¿Cómo los videojuegos clásicos pueden enriquecer el tiempo en familia?

Compartir con tus pequeños los videojuegos con los que tú creciste puede fortalecer los vínculos familiares y brindar tiempo de calidad. Además, esto puede beneficiar el desarrollo cognitivo y las habilidades motoras.

En un mundo donde la tecnología avanza a pasos agigantados, quizás sientas que es difícil conectar con tus hijos en medio de tantas novedades y cambios. Sin embargo, los videojuegos clásicos ofrecen una oportunidad dorada para crear un puente entre generaciones y pasar tiempo de calidad con niños y adolescentes.
Como padres, muchos de nosotros recordamos esos días mágicos de nuestra infancia cuando el simple acto de encender la consola y tomar el joystick nos transportaba a un mundo de aventuras y diversión. Videojuegos como Pac-Man y Super Mario Bros nos dejaron memorias imborrables y, con ellos, ahora puedes crear nuevos recuerdos con tus hijos.

Beneficios educativos y familiares de los videojuegos clásicos

La nostalgia tiene un poder único para unir generaciones. Cuando compartimos nuestras experiencias pasadas con nuestros hijos, les ofrecemos una ventana a nuestra propia infancia y creamos un vínculo más profundo y personal. 
Los videojuegos clásicos, esos que solíamos jugar en las primeras consolas o en las tiendas de juegos, como Pac-Man, Super Mario Bros, Donkey Kong, The Legend of Zelda o Tetris, son una forma maravillosa de conectar con nuestros hijos a través de recuerdos compartidos. 
Por fortuna, en la actualidad puedes jugar estos videojuegos clásicos, o sus versiones modernas, desde una computadora u otras consolas, y así conseguir sus grandes beneficios. En estos casos, de acuerdo con CyberGhost VPN, se recomienda utilizar gestores de contraseñas, un buen software antimalware y una VPN confiable para proteger la privacidad de tu familia y asegurar una experiencia de juego segura.

1. Desarrolla las habilidades cognitivas

Los videojuegos clásicos no solo son una forma de entretenimiento, sino que también pueden ser una excelente herramienta para el desarrollo cognitivo de tus hijos. Estos juegos ayudan a mejorar varias habilidades mentales importantes mientras los niños se divierten.
Uno de los principales beneficios es la resolución de problemas. Juegos como The Legend of Zelda están llenos de acertijos y desafíos que requieren pensar de forma crítica. Los niños deben analizar situaciones, desarrollar estrategias y tomar decisiones para avanzar en el juego, lo que fortalece su capacidad para resolver problemas.
La velocidad de procesamiento es otra habilidad que puede beneficiarse de los videojuegos clásicos. Juegos de acción como Space Invaders y Galaga requieren reflejos rápidos y decisiones instantáneas, lo que puede aumentar la velocidad con la que los niños procesan la información. 
Acorde con un estudio publicado en Journal of Cognitive Enhancement, cuando los niños juegan videojuegos, mejoran su visión y coordinación motora al mismo tiempo. Además, estos juegos pueden ayudarles a aprender palabras nuevas, mejorar su capacidad de leer, aumentar su percepción visual y cultivar su coordinación motora. 

2. Mejora la coordinación mano-ojo

Al jugar juegos como Super Mario Bros, los niños deben observar lo que sucede en la pantalla y reaccionar con rapidez usando los controles. En este videojuego clásico, deben saltar sobre obstáculos y enemigos con precisión, lo que requiere que sus ojos y manos trabajen juntos de manera efectiva. Esta práctica constante ayuda a mejorar su destreza y tiempo de reacción.

La coordinación mano-ojo no solo es importante para los videojuegos, sino que también tiene aplicaciones prácticas en la vida real. Actividades como escribir, dibujar, practicar deportes y tocar instrumentos musicales dependen en gran medida de esta habilidad.

Una investigación de la Revista Mexicana de Pediatría resaltó que los videojuegos ayudan a desarrollar tanto habilidades físicas como mentales en los niños. Al jugar, mejoran la coordinación entre sus manos y sus ojos, y al mismo tiempo, activan diferentes áreas del cerebro que les ayuda a entender y manejar situaciones complejas.

3. Cultiva el trabajo en equipo

Videojuegos clásicos como Bomberman, Double Dragon y Super Mario World ofrecen una excelente oportunidad para cultivar el trabajo en equipo dentro del entorno familiar.
A través del juego compartido, los miembros de la familia pueden fomentar el aprendizaje de valores, además de enseñarles a los niños a colaborar, comunicarse y resolver problemas juntos. Esto puede tener beneficios profundos en el desarrollo social y emocional de los pequeños del hogar.
Según un estudio de la Revista Latinoamericana de Ciencias Sociales, Niñez y Juventud, los videojuegos que requieren cooperación y competencia, como los juegos de plataformas y los juegos de carreras, ofrecen a los niños una salida para canalizar su agresividad y empatía de manera constructiva.

4. Fomenta la unión familiar

Los videojuegos clásicos pueden ser una excelente herramienta para fortalecer los lazos familiares. Jugar juntos en familia fomenta la unión y crea recuerdos compartidos, lo que genera momentos de diversión y conexión entre padres e hijos. 
Juegos como Mario Kart o Street Fighter permiten que todos los miembros de la familia participen, lo que promueve la competencia saludable y enseña a los niños a manejar tanto la victoria como la derrota de manera positiva.
Además, estos videojuegos ofrecen una oportunidad para el aprendizaje intergeneracional. Los padres pueden compartir con sus hijos los juegos que disfrutaron en su juventud, y transmitir historias y experiencias personales. 

5. Brinda un entorno controlado

En comparación con muchos juegos actuales que pueden contener imágenes o tramas sensibles para pequeños, los videojuegos clásicos suelen tener menos violencia y contenido inapropiado. Esto hace que sean más adecuados para los niños, y ofrecen un entorno de juego más seguro que brinda mayor tranquilidad a los padres.
No obstante, a pesar de que estos videojuegos suelen ser más apropiados para los niños, se recomienda limitar el tiempo de juego a entre una y dos horas al día. Esto es esencial para prevenir la adicción a los videojuegos y equilibrar el tiempo de ocio con otras actividades importantes como el estudio, el ejercicio físico y el tiempo en familia.

Juega videojuegos clásicos con tus hijos y aprovecha sus beneficios mientras se divierten

Los videojuegos clásicos no solo proporcionan entretenimiento, sino que también ofrecen beneficios educativos y familiares valiosos. Desde el desarrollo de habilidades cognitivas hasta el fomento del tiempo en familia, estos juegos pueden enriquecer nuestras vidas de maneras significativas. 
¡Así que anímate a jugar con tus hijos y bríndales una experiencia divertida mientras cultivas habilidades importantes para su vida!

Bibliografía

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