Cuándo llevar a los niños a eventos culturales

Aprende cuándo ha llegado el momento de llevar a tus hijos a eventos culturales, pero mira primero si están adaptados y observa la verdadera utilidad de dichos actos.

Niña representando una obra de teatro.

Si los niños se aburren en los eventos culturales, es posible que los pierdas para siempre en este sentido. Por eso, es tan importante saber cuál es el momento perfecto para que tus hijos empiecen a disfrutar de las artes.

Entendemos por artes y demás eventos relacionados con la cultura actos como exposiciones de arte, viajes para conocer historia y arquitectura, exposiciones y presentaciones de obras literarias, actividades variadas, visitas a galerías de pintura y escultura, etc.

Obviamente, cuando hablamos de este tipo de eventos, es importante que estén adaptados a la edad del niño o, en su defecto, que sepas cómo hacer de animadora para que los actos y actividades le resulten atractivos, entretenidos, divertidos, emocionantes y hasta inspiradores.

El momento de llevar a los niños a eventos culturales

Curiosamente, llevar a un niño a un evento cultural, como pueda ser un espectáculo de títeres, por ejemplo, de circo, de teatro, etc., siempre que esté adaptado para los pequeños, llega muy pronto, con tan solo dos años.Niños representando diferentes formas de expresión artística en eventos culturales.

Así, se extrae de un estudio llevado a cabo por expertas de la UOC, la Universitat Oberta de Catalunya. Según sus investigaciones, este tipo de eventos pueden ser muy provechosos para los bebés, pero no antes de esta edad.

Es necesario, eso sí, que los espectáculos, a estas edades, estén adaptados para ellos. Recordemos que un niño con dos años tiene una capacidad de atención y concentración muy limitada. Es decir, que puede perder pronto el interés por lo que está viendo o se está representando si no está pensado y diseñado para que sea atractivo para un pequeño de tan solo 24 meses o poco más.

Estos espectáculos deben estar preparados para que capten tanto su atención auditiva como visual. Es importante precisar este punto, además de la duración del acto, que jamás sobrepasará los tres cuartos de hora. Y, sumado a ello, se han de añadir música muy llamativa y rítmica junto con personajes coloridos y vistosos para que los chicos no se aburran y pierdan el interés.

Consideraciones a tener en cuenta

Según la profesora Mireia Cabero, titular de Estudios de Psicología y Educación de la UOC y una de las autoras del citado estudio, es importante que, al planear la visita a un evento cultural con un niño, se tengan en cuenta ciertas reglas o restricciones.

La primera regla a considerar es la naturaleza del propio espectáculo o evento. Si en el mismo aparecerán personajes estridentes o que incluso puedan provocar miedo, es mejor evitar tal acto. Se debe a que estos pueden afectar al sistema nervioso del niño de una forma muy negativa.

Alba Colombo, profesora de Estudios de Artes y Humanidades de la UOC y otra de las autoras del estudio, señala que el momento para consumir cultura siempre es bueno, sea el que sea. Pero es básico que esté adaptado a la edad del infante y que las características del evento sean las adecuadas, especialmente adaptadas al momento que vive el pequeño según su edad.Bebé con un bigote participando es uno de los eventos culturales para esa edad.

Espectáculos para bebés

En los últimos años se ha puesto muy de moda la creación de espectáculos muy específicos. El público al que van dirigidos estos eventos, en realidad, tiene unas necesidades muy particulares, de ahí que se enfoquen en la estimulación del pequeño.

Las especialistas de la UOC aquí mencionadas advierten de que la utilidad de este tipo de eventos es muy relativa. Y es que la estimulación auditiva y visual de estos eventos se puede lograr desde casa sin complicación alguna y a coste cero. De ahí que, en realidad, no resulten especialmente necesarios para los bebés.

Las expertas admiten que este tipo de espectáculos y su relación con los bebés no tienen por qué ser necesariamente negativos. Sin embargo, todo dependerá de los hábitos culturales de los padres. Sí que es cierto que, pasado un tiempo, es posible que el niño desarrolle interés por ellos.

Es decir, que puede ser una forma de interesar a los pequeños por la cultura desde bien temprano. Una motivación interesante y una forma de incentivar la curiosidad para los niños.

Sea como fuere, y respondiendo a la pregunta sobre cuándo llevar a los niños a eventos culturales, lo más importante es utilizar el sentido común. Elegir un buen espectáculo que despierte emociones e interés es básico para acertar.

Scroll al inicio