La celiaquía es una condición de salud en la que el intestino se inflama cuando se libera el gluten del trigo y otros cereales, lo cual produce malabsorción de nutrientes. Por cada hombre hay 4 mujeres celíacas. Hasta ahora, el mejor tratamiento es omitir los alimentos con gluten, pero no es tarea fácil. Por eso, en este artículo te presentamos los alimentos sustitutos del trigo para la embarazada celíaca que mejorarán su absorción intestinal.
Recuerda que si eres embarazada celíaca, debes mantenerte en control con tu obstetra y el nutricionista, quién te acompañará en la dieta.
¿Qué es el gluten y donde se encuentra?
El gluten es la principal proteína del trigo, ya que representa entre el 80 y el 90 % del total proteico. Es la que permite que la masa del trigo, al fermentarse, se levante cuando atrapa aire y sea pegajosa y extensible.
El gluten está formado por glutaminas y prolina, las cuales tienen la particularidad de que no se digieren de manera completa. Así, algunas proteínas pequeñas quedan en el intestino y provocan una reacción inmune en los celíacos. Además, la cebada y el centeno, también la contienen. Con respecto a la avena, se considera libre de gluten. Sin embargo, contiene avenina, que es de menor toxicidad, pero a la cual también reaccionan los celíacos.
La embarazada celíaca, al igual que otras personas con esta condición, debe descartar por completo el uso del trigo, la cebada, el centeno y la avena. En su lugar, tendrá que buscar alternativas sin gluten, que ofrezcan propiedades nutricionales, sensoriales y energéticas para cubrir todas las necesidades nutricionales.
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Alimentos sustitutos del trigo para la embarazada celíaca
El trigo y sus derivados son de los cereales más utilizados en la panificación y en la repostería. En el caso de la embarazada celíaca, al sustituir los cereales con gluten por otros alimentos, estos deben cumplir con una serie de pautas:
- Mantener un consumo de carbohidratos simples y complejos como fuente de energía.
- Aportar suficiente fibra para evitar el estreñimiento.
- Ser fuente de vitaminas del complejo B, ácido fólico, vitamina A y los antioxidantes propios de los vegetales.
- Aportar buenas cantidades de calcio, hierro, zinc y magnesio.
A continuación, mencionamos algunos de estos sustitutos del trigo para la embarazada celíaca que se pueden usar frescos o en harinas.
Quinoa y amaranto
La quinoa y el amaranto pueden comerse cocidos como granos enteros o en forma de harinas. Sindhu y Khatkar, en su capítulo más reciente, publicaron que ambos son pseudocereales fuentes de almidón y fibra. A diferencia del trigo, sus proteínas si contienen lisina, metionina y triptófano.
Estos alimentos también aportan vitaminas del complejo B y E, calcio, fósforo, magnesio y potasio. Sus harinas son más antioxidantes que las del trigo, la papa, el arroz y el maíz, según lo refiere el sitio Live Science, en 2018. Además, sus compuestos bioactivos son la betalaína, los fitosteroles y los compuestos fenólicos.
Harina de frutos secos
Los frutos secos transportan a la embarazada celíaca muchos nutrientes para el buen crecimiento y desarrollo del bebé. De acuerdo con la Fundación Española de Nutrición, tienen un 20 % de proteínas, casi el doble de lo contenido en el trigo. Por su parte, la fibra se encuentra en altas cantidades, con predominio de la insoluble, que evita el estreñimiento.
Las harinas de frutos secos también contienen ácidos grasos omega-3, como el alfa linolénico (ALA), el cual se considera un precursor del ácido graso docosahexaenoico o DHA. La Asociación Española de Pediatría lo promueve como un tipo de grasa que estimula el desarrollo visual y cerebral del bebé hasta los primeros años de vida.
Por otra parte, el calcio, el fósforo, el potasio, el hierro, el magnesio y el selenio, se encuentran en buena proporción. De igual forma, están presentes la niacina, los folatos, la vitamina E y el complejo B.
Harinas de legumbres
Las legumbres, como el garbanzo, la soja, las habas o las lentejas, aportan valores de proteínas similares a los de la carne. Incluso, la soja puede duplicar este valor cuando está cruda, ya que contiene alrededor del 40 %. Por su parte, los carbohidratos oscilan entre el 40 y el 60 %, de los cuales la mayor parte es almidón digerible. También, predomina la fibra dietética y el almidón resistente (AR), el cual actúa como un tipo de fibra soluble.
Otros nutrientes destacables son el potasio, el fósforo, el hierro y el magnesio. Las vitaminas más importantes son las del complejo B y el ácido fólico. Sin embargo, la presencia de algunos antinutrientes impiden la absorción de los minerales. Por fortuna, tal como lo señala la revista ALAN, estos son reducidos con las altas temperaturas de cocción, el remojo, la germinación y la fermentación de las legumbres.
Harina de maíz
El maíz, al igual que otros cereales, representa una fuente importante de energía por la presencia de almidón. Su cantidad de proteínas está un poco por debajo del trigo, pero es de alta digestibilidad, tal como se revela en la revista Cereal Chemistry. Sin embargo, la calidad nutricional de la proteína puede ser compensada al mezclarla con ingredientes de origen animal, como la leche, los huevos y sus derivados.
La harina de maíz entero también aporta fibra insoluble, vitamina A, E, tiamina y piridoxina. Por otra parte, la revista Journal of Agricultural and Food Chemistry, menciona algunos compuestos antioxidantes en la harina de maíz, como el ácido ferúlico. Las variedades de maíces azules, morados y rojos contienen otros antioxidantes con beneficios para la salud, como las antocianinas.
Arroz
El arroz contiene suficiente almidón como fuente de calorías, proteínas de mediano valor biológico y vitaminas del complejo B. Por su parte, el arroz integral es el más recomendado en las embarazadas para aumentar el consumo de fibra y evitar el estreñimiento. Según la Fundación Española de Nutrición, este tipo de arroz conserva más los minerales y las vitaminas, que el arroz pulido.
Otras harinas sustitutas del trigo
Otras harinas alternativas al trigo también se usan como parte del tratamiento de la celiaquía. Estas son harinas de mijo, papa, batata, tapioca, fécula de maíz, almidón de papa, harina de trigo sarraceno y de sorgo. Las de calabaza y zanahoria son harinas dulces de buen uso en la repostería. Estos también son alimentos sustitutos del trigo para la embarazada celíaca.
Consejos para un mejor uso de los sustitutos del trigo
La ausencia de gluten en los sustitutos del trigo causa algunos problemas culinarios en las preparaciones. Por eso, te dejamos algunos consejos que mejoran las propiedades sensoriales de las recetas:
- Combina las diferentes harinas: para adquirir una mejor textura de los productos, mezcla las harinas en las proporciones de tu preferencia. Por ejemplo, 60 % harinas integrales y 40 % las refinadas o almidones. Una buena opción es hacerlo a 50 y 50.
- Adicionar fibra y mejoradores de textura: la Asociación de Celíacos de Granada recomienda adicionar fibra a las harinas refinadas en una proporción máxima del 2 %. Así como de los llamados hidrocoloides naturales, como la goma xantana, la goma guar o las pectinas, entre otros.
Una dieta saludable y libre de gluten es fundamental
El tratamiento de la embarazada celíaca debe ser orientado y supervisado por el médico obstetra tratante y por el especialista en nutrición. Este debe recibir todos los nutrientes necesarios para la mamá y el bebé a través de una dieta saludable, balanceada y equilibrada en energía. Los suplementos de hierro, folatos, calcio y yodo serán suministrados de acuerdo con la indicación médica.
Bibliografía
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