La importancia de dar voz al alumnado

El sistema educativo tiene la oportunidad de poder formar a personas, no solo académicamente, sino también en valores. Por lo tanto, la escuela es un lugar ideal para crear una sociedad futura mejor. Pero, para conseguir esta finalidad, hay que escuchar a los niños y conocer sus opiniones. Por este motivo, en este artículo vamos a hablar sobre la importancia de dar voz al alumnado.

Tenemos el deber de enseñar a los niños, pero también hay que aprender de ellos. Por ello, debemos escuchar activamente a los más pequeños. Así, podemos conocer cómo ven el mundo, cuáles son sus puntos de vista y qué preocupaciones tienen.

¿Qué significa dar voz al alumnado?

La expresión “voz del alumnado” es un término poco conocido en nuestro país, pero que se utiliza frecuentemente en otros países, principalmente anglosajones. Este concepto hace referencia a todas aquellas iniciativas que tiene el objetivo de aumentar el protagonismo y la participación del alumnado en ciertos aspecto del entorno escolar.

Para ello, hay que dotar a los niños de medios y fines que les permitan elegir más y evitar que tengan un papel pasivo en su propia educación y aprendizaje. Asimismo, cabe destacar que se debe dar voz a todo el alumnado, sin hacer discriminaciones por:

• Discapacidad.
• Edad.

Puesto que todos los estudiantes, independientemente de sus características o capacidades, tienen opiniones y hay que darles la oportunidad de ser escuchados.

Actividades para dar voz al alumnado

Dar voz al alumnado permite la participación de los niños en la mejora de la escuela y sirve como herramienta de movilización de cambios que los centros asumen para conseguir una educación inclusiva y democrática.

Algunas actividades que pueden poner en práctica los docentes para dar voz al alumnado son:

• Eventos consultivos: buzón de sugerencias, votaciones, paneles de peticiones, etc.
• Role-playing: realizar dinámicas de grupo basadas en el juego de roles.
• Lego Serious Play: con piezas de construcción, se representan las soluciones ante un  problema determinado.
• Mapeo social o cartografía participativa: representar mediante un mapa, con diversos elementos gráficos, los problemas y las soluciones.

Nueva mentalidad del profesorado

Dar voz al alumnado en los colegios implica un cambio de mentalidad del profesorado a la hora de asumir su papel de mediador de la educación. Por tanto, tienen que olvidarse de la metodología de enseñanza tradicional, en la que el maestro es el centro de atención y el alumno un mero receptor de información.

Asimismo, los docentes deben dejar a un lado la postura autoritaria y permitir a los estudiantes participar en la vida escolar para que desarrollen su autonomía personal, asuman responsabilidades y se conviertan en personas seguras de sí mismas.

“El objeto de la educación es formar seres aptos para gobernarse a sí mismos, y no para se gobernados por los demás”.

– Herbert Spencer –

En conclusión

Hay que implementar en los colegios una educación inclusiva que fomente la voz del alumnado, la convivencia positiva y el apoyo educativo adecuado para promover el cambio y las mejoras escolares. Por tanto, hay que motivar a los niños hacia la participación. En este sentido, cabe desatacar la siguiente frase:

“La participación implica aprender, jugar o trabajar en colaboración con otros. Se trata de poder hacer elecciones y de tener algo que decir sobre lo que hacemos. Más profundamente tiene que ver con ser reconocido y aceptado por nosotros mismos”.

– Booth y Ainscow –

Pero, la participación de los niños no debería reducirse al contexto educativo, sino que deberían también ser escuchados dentro de la comunidad a la que pertenecen.

En definitiva, se puede decir que el hecho de fomentar la participación y dar voz al alumnado es beneficioso para conseguir su posterior participación activa en la sociedad.

“El colegio debe ser un lugar en el que los niños aprendan a expresarse libremente”.