Encías inflamadas en el embarazo: ¿por qué ocurren y qué hacer?

¿Te sale sangre al cepillar tus dientes? Las encías inflamadas durante el embarazo son una afección que no debes dejar pasar. Descubre por qué a continuación.

Escrito y verificado por la odontóloga Vanesa Evangelina Buffa.

Última actualización: 26 octubre, 2023

Las encías inflamadas durante el embarazo son una afección bastante común entre las futuras madres. Los cambios hormonales propios de la gestación tienen mucho que ver con su aparición, pero también existen otras situaciones que favorecen este problema.

El tejido gingival hinchado, enrojecido, que sangra y causa dolor durante la gestación, no debe pasarse por alto. En este artículo, te proporcionamos información completa sobre la gingivitis en el embarazo y te explicamos cómo prevenirla.

Encías inflamadas en el embarazo

Las encías inflamadas en el embarazo son un síntoma visible de una condición llamada gingivitis gestacional. Esta patología es el inicio de la enfermedad periodontal y se caracteriza por la hinchazón, enrojecimiento, dolor y sangrado del tejido gingival.

Los cambios propios del estado de gravidez favorecen su aparición y desarrollo. Si la patología no se controla y resuelve de manera oportuna, puede complicarse y afectar la salud de la madre y del feto.

Según los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades, entre el 60 y el 75 % de las mujeres embarazadas padecen gingivitis. ¡No te abrumes por las cifras! Con la información adecuada y algunos cuidados sencillos puedes controlar y prevenir esta dolencia.

¿Por qué las encías se inflaman durante el embarazo?

En el embarazo, se producen diversos cambios en el cuerpo de la mujer y la boca no es una excepción. Estos cambios a veces favorecen la inflamación del tejido gingival. A continuación, se describen las principales causas de esta inflamación.

1. Mayor flujo sanguíneo

Durante el embarazo, se produce un aumento en los niveles de progesterona en el cuerpo de la mujer. Esta hormona, entre otras funciones, incrementa el flujo sanguíneo en todo el organismo para garantizar la adecuada nutrición y desarrollo del feto. Sin embargo, este mayor flujo sanguíneo también afecta a las encías.

2. Cambios hormonales

El aumento de estrógeno y progesterona afecta a las células del periodonto, que es el tejido que sostiene a los dientes en su lugar. Estudios explican que los cambios hormonales provocan una mayor vascularización, tendencia al edema y congestión de las encías.

Las hormonas también pueden favorecer el crecimiento de bacterias en la boca. Un ambiente oral más cálido y húmedo debido al aumento del flujo sanguíneo puede ser un entorno propicio para el crecimiento de bacterias, lo que aumenta el riesgo de enfermedades periodontales.

Algunas de las hormonas del embarazo también pueden reducir la eficacia de la respuesta inmunitaria de la madre, lo que significa que su capacidad para combatir infecciones y enfermedades periodontales puede verse comprometida.

3. Placa bacteriana

La placa bacteriana es una fina película compuesta por bacterias, restos de comida y proteínas salivales que se acumula en las estructuras de la boca. La presencia de estos residuos en los dientes y las encías irrita el tejido gingival, que responde de manera exagerada e inflamatoria.

Si la higiene oral es deficiente durante el embarazo, la placa bacteriana se acumula y favorece el desarrollo de la gingivitis. Además, los depósitos de esta película pueden calcificarse y transformarse en sarro, lo que empeora aún más la situación.

4. Dieta incorrecta

Una alimentación inadecuada también puede contribuir a la inflamación de las encías durante el embarazo. Investigaciones han demostrado que la vitamina C, por ejemplo, favorece la producción de colágeno y reduce la reacción inflamatoria en la enfermedad periodontal. La insuficiencia de este micronutriente predispone a sufrir gingivitis.

Además, el consumo de alimentos ultraprocesados, que son ricos en azúcares simples, dulces, refrescos y jugos, también favorece la proliferación de las bacterias en la boca. Esto aumenta la acumulación de placa bacteriana y, como consecuencia, la inflamación de las encías.

