6 poemas de Gloria Fuertes para niños

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Adéntrate en el maravilloso mundo infantil gracias a los versos de Gloria Fuertes. Los niños descubrirán un lugar en donde los sueños brillan en cada palabra.

Revisado y aprobado por la pediatra Marcela Alejandra Caffulli.

Escrito por Maria del Mar Garcia Martin

Última actualización: 02 enero, 2023

Es reconocida como una de las poetas que mejor ha sido capaz de transmitir la belleza y la utilidad de este género secreto a los niños. Ahora, Gloria Fuertes (Madrid, 28 de julio de 1917- Madrid, 27 de noviembre de 1998) reaparece en el siguiente artículo de la mano de algunos de sus poemas más célebres.

La poeta de la Generación del 50 se volcó totalmente en el mundo de los pequeños y logró que su poesía y su humanismo empaparan a cada individuo, independientemente de su edad. ¿Quieres saber por qué? Sigue leyendo.

Descubre y disfruta de estos poemas de Gloria Fuertes para niños

A día de hoy, una de las enseñanzas más valiosas que refleja el enorme poder que tiene la lectura la dio ella:

“En sus cuentos y poesías infantiles no solo se percibe una preocupación por los niños en general, sino una amplia vocación didáctica que refleja en sus historias contadas con humor y fantasía porque, como bien decía, “un niño con un libro de poesía en las manos nunca tendrá de mayor un arma entre ellas”.
–Fuensanta Martín Quero (2020)–

En esto, nosotros también estamos de acuerdo. Por eso, queremos compartirte algunos de los escritos más célebres de la autora. Sus poemas reflejan la importancia de conseguir la paz en el mundo por medio de versos y de risas.

1. “En mi cara redondita”

Un poema ideal para que los más pequeños identifiquen las partes de su rostro. En este sentido, lo ideal sería que los padres se lo enseñaran al niño mediante una canción, mientras le guían al señalar los ojos, la nariz, la boca y las demás partes.

En mi cara redondita
tengo ojos y nariz,
y también una boquita
para hablar y para reír.
Con mis ojos veo todo,
con la nariz hago achís,
con mi boca como, como
palomitas de maíz.

2. “Cómo se dibuja un niño”

En línea con el poema anterior, ¿qué mejor forma hay de practicar las partes del cuerpo que a través de la pintura? Gloria Fuertes da todos los pasos para lograr este objetivo y enseña a dibujar un niño con sus versos. ¡Manos a la obra!

Para dibujar un niño hay que hacerlo con cariño.
Pintarle mucho flequillo,
que esté comiendo un barquillo;
muchas pecas en la cara,
que se note que es un pillo;
– pillo rima con flequillo y quiere decir travieso -.
Continuemos el dibujo: redonda cara de queso.
Como es un niño de moda, bebe jarabe con soda.
Lleva pantalón vaquero con un hermoso agujero;
camiseta americana y una gorrita de pana.
Las botas de futbolista – porque chutando es artista -.
Se ríe continuamente, porque es muy inteligente.
Debajo del brazo un cuento, por eso está tan contento.
Para dibujar un niño hay que hacerlo con cariño.

Los poemas de Gloria Fuertes invitan a jugar y a divertirse con un toque de humor que caracteriza a esta escritora, pero que también transmiten grandes enseñanzas.

3. “El gallo despertador”

El madrugar suele ser algo que le cuesta a todo el mundo. En especial, a los pequeños de la casa. Por este motivo, para despertarse con alegría cada mañana, no hay nada como leer en alto este poema mientras se sube poco a poco la persiana.

-Kikirikí,
estoy aquí-,
decía el gallo
Colibrí.
El gallo Colibrí
era pelirrojo,
y era su traje
de hermoso plumaje.
-Kikirikí.
Levántate campesino,
que ya está el sol
de camino-.
–Kikiriki.
Levántate labrador,
despierta con alegría
que viene el día-.
–Kikiriki.
Niños del pueblo,
despertad con el ole
que os esperan en el “cole’-.
El pueblo no necesita reloj,
le vale el gallo despertador.

4. “La pata mete la pata”

Un poema de lo más divertido, por el cual los niños pueden aprender el valor de la verdadera amistad. En este sentido, no sabes cuándo esta llegará, pero en el momento que menos te lo esperas, ocurre la magia y te encontrarás con un amigo para toda la vida.

La pata desplumada,
cua, cua, cua,
como es patosa,
cua, cua, cua,
ha metido la pata,
cua, cua, cua,
en una poza.
-¡Grua, grua , grua!
En la poza había un Cerdito
vivito y guarreando
con el barro de la poza,
el cerdito jugando.
El cerdito le dijo:
—Saca la pata,
pata hermosa—.
Y la pata patera
le dio una rosa.
Por la granja pasean
comiendo higos.
¡El cerdito y la pata
se han hecho amigos!

5. “Gallinita ciega”

El juego de la gallinita ciega es un clásico para el entretenimiento de los niños. Además, Gloria Fuertes lo refleja en uno de sus célebres poemas.

¿Conoces el mítico juego de la gallinita ciega? Si se siguen las instrucciones proporcionadas por la Fundación Integra, solo será necesario un pañuelo para vendar los ojos y 3 o más jugadores. Así, el juego consiste en lo siguiente:

Las personas se ponen de pie y se forman en ronda.
Luego, se elige a un participante para que haga de gallinita ciega.
A este se le amarra un paño a los ojos para que no pueda ver y se le pide que de 3 vueltas sobre sí mismo.
Después, se tendrá que dirigir a cualquier parte del círculo para alcanzar a alguno de los miembros y adivinar quién es, sin más ayuda que el tacto.
Una vez que adivina la persona que es, a esta le toca su turno.

¿Qué te parece jugar con tus hijos mientras recitáis juntos este original poema?

Gallinita estaba
presa en su corral,
con la pata atada
en un matorral.
Gallinita cose,
cose un delantal
para su pollito,
que no sabe andar.
Gallinita llora:
«¡Kikirikiká!».
Se ha quedado ciega
de tanto llorar.
Gallinita ciega
busca en el pajar.
—¿Qué se te ha perdido?—.
—Aguja y dedal—.
—Da tres vueltecitas
y lo encontrarás—.
Gallinita ciega
gira sin cesar.
¡Pobre gallinita,
se va a marear!

6. “Los juguetes son para jugar (de verdad)”

Este poema es uno de los alegatos por la paz que pervive todavía en la memoria de todos los españoles. En este sentido, la infancia humilde de Gloria Fuertes fue dura y estuvo marcada por una de las etapas más tristes: la posguerra.

Y es que la guerra civil española dejó una profunda e imborrable huella en ella. Así, de sus dedos y su experiencia, nacieron los siguientes versos:

Los Juguetes son para jugar a jugar (de verdad),
no para jugar a matar (de mentira).
Las pistolas (ni de agua),
el revólver (ni de broma),
la escopeta (ni tocarla).
Los juguetes para todo
y las armas para nada.

Los poemas de Gloria Fuertes para niños que tocan el corazón

El niño que sabe leer poesía consigue las claves secretas para abrir la puerta a otros mundos en donde poder soñar, imaginar y avanzar como persona. En esta línea, Gloria Fuertes es una de las guías que acompañan a los más pequeños en este formidable camino.

Esperamos que enseñes a tus hijos a apreciar estos escritos. Además, se trata de productos nacidos del corazón y de la experiencia de una de las voces españolas con más repercusión en el mundo de las letras.