3 recetas con queso para el primer trimestre del embarazo
El queso es uno de los alimentos más comunes que se incluyen en la dieta. No obstante, para las mujeres embarazadas conseguir una alimentación adecuada para esta etapa se vuelve algo fundamental. En ello pueden ayudar las recetas con queso para el primer trimestre del embarazo.
Una buena nutrición va a influir de forma directa sobre el desarrollo del bebé y la salud de la madre. A eso se debe la preocupación de muchas mujeres por lo que pueden o no comer durante esta importante etapa de sus vidas.
En estos casos, las recetas con queso para el primer trimestre de embarazo son una alternativa a la que se recurre con frecuencia. El queso puede ser un alimento muy cuestionado por lo que es necesario saber cómo se puede introducir de forma saludable.
El queso, sus valores nutricionales y su papel en el embarazo
En los últimos años algunos alimentos como el huevo o los quesos han sido muy cuestionados por la presencia de colesterol y grasas saturadas en su composición. Sin embargo a día de hoy los consejos alimentarios se suavizan, se valora más su aporte nutritivo y se prefiere hacer recomendaciones para un consumo saludable en lugar de prohibirlos.
El queso es un derivado lácteo que se elabora a partir de la maduración de la leche cuajada (una vez eliminado el suero). Sus diferentes variedades dependerán del tipo de leche empleada, la madurez alcanzada o los métodos de producción elegidos.
En general se puede considerar el queso como un alimento entero o poco procesado. Su perfil nutricional destaca por el aporte de grasas, proteínas, vitamina B12, calcio, fósforo o zinc.
El porcentaje de estos nutrientes va a ser algo diferente según la cantidad final de agua que contenga el producto elegido. Las opciones más frescas suelen contener menos nutrientes aunque siguen siendo excelentes opciones para introducir en el día a día.
En el embarazo la introducción del queso puede ayudar a completar el aporte de energía y algunos nutrientes importantes. Asimismo su versatilidad en la cocina y su introducción en algunas recetas aumenta la variedad y el sabor de los platos.
Consideraciones sobre el queso en el embarazo
La mayoría de quesos son una opción recomendable en el embarazo, siempre que se incluyan en el marco de una dieta balanceada. Sin embargo su ingesta no está exenta de riesgos. Uno de los principales problemas que puede causar es una infección por Listeria.
Esta puede afectar a cualquier persona pero el riesgo en los fetos es mucho más elevado. En los peores casos puede ocasionar un aborto espontáneo, muerte fetal o muerte del recién nacido.
La aplicación de temperaturas es la mejor forma de eliminar este patógeno. Por este motivo en el embarazo es imprescindible consumir quesos que se elaboren con leche pasteurizada. Si no sabes cuáles son, te vamos a mencionar algunos:
- Quesos duros con leche pasteurizada: gruyere, cheddar o parmesano.
- Edam y Stilton (quesos semi duros).
- Quesos suaves pasteurizados: cottage, mozzarella, feta, ricota, halloumi, queso en crema, queso fresco francés o fromage frais.
Por el contrario existen algunas variedades que es mejor evitar:
- Queso de cabra madurado blando hecho con leche sin pasteurizar.
- Los quesos blandos madurados con moho y con una capa en el exterior: brie y camembert.
- Quesos azules blandos tipo roquefort, azul danés o gorgonzola.
Algunos expertos señalan que los quesos de pasta blanda pueden ser introducidos en recetas donde el queso quede cocido. Esto implica asegurarse que las temperaturas aplicadas son suficientes.
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3 recetas con queso para el primer trimestre del embarazo
Conociendo cuáles son algunos de los quesos más favorables, se puede considerar la puesta en práctica algunas de estas recetas con queso para el primer trimestre de embarazo. ¡Son exquisitas y muy prácticas!
1. Pasta con tomates y queso mozzarella
Es un platillo delicioso para almorzar. Solo tienes que preparar la pasta que más te guste pero te recomendamos una pasta corta, como los caracoles o tornillitos.
Ingredientes para 2 raciones
- 150-200 gramos de pasta.
- Salsa de tomate.
- Aceite de oliva.
- 100 gramos de queso mozzarella.
- Sal.
- Orégano o albahaca.
Preparación
- Por un lado, empezar la preparación del plato con la cocción de la pasta. Para ello, seguir las instrucciones del fabricante. Una vez a punto, escurrir y reservar. Se puede guardar un poco del agua para obtener una salsa más cremosa.
