Dieta para embarazadas con intolerancia al gluten

Una embarazada con intolerancia al gluten debe enfocarse en su dieta para darle la mayor cantidad de nutrientes al bebé. Te contamos cómo debe ser su alimentación.
Dieta para embarazadas con intolerancia al gluten
María Patricia Piñero

Escrito y verificado por la nutricionista María Patricia Piñero.

Última actualización: 22 mayo, 2023

Si estás embarazada y eres intolerante al gluten, no te preocupes, más bien ocúpate de la dieta y de las indicaciones de tu médico. Si este es tu caso, tu alimentación debe ser balanceada, equilibrada y saludable, pero debes cuidar que los extras de energía y nutrientes sean los adecuados. Sigue leyendo para conocer más al respecto.

¿De qué se trata la intolerancia al gluten?

Seguro que ya debes haberte hecho muchas preguntas en relación con tu embarazo y condición de intolerante al gluten. ¿Se pondrá en riesgo la vida del bebé? ¿Tendré carencias importantes? ¿Podré amamantarlo? La buena noticia es que con la dieta adecuada, estas angustias pueden ser superadas.

De acuerdo con la revista Nutrients, la intolerancia al gluten se refiere a ciertas condiciones en las que la proteína de algunos cerealesprovoca una serie de reacciones adversas que pueden dañar el sistema digestivo y alterar otros órganos de la embarazada. La enfermedad celíaca, la sensibilidad al gluten no celíaco y la alergia al trigo, forman parte de este trastorno. Algunos de los síntomas son los siguientes:

  • Diarrea y estreñimiento.
  • Dolor de estómago y de cabeza.
  • Fatiga.
  • Anemia por deficiencia de hierro.
  • Perdida inexplicable de peso.
  • Trastornos tiroideos.
  • Dolores articulares y musculares.
  • Depresión y ansiedad.

¿Qué es el gluten?

El gluten es el nombre general por el que se conocen una serie de proteínas llamadas prolaminas, que están presentes en algunos cereales. Principalmente en el trigo, pero también en el centeno, la cebada y la avena. Es la sustancia de la harina que aporta estructura a la masa y permite que se eleve junto con la levadura.

En condiciones normales, esta proteína es algo difícil de digerir y se complica aún más cuando hay intolerancia. A partir de ella, se forman unos péptidos o proteínas más pequeñas que son tóxicas para el organismo. Varias organizaciones que atienden la intolerancia al gluten, señalan que el trastorno se acompaña con un problema de malabsorción intestinal y que a la larga puede provocar deficiencias nutricionales.



Dieta para embarazadas con intolerancia al gluten

La dieta para embarazadas con intolerancia al gluten debe ser equilibrada, variada y balanceada. Obviamente, hay que eliminar por completo la proteína que no se tolera: el gluten. También, se debe tener presente el principio de no comer por dos, sino para dos. Lo puntual es asegurar que los nutrientes que se pueden afectar con la malabsorción intestinal (hierro, fólico y yodo) deben mantener un buen aporte a partir de los alimentos y los suplementos.

Para tranquilizarte, la dieta sin gluten no tienen ningún efecto negativo sobre el crecimiento y desarrollo del bebé en el vientre materno. Tampoco hay evidencias de que afecte la composición química de la leche materna. En este sentido, un estudio poblacional mostrado en la revista Human Reproduction, sostiene que el peso al nacer y la proporción de partos prematuros en embarazadas con dieta libre de gluten, fueron similares a aquellas sin intolerancia.

Las frutas deben estar presentes en la alimentación de la embarazada con intolerancia al gluten. En caso de vegetarianismo, se deben combinar los vegetales con frutas fuente de vitamina C.

