Los efectos que el confinamiento pueda tener en nuestros hijos es algo que nos preocupa a todos los padres. Y está claro que esta cuarentena traerá efectos tanto positivos como negativos en ellos. Pero no debemos olvidar que los niños son ejemplo de adaptación durante esta cuarentena.
Otra de las cosas que tenemos que tener claras, es que los efectos que este confinamiento tenga en los niños van a depender de muchas circunstancias, pero aun así, ellos son unos supervivientes.
Los niños: ejemplo de adaptación
María Montessori decía que los niños pequeños gozan de una capacidad de adaptación que ningún adulto tiene. Y esta es la realidad: desde que nacen, van adaptándose a las circunstancias, a los nuevos aprendizajes, a los nuevos retos… Son ejemplo de supervivencia.
Cuestiones a tener en cuenta sobre el confinamiento en los niños
Circunstancias del confinamiento
Está claro que la adaptación de los niños a esta situación va a depender, en gran medida, de las circunstancias en las que se produzcan y estén pasando esta cuarentena. Por ejemplo:
- No es lo mismo vivir en una casa con jardín, patio o terraza, que en un piso pequeño. Para los niños, es más fácil adaptarse en una casa grande que les da mucho margen para jugar y liberar su energía que en un piso en el que el espacio está mucho más reducido.
- Tampoco es igual vivir con una persona con problemas de salud física o mental, que vivir en una familia en la que todos sus miembros estén sanos. Si el niño vive con algún miembro deprimido o con ansiedad, los efectos adversos serán mayores y la adaptación a esta situación será más difícil.
- No es igual pasar la cuarentena con unos padres que no paran de discutir, gritar y enfadarse, que una familia donde se respire un ambiente de paciencia y de escucha entre sus miembros.
- Tampoco es lo mismo que en una casa en la que casa haya problemas de dinero y dificultad para llegar a fin de mes, debido a que los padres no puedan trabajar por esta situación que estamos atravesando y que transmitan su ansiedad y preocupación constantemente, que en una en la que aquellos que se lo toman con positividad, a pesar de las dificultades.
Así, podríamos seguir enumerando un montón de situaciones de las que va a depender que sean los niños ejemplo de adaptación.
Los niños: ejemplo de adaptación y supervivencia
Los niños son capaces de adaptarse mucho mejor que los adultos y, a pesar de las circunstancias y los posibles efectos, siempre habrá positivos y negativos. Está claro que estamos atravesando una situación excepcional y antinatural, pero ¿alguien se ha parado a pensar que los niños llevan tiempo enfrentándose a circunstancias antinaturales desde que tienen 3 años?
- Se han enfrentado al hecho de madrugar y tomarse el desayuno en 5 minutos para llegar al colegio a tiempo.
- Deberes y actividades extraescolares que les hacen acabar muy tarde todos los días.
- Muchos niños apenas pueden ver a sus padres, que llegan tarde de trabajar y cansados
Entonces, si han podido adaptarse a todo esto, deberían ser capaces de adaptarse a este confinamiento. Y seguro que en algunos aspectos esta cuarentena traerá efectos positivos en ellos, como estar con sus padres más tiempo, entre otros.
Enseñar a los niños labores de casa
Hay muchas cosas que los niños no aprenden en el colegio y que es en casa donde los padres debemos enseñárselas. Ahora que estamos todos juntos, podemos aprovechar y practicar nuevas tareas sencillas de la vida diaria para que los niños las aprendan. Siempre teniendo en cuenta su edad y adaptando las tareas a esto, claro. Por ejemplo:
- Enseñarles a cocinar, hacer una pizza, coser un botón, hacer un pastel, un bizcocho, unas galletas…
- Higiene personal: el hábito de lavarse las manos con frecuencia, dependiendo de la edad, enseñarles a cortarse las uñas…
- Limpieza: podemos enseñarles a poner una sábana bajera, que nos ayuden a hacer la cama, que cojan un trapo y nos ayude a limpiar, etc.
- Cuidado de plantas y animales: si tenemos plantas, que nos ayuden a regarlas. Y, si tenemos mascotas, que se preocupen de que no les falte el agua y la comida, etc.
Que sean los niños ejemplo de adaptación va a depender de estos factores, que son mucho más concluyentes que el confinamiento en sí. Si los niños ven a sus padres tranquilos y bien, ellos también lo estarán. Un niño con una simple mirada hacia sus padres puede saber cómo están las cosas.
Para esta situación nadie estaba preparado, nadie tiene un libro que nos indique qué debemos hacer. Pero lo que sí tenemos que tener claro es que la paciencia, el buen humor, la amabilidad, la generosidad y el amor nos sacarán victoriosos de esta etapa. Que esta situación no haga que se rompan familias, sino que salgan mucho más fortalecidas y unidas. ¡Todo irá bien!