Los momentos favoritos de una mamá

Los momentos favoritos de una mamá
María Alejandra Castro Arbeláez

Revisado y aprobado por la psicóloga María Alejandra Castro Arbeláez.

Escrito por Equipo Editorial

Última actualización: 04 enero, 2020

Los momentos favoritos de una mamá se centran alrededor del bienestar y la felicidad de su hijo.

Pueden ser tan efímeros como el pose que el niño adopta para recoger un crayón del piso o, tan duraderos, como la posición que siempre toma al dormir.

Pero lo cierto es que los momentos favoritos de una mamá seguramente son los mismos que los que tienen muchas otras.

8 Momentos favoritos de una mamá

Las horas de sueño

Ver dormir a un niño transmite paz y armonía espiritual, porque el sueño de un infante es glorioso.

Una madre ama los movimientos de su hijo en la cuna, el casi imperceptible sonido de su respiración y hasta la babita que sale de su boquita abierta.

¡Qué maravillosos son estos instantes!

El despertar

El despertar, sin lugar a dudas, es uno de los momentos favoritos de una mamá.

Pararse junto a la cuna, llamar con palabras dulces al niño que duerme tranquilo y acariciarlo para que se espabile, es sumamente placentero.

A eso le sigue el ¡buenos días mi amor! de todas las mañanas, unos cuantos besos, mimos y ¡upa! a montarse a horcajadas encima de mamá.

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La hora del pecho

Alimentar a un niño con leche materna, para las madres, al menos, para las buenas de verdad, significa algo grandioso.

Tener la certeza de que eres la principal fuente de alimentación que va a sostenerlo durante mucho tiempo, que lo provees de los nutrientes que necesita para crecer sano, y le suministras todas las defensas que su sistema inmunológico aún no tiene… es milagroso.

Ver a un niño satisfecho y con la barriguita llena, que se queda dormido en los brazos por el esfuerzo que tuvo que hacer a la hora de succionar el pecho, es un verdadero regalo.

El gorjeo

Si tu hijo es un bebé le encantará gorjear y no hay mejor música para los oídos de una madre que la agradable conversación que monta su criatura con uno de sus peluches, la maruga, y hasta el propio chupete.

Pero la plática se aviva si el “interlocutor” logra moverse.

La cortina que ondea con el viento o el movimiento de las ramas de los árboles que se ven por la ventana abierta hacen que el niño pequeño tome más brío en su conversación.

El juego

Si el niño es más grandecito, si ya camina dentro de casa y juega con sus carritos, calderos, muñecas, o cualquier otro juguete… este se convierte en otro de los momentos favoritos de una mamá.

Tener la oportunidad de sentarse a observar la secuencia de movimientos de su hijo, la historia que se inventa para llevar a cabo el juego y hasta las palabras que emplea para ello es un verdadero regalo.

El regalo se engrandece cuando mamá puede compartir el juego de su pequeño.

Las caricias

Si tu hijo viene y te da un cariño, si te abraza o te levanta un piecito para que se lo beses, el mundo para ti se vuelve chiquito; tan chiquito como las dimensiones del cuerpo de la criatura que hace apenas un tiempo trajiste al mundo.

El darle caricias a nuestro hijo y recibirlas de él es lo mejor que puede pasarnos en la vida.

No hay pesar, depresión o dolor que el roce de una manita pequeña no consiga remediar.

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La risa

La risa de un niño nos levanta el día.

Podemos estar tristes o sencillamente sin ningún tipo de emoción… que si escuchamos una carcajada de nuestro hijo inmediatamente se nos dibuja una sonrisa en el rostro.

La risa de nuestro pequeño nos aviva el alma y hasta nos hace dejar atrás, al menos durante el tiempo que dure la alegría, todas nuestras penas.

Las travesuras

Ninguna madre se molesta en verdad cuando su hijo hace travesuras.

Las travesuras son esas peripecias que logra hacer el niño hasta dejar boquiabiertos a todos los miembros de la familia.

“Lo que se le ocurre al pequeño diablillo dueño de nuestro hogar no se le ocurre a nadie”: esta es una frase verídica que las madres de los niños pequeños seguramente rememoran día a día.

¡Pero qué grato es presenciar las fechorías que se inventa! Lo mismo para hacernos reír que para divertirse y experimentar el mundo que le rodea.

Como en eres mamá nos encanta compartirlo todo contigo, decidimos hacer esta pequeña compilación con nuestros momentos preferidos.

Pero también nos encantaría conocer los tuyos.

Dinos, ¿cuál es tu momento favorito? ¡Compártelo con nosotras!


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