3 consejos para hacer BLW en tuppers
El baby led weaning (BLW) es un método de alimentación para bebés que se ha popularizado en los últimos años, pudiéndose llevar a la práctica también por medio de tuppers. Este consiste, básicamente, en ofrecerle a los más pequeños los alimentos tal cual son, para que los manipulen y se adapten poco a poco a sus características organolépticas. Así, se mejora el repertorio alimentario y se evitan rechazos en un futuro.
Antes de comenzar hemos de destacar que la dieta ha de ser lo más variada posible durante todas las etapas de la vida. De esta forma, se evitan déficits nutricionales que puedan condicionar negativamente la eficiencia de la fisiología humana. Por otra parte, conviene que sea equilibrada, salvo en la infancia, donde es positivo un cierto carácter hipercalórico.
Si quieres mantener los hábitos alimenticios de tu bebé también fuera de casa, no dejes de leer los consejos que te brindaremos en este artículo.
Ten en cuenta estas recomendaciones para hacer BLW en tuppers
A continuación, te vamos a mostrar los mejores consejos para hacer BLW en tuppers. De este modo, conseguirás transportar las preparaciones a casi cualquier parte, lo que facilita la alimentación de los más pequeños en épocas de cambios, como el verano. Solo será preciso llevar una buena organización y ganas de afrontar el desafío. ¿Lista?
1. Usa pastillas de frío
A la hora de transportar los tuppers de comida es importante mantener la refrigeración de los mismos. Así, se evita que los alimentos pierdan su calidad desde el punto de vista organoléptico o que puedan crecer bacterias patógenas en su interior.
La mejor alternativa para lograr una buena conservación es el uso de las pastillas de frío, las cuales son aún más positivas que el hielo como tal. Y es que este último elemento se derrite poco a poco, y el agua podría echar a perder a los alimentos.
Otra buena opción es adquirir una bolsa nevera que guarde bien las temperaturas y que limite los efectos de la exposición a la luz solar. De este modo, se puede llevar fruta fresca a cualquier parte. Estos alimentos son capaces de aportar una gran cantidad de vitaminas importantes, sobre todo la vitamina C, que ha demostrado potenciar el funcionamiento del sistema inmunitario del bebé.
2. Que no falten los vegetales
En los tuppers no deben faltar nunca los alimentos de origen vegetal, sobre todo cuando el BLW se ejecuta en verano. En este momento es mayor el riesgo de deshidratación, por lo que es clave incluir en la dieta comestibles con un buen porcentaje de líquidos en su interior. Tanto las frutas como las verduras son ideales para ello. Las últimas se pueden cocinar al vapor para después transportarlas en frío.
3. Cocina bien los alimentos perecederos
Es frecuente que en los tuppers se incluyan alimentos de origen animal con alto contenido en proteínas en su interior. Estos nutrientes son determinantes para lograr el buen desarrollo de los tejidos del organismo, según indica un estudio publicado en la revista Cell Reports. Sin embargo, hablamos de comestibles que pueden albergar bacterias patógenas en su interior, al menos si no se mantienen unas medidas de precaución básicas a la hora de cocinarlas.
Como norma general se aconseja que las carnes, pescados y huevos alcancen los 65 grados en todo el producto para conseguir que se destruyan los posibles patógenos que puedan contener en sus carnes. De este modo, y mientras se mantengan unas normas de conservación a la hora del transporte, se minimizarían los riesgos de intoxicaciones alimentarias.
¡Haz BLW y lleva tus elimentos en tuppers a cualquier sitio!
Según has podido comprobar, con tener en cuenta unos sencillos consejos se puede hacer BLW en tuppers de manera eficiente. Así podrás garantizar un buen estado nutricional del bebé, al tiempo que se divierten comiendo fuera de casa. Además, se adaptarán mejor a las texturas y a los sabores de los diferentes comestibles, lo que permitirá que su dieta en un futuro sea más variada y saludable.
Para terminar, ten en cuenta que aun bajo el contexto del BLW es clave asegurar un aporte nutricional adecuado. De este modo, se previene el desarrollo de patologías potenciadas por los déficits de minerales y de vitaminas. Para ello puede ser preciso complementar la comida de los tuppers con otras elaboraciones, como papillas y potitos. Se pueden preparar de forma casera e incluso congelar, para los días en el que el tiempo escasee.
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