Con la llegada de la nueva estación nos enfrentamos a los temidos cambios de armario. Y si la tarea involucra a la ropa de toda la familia, la cosa se pone bastante cuesta arriba. Pero también, puede abrirnos una ventana para inculcarle a nuestros hijos un nuevo aprendizaje. Así, si deseamos fomentar la autonomía de los niños a la hora de vestirse, podemos comenzar por enseñarles cómo organizar su armario.
La incorporación del hábito del orden desde la infancia es muy beneficioso para la vida y además, ayuda a simplificar las tareas cotidianas. Cuando todo está guardado en su lugar es mucho más fácil encontrar lo que buscamos. De esta manera, si les enseñamos a los pequeños a acomodar su ropa en el armario, les será más fácil elegir qué ponerse y vestirse solitos.
A continuación, te enseñamos algunos trucos para organizar este mobiliario. ¡No te lo pierdas!
Cómo organizar el armario para tenerlo todo a la vista
Para que un niño no tenga problemas en localizar su ropa, es importante que esté organizada y dispuesta a su alcance. Para lograr este cometido, su armario tiene que cumplir algunos requisitos:
- Contar con baldas o estantes en la parte baja.
- Tener una barra a mitad, de modo que los pequeños lleguen a las perchas más fácilmente.
- Sustituir las cajoneras altas por otras más bajas y pequeñas. En lo posible, que sean transparentes o de rejilla para permitirles ver lo que hay en su interior.
- Colocarle pegatinas temáticas a las cajoneras opacas, para que sepan dónde encontrar cada cosa.
Enséñales a doblar y a colgar la ropa
Enseñarles a doblar y a colgar la ropa es una de las primeras tareas que debemos enseñarles a los niños, ya que si no son capaces de realizar esto, de poco servirán los consejos para organizar su armario.
Aunque no sea una tarea sencilla, sobre todo para los más pequeños, con paciencia y a base de práctica, aprenderán a hacerlo cada vez mejor. Para enseñarles a doblar la ropa podemos seguir distintas técnicas, incluida la de Marie Kondo, que propone disponer la ropa de forma vertical para ahorrar espacio y localizarla fácilmente.
Clasifica las prendas de vestir por categorías
Otra cosa que hay que enseñarles a los niños es a clasificar su ropa por categorías. De esta manera, les será más sencillo buscar el sitio exacto donde se encuentra la prenda que quieren ponerse. Por ejemplo, destina un cajón o estante para las camisetas, otro para su ropa interior, otro para los jerséis, otro para los pantalones y así.
Es importante remarcarles la importancia de no mezclar las categorías y de colocar siempre cada prenda en el lugar que le corresponde. Esta forma de organizar la ropa es más visual y sencilla de asimilar para los pequeños.
Organiza el armario según el esquema corporal de los niños
Cuando tus hijos empiezan a vestirse solos, es probable que lo hagan siguiendo su esquema corporal. Primero la ropa interior, después las prendas inferiores, luego las superiores y para finalizar, los zapatos y los complementos.
Si se utiliza este esquema para enseñarles a los niños a organizar su armario, les será mucho más fácil encontrar las prendas. Así, lo mejor es seguir la siguiente propuesta:
- Colocar la ropa interior en los cajones más bajos del armario.
- Ubicar los pantalones, las faldas y las prendas inferiores dentro de baldas, perchas o cajones intermedios.
- Destinar las baldas más altas para la ropa de la parte superior del cuerpo, pero asegurarse de que siempre quede todo a su alcance.
- Dejar los zapatos en algunas cestas o cajas dentro del armario o en otro lugar destinado para este fin, como un mueble zapatero.
¡No te olvides de los complementos!
Los complementos de verano (gafas de sol, gorra, sombrero) y los de invierno (gorros, bufandas, guantes) son prendas que los niños pueden olvidar ponerse.
Como en general se colocan al salir de casa y se quitan al entrar, podemos ubicarlos en cajas o en algún mueble recibidor de la sala. También, podemos dejarlos en un perchero al alcance de los niños, destinado a los abrigos o chaquetas. Así, todos se ahorrarán tiempo de recoger y ordenar la ropa tirada y fomentar la organización en el hogar.
Nuestro ejemplo, paciencia y el tiempo también son importantes
Cuando les enseñamos a los niños a colaborar con las labores de casa, debemos esforzarnos por confiar en ellos y por no exigirles demasiado. No debemos olvidar que son niños y que no podemos pretender que hagan lo que ni siquiera nosotros hacemos. ¿Quién no ha dejado alguna prenda en el sofá de casa o en cualquier otro sitio alguna vez?
Por eso, es importante que los padres demos ejemplo de lo que les pedimos a nuestros hijos y seamos constantes con ellos. Además, tener presente que enseñarles a ordenar no será cuestión de un día, sino que requerirá paciencia y constancia diaria.
Aunque no lo hagan bien a la primera o incluso, haya momentos en los que su armario sea un caos, debemos tenerles paciencia y recordarles todo el tiempo cómo hacerlo. Así, poco a poco interiorizarán el hábito y desarrollarán su responsabilidad y autonomía.
El amor, la paciencia, el ejemplo, y el tiempo serán tus aliados a la hora de conseguir que tu hijo aprenda a organizar su armario.
Bibliografía
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- Vallet, M. (2007). Educar a niños y niñas de 0 a 6 años. WK Educación.
- Kondo, M. (2015). La magia del orden: Herramientas para ordenar tu casa... y tu vida. Aguilar.