del abuelo tras esos gruesos cristales que aumentan con la edad? En este libro, las gafas no son unas simples gafas: son unas gafas maravillosas que le dan colores nuevos a todo lo que observan.

10. Mejillas rojas, de Heinz Janisch

Un abuelo que cuenta historias maravillosas es el motor para conocer dibujos, colores y personajes increíbles. Sentado en su reposera, el abuelo transporta a su nieto a los paisajes más bellos que puedan imaginarse. Este relato se recomienda a partir de los seis años.

Cada uno de estos libros sobre los abuelos rescata las tradiciones más bellas que se van heredando generación tras generación. Sin dudas, esta colección de títulos maravillosos puede inspirar a más de un padre, alegrar a más de un hijo y dar calor a más de un abuelo. Un homenaje, una metáfora y mucho cariño.