Objetivos de la dieta para la embarazada con intolerancia al gluten

Lo primero es plantear los objetivos dietéticos en función del estado general de la embarazada con intolerancia al gluten. A saber:

  • Si tiene síntomas, hay que mejorarla y revertir el daño de las paredes intestinales para favorecer la absorción de nutrientes.
  • En caso de diarreas, se indican los alimentos sin gluten más astringentes, como el arroz, la manzana, la pera y el plátano verde. Además, se vigilan los líquidos para evitar deshidratación.
  • Cuando aparece el estreñimiento, hay que indicar los alimentos sin gluten altos en fibra soluble e insoluble y recomendar tomar suficientes líquidos.
  • Al diagnosticar deficiencia de algunos minerales como el hierro, hay que reponerlo de inmediato. Para ello, se indican alimentos que son fuentes de hierro de buena absorción, como las carnes, las aves y los pescados, así como suplementos.
  • En el caso del vegetarianismo, el hierro de origen vegetal debe combinarse con frutas que sean fuente de vitamina C, como la guayaba, las fresas o el kiwi, entre otras.
  • Mantener comunicación directa entre el equipo de salud para evaluar deficiencias potenciales de otros micronutrientes, la suplementación potencial y mantener una dieta saludable y variada. Algunas sociedades, como el Gluten Intolerance Group, insiste en vigilar de cerca el zinc, las vitaminas D y B12, y otras del complejo B.
  • Los suplementos deben ser indicados por el obstetra tratante. Si no hay deficiencia, igual hay que suplementar el embarazo con 30 miligramos de hierro al día, de 0,4 a 0,8 miligramos de folatos y 150 microgramos al día de yodo.

¿Qué alimentos contienen gluten?

Algunos de los alimentos con gluten son los siguientes:

  • Trigo.
  • Semolina.
  • Centeno.
  • Cebada, extracto y malta de cebada.
  • Cuscús.
  • Bulgur.
  • Durum.
  • Panko o especie de pan rallado en japonés.
  • Udon, que es un fideo grueso de origen asiático.
  • Harina Graham y de matzo.
  • Seitan y triticale.
  • Avena y almidón de avena, ya que se puede contaminar con cereales que contienen gluten.

Ningún alimento como pasteles, empanadas, pastas, bollería o panadería, elaborado con cualquier harina de la lista, puede ser ingerido por la embarazada con intolerancia al gluten.

 Otros que pueden contener gluten

En realidad, son muchos los productos alimenticios que contienen gluten, ya que se usa como un aditivo. Por esta razón, es estrictamente necesario revisar las etiquetas de los alimentos en el mercado. Algunos de ellos pueden ser los siguientes:

  • Jarabe de arroz integral.
  • Mezclas para sazonar.
  • Fiambres y otros embutidos.
  • Golosinas.
  • Caldos y pastas.
  • Salsa de soja, sucedáneos de tocino y mariscos.
  • Bases de sopas, rellenos, adobos y espesantes.
  • Suplementos a base de hierbas y de vitaminas y minerales.


El arroz, el maíz, la quinoa y las harinas de frutos secos, entre otros, se pueden incluir en la dieta de la embarazada con intolerancia al gluten como sustitutos del trigo.

Qué sustitutos del trigo se pueden incluir en la dieta

En esta lista se encuentran algunos sustitutos que puedes tener en cuenta:

  • Quinoa y amaranto.
  • Arroz y su salvado.
  • Maíz.
  • Harinas de frutos secos y semillas.
  • Mijo.
  • Harina y almidón de papa.
  • Soja.
  • Tapioca.
  • Sorgo.
  • Arruruz.
  • Trigo sarraceno.

Otros alimentos sin gluten

Estos alimentos pueden ser consumidos sin inconvenientes en la dieta de la mujer embarazada, ya que no contienen gluten:

  • Frutas, verduras y hortalizas frescas.
  • Carnes, pescados y aves frescas.
  • Grasas y aceites.
  • Hierbas naturales, condimentos y especias.
  • Miel, jarabe de arce, jarabe de maíz y melaza.
  • Mermeladas y compotas.
  • Salsa de tomate, mostaza, encurtidos y salsas para ensalada (revisa las etiquetas).

Una recomendación final

Para la dieta de la embarazada con intolerancia al gluten, además de excluir los alimentos que contienen esta proteína, se debe cuidar la contaminación con ella. Por eso, trata de que los alimentos envasados sean de uso exclusivo y que los equipos y utensilios de cocina se limpien cuidadosamente. De esa manera, se evita la contaminación cruzada con otros comestibles que lo contienen.

No olvides que el nutricionista es el personal ideal y calificado para orientar tu dieta. De todas formas, esto es una guía de selección que apoyará las recomendaciones del profesional.


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Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.