¿Qué 9 alimentos favorecen la concentración en los niños?

Los nutrientes presentes en algunos alimentos ayudan al cerebro de nuestros niños, incrementan la concentración y, por ende, su rendimiento en actividades académicas. ¿Conoces cuáles son?
¿Qué 9 alimentos favorecen la concentración en los niños?
Saúl Sánchez Arias

Revisado y aprobado por el nutricionista Saúl Sánchez Arias.

Última actualización: 31 marzo, 2022

Algunos alimentos ayudan a favorecer la concentración en los niños. Así que incluirlos en su dieta con regularidad sería una excelente contribución con su salud y el aprendizaje.

La concentración es un elemento imprescindible para el aprendizaje, en especial cuando los niños comienzan la escuela. Para mantener su cerebro activo, no hay dudas que la prioridad es ofrecerles una buena nutrición. 

El cuerpo humano requiere de nutrientes, vitaminas y minerales para mantenerse sano y desarrollar su potencial físico y mental al máximo. Estos requerimientos son especiales en los niños, ya que están en pleno crecimiento.

Algunas comidas recomendadas por los especialistas favorecen el proceso de concentración, gracias a su alto contenido de nutrientes que podrían ayudar al cerebro a estar más atento y enérgico. Los alimentos ricos en ácidos grasos, proteínas, vitaminas y minerales son los recomendados para incrementar el grado de atención de los pequeños.

¿Cuáles alimentos favorecen la concentración en los niños?

Si quieres que tu pequeño esté cada día más atento, no pueden faltar los siguientes alimentos en su dieta:

1. Pescado

El pescado, en especial el azul, es una gran fuente de proteínas y minerales. El fósforo es uno de ellos y favorece las conexiones neuronales, pero este también posee altas concentraciones de grasas omega 3 y omega 6, que benefician el sistema nervioso. La ingesta regular de ácidos grasos intervienen en el correcto desarrollo cerebral, según un artículo publicado por la revista “Journal of Alzheimer’s Disease”.

Las grasas omega 3 son consideradas esenciales, pues el cuerpo no puede producirlas; por lo tanto, deben incorporarse a través de ciertos alimentos como el salmón, el atún y la sardina. Todos ellos se ubican entre los pescados con más alta concentración de estas.

2. Huevos

Los huevos son una importante fuente de fósforo, que además incluye dentro de su beneficiosa composición nueve aminoácidos que resultan indispensables para el óptimo funcionamiento de nuestro cuerpo.

Los huevos aportan también una buena cantidad de colina, otro nutriente fundamental para la memoria y la concentración. Esta ayuda a la comunicación óptima de las neuronas entre sí, además de ser una gran fuente de proteínas y energía.

Los alimentos favorecen la concentración en los niños y complementan su desarrollo de manera integral.

3. La leche y los derivados lácteos

Una de las mejores fuentes de calcio, los derivados lácteos y la leche regulan las funciones nerviosas y proporcionan triptófano. Este aminoácido nos ayuda a producir serotonina, un neurotransmisor cerebral esencial. Además, se asocia con una buena calidad del descanso, lo cual repercute de forma positiva en la función cognitiva según un estudio publicado en el año 2018.

El yogurt en especial posee una alta proporción de otro aminoácido llamado tirosina, que sirve para estimular la producción de neurotransmisores como la dopamina y noradrenalina. Estos actúan en los procesos de concentración y buen funcionamiento de la memoria. Lo mejor del yogurt es que a los niños les encanta.

4. Más alimentos para la concentración: frutos secos

Los frutos secos son otra fuente no solo de triptófano, sino también de ácidos grasos omega 3 que ayudan a la concentración de los niños. Además tienen vitaminas, minerales y antioxidantes que los convierten en alimentos perfectos para el funcionamiento neuronal.

Las nueces y los maníes son una gran fuente de nutrientes que estimulan la formación de conexiones entre las neuronas y las protegen, además de ofrecer proteínas, grasas y tiamina.



5. Aceite de oliva y aguacates

Las grasas monoinsaturadas son las más saludables y las podemos encontrar en el aceite de oliva o en el aguacate. Estas ayudan en gran medida a la circulación sanguínea del cerebro, mejoran la comunicación entre neuronas y potencian la memoria.

Una dieta alta en este tipo de grasas conduce a una aumento de producción y liberación de acetilcolina, fundamental para el aprendizaje y la memoria.

Los aguacates, además de ser fuente de grasas saludables que mantienen el óptimo funcionamiento del sistema nervioso y del cerebro, poseen también antioxidantes que protegen la memoria, favorecen el aprendizaje y el desarrollo en los niños.

“La concentración es un elemento imprescindible para el aprendizaje. Para mantener el cerebro del niño activo, no hay dudas que la prioridad es ofrecerles una buena nutrición”

6. Frutas

Las frutas no deben faltar en la dieta de la familia y en especial en la de los niños. Son ricas en fibra, suministran al organismo azúcares sencillos que sirven de nutrientes para el cerebro y tienen pocas calorías. 

