El deporte mejora las habilidades sociales en niños

Es innegable que el deporte ofrece numerosos beneficios psicofísicos para los niños, incluido el desarrollo de habilidades sociales. Pero para poder aprovechar de estas ventajas, primero será necesario incentivar a tus hijos a que elijan una práctica deportiva que sea de su agrado.

El deporte y las habilidades sociales en los niños

La adquisición de habilidades sociales es uno de los aspectos más trascendentales del desarrollo humano.

Probablemente no te hayas puesto a pensar en su importancia, pero este tipo de habilidades nos permiten socializar con otras personas y relacionarnos con el entorno. Y esto es algo fundamental durante la infancia.

Por este motivo, es importante hacer énfasis en aquellas estrategias que fomenten el desarrollo de las habilidades sociales desde edades tempranas de la vida, como por ejemplo, el deporte.

No importa tanto qué práctica se elija, sino que lo primordial es que el niño la disfrute.

También es importante evaluar el entorno en el cual tu hijo la realiza, ya que el contexto podrá influir de forma significativa en el modo en el que se desarrollan sus habilidades sociales.

“…el deporte es el ámbito más ideal para poder desarrollar y trabajar las habilidades sociales, puesto que en el mundo del deporte suceden multitud de situaciones diversas, las cuales obligan a las personas a interactuar con el medio”.

– Carlos Becerra Rivero –

¿Qué habilidades sociales favorece el deporte?

Practicar un deporte puede ofrecerle enormes beneficios físicos, psicológicos y sociales a tus hijos, pero lo más importante es que se sientan cómodos y felices con la disciplina que elijan.

A continuación te mostraremos las principales habilidades sociales que tu hijo puede desarrollar a través del deporte:

Trabajo en equipo

Una de las habilidades sociales más relevantes para nuestra vida es el trabajo en equipo. Por medio de esta no solo fortalecemos las relaciones interpersonales, sino que además aprendemos a compartir y a respetar.

Los deportes influyen sobre el compañerismo y la cooperación entre las personas. Aquellas disciplinas de conjunto favorecen el trabajo en equipo, ya que a través de ellas se inculca la noción de que el bien de uno es el bien de todos.
Estos valores deben ser enseñados y reforzados toda la vida, pero no hay que olvidar que la infancia es una de las etapas de aprendizaje más sensibles, donde todo deja una profunda huella.

Cumplimiento de las normas

Uno de los aspectos más complejos de comprender en el deporte son las normas, que son aquellos límites que existen en la actividad que se está llevando adelante.

La práctica deportiva regular desde edades tempranas favorece este aprendizaje en los niños. Por supuesto que cada niño lo logrará a su tiempo, pero a la larga todos lo comprenderán.

Los deportes son un buen lugar para aprender conceptos como la disciplina y el respeto por el otro, así como para reforzar la figura de autoridad. El contexto apropiado hará que el niño no sienta este proceso de aprendizaje como algo rígido y autoritario, sino como una lección de vida para su futuro.

La espera y la toma de turnos

¿Te has cruzado alguna vez con un niño impaciente? Probablemente la respuesta sea sí ya que, en términos generales, los niños suelen ser bastante impacientes y a veces un tanto caprichosos.

Es probable que esto se deba al tipo de crianza que han tenido, pero no debes desesperarte o darte duro si es tu caso. Solo necesitas replantearte cómo mejorarlo y encontrar una herramienta que te ayude a llevarlo a cabo.

El deporte puede ser una gran solución para esto, ya que podrá ayudar a tu niño a trabajar la paciencia, los límites y el respeto por el otro. Por supuesto que llevará su tiempo, así que tú también deberás ejercitar la paciencia si deseas ver buenos resultados.

Respeto por uno mismo y por los demás.

El respeto es una de las habilidades sociales más importantes, ya que resulta el pilar fundamental de la vida en comunidad.

En el caso de los deportes individuales, los niños empezarán a comprender el concepto de respeto a través de la figura del rival. Pero no viéndolo como alguien malo, sino como un par necesario para poder jugar. Alguien con quien competir y, sobre todo, al cual valorar.

Si el deporte es de conjunto, el respeto demostrará primeramente a sus compañeros y luego a los rivales.

Con estas bases establecidas, los niños podrán aplicar las habilidades sociales a su vida cotidiana. Pronto lograrán entender que respetando a las demás personas, podrán respetarse a sí mismos por el resto de sus vidas.

Manejo de la tolerancia a la frustración

Los conceptos de ganar o perder son muy relevantes en la vida de una persona. Incluso, muchos adultos no toleran la derrota y se frustran mucho cuando no consiguen la victoria.

En los niños es necesario trabajar este tema desde pequeños, para que la frustración no se traduzca en sufrimiento. Afortunadamente, el deporte favorece este aprendizaje ya que desde el inicio los niños lidian con el concepto de ganar o perder. De esta forma también se los introduce en las nociones de competitividad.

“…las habilidades sociales son un conjunto de conductas y destrezas específicas que nos permiten interactuar con los demás del modo más adecuado posible a la situación en que nos encontramos, y de manera mutuamente beneficiosa.”

– Eva Marín y Pedro Madrona –

Habilidades sociales a través del deporte: un disfrute para ellos, un trabajo para ti

Tus hijos no deben ver el deporte como un trabajo, ya que lo deseable es que disfruten de aquella actividad que escogieron libremente.

El trabajo se centra en ti y consiste en apoyarlo, acompañarlo, escucharlo y alentarlo. De esta manera podrás percatarte sobre el avance y la adquisición de nuevas habilidades sociales.