¿Por qué es importante hacer tummy time?

El tummy time es una oportunidad para acompañar la estimulación del bebé. Además, es un momento compartido con el adulto que puede resultar muy placentero para ambos.

Revisado y aprobado por la psicóloga Maria Fátima Seppi Vinuales.

Escrito por Maria Fátima Seppi Vinuales

Última actualización: 13 abril, 2022

Los primeros años de vida son muy importantes para el desarrollo cerebral y no es de extrañar que los bebés den la impresión de ser “esponjas” de aprendizaje. Esto se debe a la gran neuroplasticidad que presentan, la cual les permite incorporar numerosas habilidades día tras día.

Por supuesto que este proceso madurativo ocurre de forma natural, pero también se beneficia del acompañamiento y del incentivo de los adultos a cargo del niño. Y en este sentido, una de las estrategias más empleadas en las primera etapas es el tummy time. Veamos de qué se trata y cómo aplicarlo en casa.

¿Qué es el tummy time?

Cuando utilizamos este término inglés, nos referimos al ‘tiempo boca abajo’ o al ‘tiempo de las barrigas’. Se trata de un ejercicio de estimulación para los bebés que consiste en dejarlos acostados sobre su vientre para que aumentan su campo visual y el rango de exploración. Esto es porque, habitualmente, los niños pequeños pasan la mayor parte de la jornada tendidos sobre su espalda.

El tummy time no tiene fecha de inicio y se puede realizar desde los primeros meses de vida, aunque con sus variantes. Lo más importante es colocar al niño sobre una superficie plana, firme y cómoda, siempre bajo la supervisión de sus cuidadores.

Si bien las superficies blandas impresionan ser más confortables, no se recomiendan en absoluto. Por un lado, porque se hunden con facilidad y esto le demanda al bebé un trabajo extra para mantenerse erguido. Por el otro, porque habitualmente se trata de mobiliarios a cierta altura (como la cama), lo cual implica un mayor riesgo de caídas.

En el caso en el que el bebé lo requiera, también se pueden incorporar elementos facilitadores de la postura, como una toalla enrollada o un cojín alargado debajo del torso. Otra alternativa, es apoyar al pequeño sobre la pierna del adulto que yace en el piso.

Si bien los recién nacidos duermen muchas horas, lo ideal es habituar al bebé al tummy time desde pequeño. Esta rutina ofrece grandes beneficios para su maduración, con tan solo unos 20 minutos al día.

Beneficios del tummy time

Además de ser un momento de estimulación y de distracción, el tummy time ofrece otras importantes ventajas para los niños:

• Previene la plagiocefalia posicional, que es el aplanamiento o la deformación de la cabeza producida por pasar muchas horas acostado boca arriba.
• Favorece el fortalecimiento y la tonificación de los músculos. Principalmente, del cuello y del dorso, pero también de los miembros.
• Promueve el control de la cabeza (o sostén cefálico).
• Facilita la eliminación de gases y el tránsito intestinal.
• Incentiva al gateo y fomenta el movimiento libre.
• Le ofrece al niño otro horizonte y amplía su rango visual. Esto también colabora con el desarrollo de la coordinación visomotora.

Algunas recomendaciones adicionales sobre el tummy time

Así como se recomienda alternar el tummy time con la posición boca arriba (que es la indicada para el sueño seguro), también existen otras claves para potenciar esta actividad:

• Evitar que el tummy time se realice justo después de la alimentación. Idealmente, dejar pasar al menos una hora entre un evento y el otro.
• Asegurar un entorno libre de peligros y mantener la supervisión constante del adulto. Por ejemplo, las alfombras de goma eva son un gran recurso para brindarle confort y seguridad al bebé.
• Aprovechar este momento para conectar con el bebé e iniciarlo en la socialización. A veces, basta con hablarle o cantarle, hacerle muecas o caricias o llamar su atención con algunos juguetes coloridos y sonoros. Tal como señalamos arriba, esto favorece al desarrollo del gateo e incentiva a la libre exploración, especialmente cuando se coloca un objeto llamativo a cierta distancia.
• Observar la actitud del niño y sus señales. Lo más importante es que el bebé se encuentre relajado, tranquilo y de buen ánimo. De otro modo, se fastidiará y no querrá adoptar esta posición.
• No forzar al bebé si no lo desea o si aún no ha logrado alcanzar alguna habilidad. Cada niño tiene sus tiempos y es fundamental respetarlos.

El tiempo compartido con los niños es fundamental para su desarrollo

Parece una obviedad, pero no lo es en absoluto en estos tiempos que corren. Debemos tomar conciencia de que todo el tiempo que le dedicamos al bebé es clave para su adecuado desarrollo integral.

No solo el aspecto motriz se beneficia con esta actividad, sino también la esfera psicológica y emocional del bebé. Los momentos compartidos fortalecen el apego y esto es lo que le permite al pequeño sentirse seguro para salir a explorar el mundo.

De modo que, si le ofreces a tu bebé un tiempo de calidad, le das amor, contención y herramientas para desarrollarse de la mejor manera.