Descubre 10 mitos sobre la dermatitis atópica

¿Sabías que la dermatitis atópica es una enigmática afección de la piel que desafía las barreras de la edad y el género? Esta intrigante patología, crónica e inflamatoria, es mucho más que una simple irritación cutánea.
Descubre 10 mitos sobre la dermatitis atópica
Maria del Carmen Hernandez

Escrito y verificado por la dermatóloga Maria del Carmen Hernandez.

Última actualización: 10 septiembre, 2023

La dermatitis atópica, también conocida como eccema atópico, es una afección de la piel que afecta a millones de personas en todo el mundo. A pesar de su prevalencia, existen numerosos mitos y malentendidos sobre esta patología cutánea crónica.

En este artículo, desglosaremos diez de los mitos más comunes sobre esta enfermedad y proporcionaremos información precisa y actualizada para ayudar a separar la realidad de la ficción. ¿Te interesa?

Los mitos más frecuentes sobre la dermatitis atópica

Un artículo en la Revista Médica Los Condes expone que la dermatitis atópica es una de las enfermedades dermatológicas más frecuentes y que puede ocasionar incomodidad en quien la padece.

Asimismo, si bien las manifestaciones clínicas alteran la calidad de vida, no suelen suponer riesgos importantes. A continuación, detallamos los mitos referidos a la dermatitis atópica.

1. «La dermatitis atópica solo afecta a los niños»

Uno de los mitos más extendidos sobre la dermatitis atópica es que solo afecta a los niños. Sin embargo, un artículo publicado en la revista Clinical Medicine expone que, si bien es cierto que esta afección a menudo se manifiesta en la infancia, también puede afectar a adolescentes y adultos.

De hecho, en muchos casos, los síntomas pueden persistir hasta la edad adulta, lo que demuestra que la dermatitis atópica no es exclusiva de los más jóvenes. 

2. «La dermatitis atópica es solo piel seca»

Si bien la xerosis (piel seca) es un síntoma común de la dermatitis atópica, esta afección va mucho más allá. La dermatitis atópica es una enfermedad inflamatoria crónica de la piel que se caracteriza por la inflamación y una picazón intensa.

Además, puede dar lugar a la formación de parches rojos, lesiones cutáneas y ampollas, lo que la diferencia de manera significativa de la piel seca común.

3. «La dermatitis atópica no es grave»

Aunque la dermatitis atópica puede variar en gravedad de una persona a otra, es crucial no subestimar su impacto. En los casos más severos, esta afección puede afectar de forma significativa la calidad de vida de una persona, interfiriendo no solo en su sueño, sino también en su capacidad para llevar a cabo las actividades diarias y en su bienestar mental.

Las persistentes molestias y la picazón intensa pueden crear un círculo vicioso que afecta la salud emocional y el estado de ánimo de quienes la padecen. Además, las infecciones secundarias pueden desarrollarse en las áreas afectadas, lo que no solo agrava la situación, sino que también puede requerir tratamientos adicionales y complicar aún más la gestión de esta afección dermatológica.



4. «La dermatitis atópica es contagiosa»

La dermatitis atópica no es una patología contagiosa. Por lo tanto, no se puede transmitir de una persona a otra a través del contacto físico, la ropa o cualquier otro medio.

De hecho, es una afección genética relacionada con el sistema inmunitario que no se propaga por contacto con personas que la padecen. Incluso, un estudio publicado en la revista The Journal of Allergy and Clinical Immunology también la vincula con las alergias alimentarias.

5. «Los baños empeoran la dermatitis atópica»

A menudo se cree que los baños empeoran la dermatitis atópica debido a la exposición al agua y al jabón. Sin embargo, los baños tibios y breves pueden ser beneficiosos, ya que ayudan a hidratar la piel. Es importante utilizar productos de limpieza suaves y aplicar una crema humectante después del baño para mantener la piel hidratada y saludable.

6. «La dermatitis atópica se cura con el tiempo»

La dermatitis atópica es una enfermedad crónica y no tiene una cura definitiva. Sin embargo, los síntomas pueden controlarse y mejorarse de manera significativa con el tratamiento adecuado, lo que permite a las personas llevar una vida normal y cómoda.

De acuerdo con una publicación de la National Library of Medicine, los pilares fundamentales del manejo de la enfermedad incluyen los siguientes:

  1. Evitar los factores desencadenantes.
  2. Tratamiento antiinflamatorio.
  3. Terapias complementarias.
  4. Cuidado diario de la piel.


7. «Los productos naturales son seguros para la dermatitis atópica»

Si bien algunos productos cosméticos naturales pueden ser útiles para la piel, no todos son seguros para las personas con dermatitis atópica. De hecho, algunos ingredientes naturales pueden causar reacciones alérgicas o empeorar los síntomas. Por esta razón, es esencial consultar a un dermatólogo antes de probar cualquier producto nuevo en la piel.

8. «El estrés no afecta a la dermatitis atópica»

La relación entre el estrés y esta afección es bastante compleja, pero es importante reconocer que la salud mental y emocional desempeña un papel en su manejo. El estrés puede desencadenar o empeorar los brotes de dermatitis atópica en algunas personas.

En este sentido, un estudio publicado en la revista Acta Dermato-Venereológica explica que, como respuesta al estrés, se desencadena una regulación positiva de mediadores del sistema nervioso que afecta a las células inmunológicas y a las residentes de la piel.

9. «Los esteroides son peligrosos»

Los esteroides tópicos son una herramienta utilizada en el tratamiento de la dermatitis atópica. Cuando se emplean correctamente y bajo la supervisión de un profesional de la salud, los esteroides tópicos son seguros y efectivos para controlar la inflamación de la piel.

10. «No se puede hacer nada para prevenir la dermatitis atópica»

Aunque la dermatitis atópica tiene una base genética, existen medidas que pueden ayudar a prevenir brotes y reducir los síntomas. Estas medidas incluyen el uso adecuado de productos de cuidado de la piel, la identificación y evitación de los desencadenantes y la gestión del estrés.

La dermatitis atópica y una buena calidad de vida

En resumen, la dermatitis atópica es una afección de la piel que a menudo se malinterpreta debido a los numerosos mitos que la rodean. Si tú o alguien que conoces padece dermatitis atópica, consulta a un dermatólogo para obtener un diagnóstico y un plan de tratamiento correctos. Con el manejo adecuado, es posible llevar una vida cómoda y saludable a pesar de esta afección crónica de la piel.


Todas las fuentes citadas fueron revisadas a profundidad por nuestro equipo, para asegurar su calidad, confiabilidad, vigencia y validez. La bibliografía de este artículo fue considerada confiable y de precisión académica o científica.



Este texto se ofrece únicamente con propósitos informativos y no reemplaza la consulta con un profesional. Ante dudas, consulta a tu especialista.