- Mientras, poner a calentar la salsa de tomate en una sartén con un poco de aceite de oliva. Lo ideal es usar un sofrito de tomate casero que se puede cocinar justo antes o con antelación.
- Cuando la salsa está caliente, añadir la pasta, el queso mozzarella cortado (o entero si son bolas pequeñas) y un poco de agua de la cocción en la sartén.
- Por último dejar que se mezcle todo junto y que el queso se funda un poco. Agregar hierbas aromáticas al gusto, como orégano o albahaca fresca. Servir.
Con esta preparación reforzarás el aporte de calcio en la dieta, un mineral que ha demostrado ser esencial de cara a reducir el riesgo de osteoporosis.
“Antes de consumir cualquier tipo de alimento, debes revisar muy bien las etiquetas y asegurarte que sean elaborados con leche pasteurizada”
2. Sopa de tomate y queso
Además de ser fácil de preparar, esta alternativa es una de las recetas con queso para el primer trimestre de embarazo más sencillas.
Ingredientes para 2 raciones
- 1 cebolla.
- Medio kilo de tomates.
- 60 gramos de queso pecorino o parmesano.
- Aceite de oliva.
- 400 o 500 mililitros de agua o caldo de verduras.
- Sal.
- Hierbas aromáticas.
Preparación
- Para empezar poner una olla o cacerola al fuego con un poco de aceite de oliva.
- Cuando el aceite esté caliente sofreír la cebolla pelada y cortada en rodajas finas.
- Mientras, escaldar los tomates en agua hirviendo durante 1 minuto. Retirar la piel, trocear y agregar a la sartén. Añadir un poco de sal y dejar cocinar todo junto unos 15 minutos, vigilando que no se pegue.
- A continuación agregar el caldo o agua, las hierbas aromáticas y el queso. Dejar un par de minutos para que se integren los sabores. Después verter en un vaso de batidora y triturar todo junto.
Esta sopa de tomate y queso se puede servir tibia, fría o caliente. En este último caso se puede decorar con un poco más de queso en el momento de servir.
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3. Ensalada con queso feta
Un plato fresco, ligero y variado que combina los nutrientes del queso con el aporte de vegetales y fruta, tan importante en el embarazo.
Ingredientes para 2 raciones
- Hojas variadas de espinacas y canónigos.
- 1 remolacha cocida.
- Media cebolla morada.
- 50 gramos de moras.
- Un puñado de nueces.
- 75 gramos de queso feta.
- Aceite de oliva.
- Vinagre de manzana.
- Sal
Preparación
- Para empezar lavar muy bien las hojas verdes y las moras y dejarlas secar.
- Trocear la remolacha en dados o láminas finas. Pelar y cortar la cebolla.
- A continuación mezclar todos los ingredientes de la ensalada en un bol grande. Después añadir las nueces y el queso cortado.
- Aliñar al gusto con aceite, vinagre y sal.
Recomendaciones para las recetas con queso en el primer trimestre del embarazo
Como hemos visto, el queso es un alimento que se puede incorporar sin problema en la dieta durante el embarazo. Siempre que se quiera o pueda incluir, aporta parte de los nutrientes y la energía necesarios durante el período de la gestación.
Gracias a todas sus variedades y a su gran versatilidad, se puede incluir en muchos platos: en ensaladas, gratinados, con la pasta, en tostadas o acompañado de frutas para un saludable tentempié.
Para introducirlo de forma segura no conviene abusar de él ya que podría sustituir otros alimentos necesarios. Asimismo, en exceso podría significar un aporte elevado de grasas saturadas o de sal.
Para consumirlo con todas las garantías es necesario comprar aquellas variedades elaboradas con leche pasteurizada. Algunas de ellas ya las hemos presentado, pero lo más seguro es consultar las etiquetas donde debe aparecer esta información.
Es por ello que durante este período tan delicado es preferible evitar los quesos artesanos o asegurarse que en su elaboración se han cumplido todas las medidas de higiene y seguridad alimentaria.
Para conservarlo de forma adecuada se recomienda seguir estos consejos:
- Mantener el queso en el refrigerador, a una temperatura de unos 4 grados centígrados y bien embalado.
- No dejarlo más de una hora a temperatura ambiente.
- Consumir el queso lo más pronto posible y descartarlo cuando muestre señales de haberse estropeado.
Prepara recetas con queso en el primer trimestre del embarazo
Gracias a estas sencillas recetas con queso para el primer trimestre del embarazo, podrás degustar este sabroso ingrediente sin ninguna culpa. Además, se trata de opciones muy saludables que podrá disfrutar toda la familia.
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