5. Sequedad bucal

La respiración bucal debido a la congestión nasal y la menor producción de saliva son situaciones bastante comunes durante el embarazo. Esto provoca que la boca se reseque y las encías no cuenten con la protección que normalmente les proporciona la saliva. Además, la boca seca favorece la proliferación de bacterias y la inflamación del tejido gingival.

¿Cómo reconocer las encías inflamadas en el embarazo?

Con tantos cambios y transformaciones en el cuerpo, las encías inflamadas durante el embarazo pueden pasar desapercibidas como algo normal. Sin embargo, es importante estar atenta a este cuadro para identificarlo y tratarlo a tiempo. Estos son los síntomas que caracterizan a la gingivitis gestacional:

• Sensibilidad o dolor.
• Encías hinchadas y de color rojo brillante.
• Mal aliento y sabor desagradable en la boca.
• Sangrado gingival durante el cepillado, al morder algunos alimentos o de manera espontánea.

Si presentas alguno de estos síntomas, te recomendamos que acudas cuanto antes a tu odontólogo. El tratamiento de la gingivitis es sencillo y te ayudará a evitar malestares y complicaciones más graves y difíciles de tratar en el futuro.

Complicaciones de la inflamación gingival durante el embarazo

No prestar la atención debida a la inflamación de las encías en el embarazo puede derivar en problemas más complejos y graves, tales como los siguientes.

Periodontitis

La complicación más común de la gingivitis no tratada. Esta afección se extiende en profundidad, afectando al hueso y a los tejidos que sostienen los dientes en su lugar.

Sus consecuencias incluyen dolor, movilidad dental y, en los casos más graves, la pérdida de los dientes. Además, la enfermedad periodontal está asociada a complicaciones en el embarazo, como partos prematuros, preeclampsia y niños con bajo peso al nacer.

Tumores del embarazo

La gingivitis en el embarazo también puede provocar la aparición de bultos en el tejido gingival, conocidos como «tumores del embarazo». Estos son crecimientos benignos de la encía que tienden a desaparecer por sí solos al final del embarazo.

Sin embargo, pueden sangrar con facilidad, afectar las funciones normales de la boca y causar incomodidades a la futura madre. En estos casos, se pueden extirpar mediante una cirugía simple.

¿Cómo prevenir la inflamación de las encías en el embarazo?

Para evitar la inflamación de las encías durante el embarazo, es fundamental mantener una buena higiene bucal y seguir ciertas pautas:

• El cepillado dental debe durar al menos 3 minutos y realizarse al menos dos veces al día. Utiliza un cepillo de cerdas suaves y pasta dental con flúor para limpiar tanto los dientes como las encías.
• Es importante usar hilo dental una vez al día para limpiar la zona entre diente y diente.
• Los enjuagues bucales con agua tibia y sal, realizados una vez al día, pueden ser de gran ayuda para reducir la inflamación gingival. En casos de gingivitis más severa, el odontólogo puede recomendar el uso de un colutorio con un antiséptico para controlar la afección.
• Visitar al odontólogo en cada trimestre del embarazo es otra manera importante de controlar la inflamación. El dentista se encargará de evaluar que todo esté en orden, indicará medidas específicas cuando sea necesario y realizará limpiezas profesionales.
• La profilaxis dental es una medida sencilla y cómoda que permite eliminar la placa bacteriana y el sarro, factores que provocan y empeoran la inflamación gingival. Con instrumentos manuales y rotatorios, así como pastas especiales, el dentista limpia minuciosamente la boca de la mujer, sin ningún riesgo asociado.

Por último, es importante mantener una alimentación variada, equilibrada y nutritiva. Consumir cítricos con moderación ayuda a obtener la vitamina C necesaria para mantener las encías saludables. A pesar de los antojos, se debe evitar el consumo excesivo de dulces, bollería y refrescos, ya que pueden contribuir a problemas bucales.

Prestar atención a la boca

Con tantos cambios y nuevas preocupaciones, el cuidado de la boca durante la gestación puede pasar a un segundo plano. Pero las encías inflamadas durante el embarazo merecen atención.

Si notas que tus encías están rojas, sangran o te molestan, no lo dejes pasar y acude a tu dentista cuanto antes. Solucionar esta afección de manera temprana te hará sentir mejor, evitará complicaciones y podrás sonreír tranquila durante todo el embarazo.