El plátano es una fruta con grandes cantidades de potasio y manganeso; ambos son de gran importancia en la dieta de los pequeños. Además, contiene vitamina B6, que ayuda a la segregación de norepinefrina y serotonina, neurotransmisores importantes  para la concentración, según un artículo publicado en la revista “Nutrición Hospitalaria“.

Otras frutas, como las moras azules contribuyen al mantenimiento del grado de atención alto; es una relación ganar-ganar, ya que nutren y son deliciosas.

7. Los cereales y pastas integrales

Los carbohidratos complejos proveen al cerebro de hidratos de carbono, que serán trasformados en glucosa y aminoácidos que, junto a la vitamina B6 —que ayuda el sistema nervioso—, aumentan la producción de serotonina para disminuir el estrés.

Muchas veces, la carencia de alimentos que aporten energía y favorezcan la concentración es asociada al cansancio. Por tal motivo, los que se han citado antes no pueden faltar en las comidas de nuestros pequeños si queremos hijos activos y con buena disposición académica.

Los cereales y los frutos secos se incluyen en los alimentos que favorecen la concentración de los niños.

8. Cacao y chocolate negro

Estos dos ingredientes están relacionados de forma positiva con el rendimiento y la concentración, pues contienen algunos compuestos que estimulan el cerebro. Entre ellos destacan algunos antioxidantes y también la cafeína.

En concreto, los flavonoides se concentran en áreas cerebrales relacionadas con la memoria y el aprendizaje. En un estudio con población joven y adulta, la ingesta habitual de chocolate negro se asoció con un mejor rendimiento cognitivo, memoria, organización viso-espacial o el razonamiento abstracto.

9. Verduras de hoja verde

Las espinacas, el brócoli o la menos conocida col kale, son excelentes fuentes de ácido fólico y otras vitaminas del grupo B. Todas estas contribuyen al desarrollo y al funcionamiento cerebral por lo que son esenciales durante toda la vida y en la etapa escolar. Además

Además aportan a la dieta de los niños cantidades significativas de antioxidantes y vitamina K. Esta última tiene una papel clave en la síntesis de un tipo de grasas poco conocidas (los esfingolípidos) que participan en la proliferación y supervivencia de las células cerebrales.

Otros aspectos a tener en cuenta a parte de los mejores alimentos para la concentración

La alimentación es uno de los factores influyentes en la concentración y el rendimiento cognitivo de los niños. Y además es uno de los que se puede modular de forma positiva a través de cambios en la dieta. Incluir los alimentos hasta ahora comentados es uno de los pasos esenciales.

A nivel alimentario no solo se han de potenciar estos alimentos sino también evitar la presencia de los más nocivos. Algunos estudios sugieren que los snacks poco saludables, la carne roja y procesada, la pizza, las golosinas con chocolate y las bebidas energéticas se relacionan de forma negativa con la función cerebral. 

También se deben evitar alimentos con mucho almidón o harina de trigo. Esto se debe a que las fluctuaciones rápidas de glucosa en sangre podrían afectar la memoria y el aprendizaje de nuestros pequeños.

Además es imprescindible acompañar su patrón de alimentación con otras prácticas y hábitos que van a facilitar su capacidad de concentración y rendimiento.

  • Dormir suficientes horas para poder reponer la energía gastada. Según la Sleep Foundation cuando existe falta de sueño los niños y adolescentes pueden experimentar dificultades con la memoria, el aprendizaje y la resolución de problemas. Del mismo modo, la privación del sueño puede afectar su estado de ánimo, lo que también repercute en problemas de rendimiento académico.
  • Ayudarlos a detectar y manejar situaciones que les preocupan o les generan estrés, pues esto puede afectar de forma negativa su capacidad de atención.
  • Vigilar la dieta y la hidratación, pues esta también juega un papel importante en la concentración.
  • Los horarios regulares en casa y un entorno sin distracciones también son clave para ayudarlos a concentrarse en casa.
  • Tampoco hay que olvidar al importancia del juego y la actividad física. Los estudios señalan que practicar deporte en la infancia tardía les influencia de forma positiva en las emociones y las funciones cognitivas.


Mejora la alimentación para aumentar la concentración

Una dieta variada, saludable y suficiente provee la energía necesaria, permite una mejor irrigación del cerebro y lo abastece de todos los nutrientes que necesita para mejorar el rendimiento y la concentración.

Existen algunos alimentos que es interesante potenciar para lograr este fin. Sin embargo ten en cuenta que no existen alimentos milagrosos ni tampoco prohibidos. Además es preferible tener prudencia con alimentos que, en exceso, pueden provocar un sobreestímulo que entorpecería la concentración del niño.

Siempre hay que buscar el equilibrio. Una buena nutrición no solo les da a los pequeños salud a su cuerpo, sino también a su mente; no tengas dudas de que los alimentos favorecen la concentración en los niños y complementan su desarrollo de manera integral.


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