Cuidar y respetar el planeta es algo que debemos aprender desde que somos pequeños. De la naturaleza obtenemos nuestro alimento, el oxígeno que respiramos… Por tanto, es responsabilidad de todos enseñar a los niños a proteger el medio ambiente del que tanto dependemos. Y, para ayudaros con ello, os proponemos 5 sencillos experimentos en este artículo de ecología para niños.
1. Ecología para niños: compost casero
El compost es un abono natural que se obtiene a partir de desechos orgánicos. Se utiliza en jardinería y agricultura como fertilizante del suelo. Se elabora mediante un proceso denominado compostaje en el cual los microorganismos descomponen la materia orgánica que nos servirá par abonar nuestro micro huerto. ¿Qué materiales necesitamos?
- Un bidón de plástico con tapa.
- Un saco de tierra de 10 litros.
- Restos orgánicos generados en casa.
- Hojas y ramas.
Coloca el bidón en la terraza o el balcón; es mejor que sea un lugar aireado, ya que el proceso de descomposición produce malos olores. Añade la tierra lo primero y, a continuación, los desperdicios orgánicos que se generan en casa, junto con ramas y hojas que recojáis cuando salgáis al parque. Por último, tápalo y no te olvides de remover de vez en cuando. Recuerda no utilizar restos animales, ni grasas ni lácteos.
2. Cómo hacer un huerto urbano explicado para ecología para niños
Cultivar vuestras propias verduras y hortalizas no solo es gratificante, sino que, además, son más sanas que las que compramos. Con ello, conseguiréis que los más pequeños de la casa se inicien en la horticultura y aprendan cómo es el desarrollo y crecimiento de las plantas.
Para aprovechar mejor el espacio, os proponemos un huerto en escalera, bien en el balcón o junto a una ventana. Los materiales que necesitamos son los siguientes:
- Dos palés.
- Malla antihierba o bolsa de basura.
- Tierra.
Coloca el palé en posición vertical y utiliza cada una de las lamas transversales para hacer un cajón con la madera del otro palé. Forra la base con la malla antihierba o con una bolsa de basura negra. Rellena con tierra y listo; ya solo te queda sembrar aquellas hortalizas que más os gusten. Os recomendamos que plantéis alguna planta aromática para evitar ciertas plagas.
3. ¿Cómo podemos ‘limpiar’ el agua?
En casa basta con abrir el grifo y tendremos agua potable, limpia y fresca, pero hay zonas del mundo donde esto no ocurre. Hay niños que recorren varios kilómetros para recogerla, y no siempre es de buena calidad. Así que os planteamos un sencillo experimento para limpiar el agua. ¡Seguro os sorprende!
Para ello, necesitaremos:
- Dos boles transparentes del mismo tamaño.
- Una caja de zapatos.
- Agua del grifo.
- Un poco de arena del parque.
- Un cordel de lana de poco más de 1 metro de largo.
Colocad la caja en posición vertical y sobre ella uno de los boles con un poco de agua. A continuación, se añade a ese bol la tierra. Situad el otro bol a los pies de la caja y unid los dos boles con el cordel. La cuerda nos ayudará a separa los dos componentes, de forma que obtendremos nuestra agua limpia de nuevo.
4. Reciclar papel, fácil, divertido y versátil
Es increíble la cantidad de papel que desechamos en casa y en la escuela. ¿Que os parece si lo reciclamos? Es muy sencillo y la cantidad de cosas que podéis hacer con el papel reciclado es increíble.
Te asombrará la textura y la belleza de una superficie en la que podéis pintar, escribir o usar de fondo para fotografías o collages. Le puedes incorporar color con tintas vegetales, pétalos y esencias. ¡Toda una aventura ecológica, sensible y estética!
Materiales:
- Periódicos y revistas en desuso.
- Cajas y cartones.
- Papel escrito y de fotocopias.
Además del papel usado, se necesitan:
- Tijeras.
- Un recipiente grande.
- Batidora o licuadora.
- Un colador.
- Un rodillo.
- Una esponja, y
- Telas que ya no uséis.
Procedimiento
- Se corta o razga el papel en trozos pequeños y se echan en el recipiente.
- Añadimos el doble de agua caliente que de papel y lo dejamos un buen rato para que el papel absorba el agua.
- Luego mezclamos y trituramos con la ayuda de una batidora hasta obtener una pasta.
- Cuando enfríe, se pone en el colador y se aclara con agua fría. La escurrimos todas las veces que sea necesario para eliminar el exceso de agua.
- Extendemos la pasta sobre una toalla o tela y con la mano o un rodillo le damos el tamaño que deseemos. Con una esponja o tela absorbente secamos bien el agua.
- Lo cubrimos con otra tela para que el papel se seque por todos sus lados. En este paso colocamos encima peso para que no quede ondulado.
- Al secar, tendremos una hermosa hoja reciclada multiuso.
5. Y, para terminar, un divertido experimento
¿Quién no ha pensado, de niño, en ver qué pasa si metemos un par de ‘mentos’ en una botella de Coca-Cola? A aquellos de vosotros que se os ha dibujado una sonrisa en la cara conocéis bien el resultado del experimento. Pero aquí solo hacemos ciencia segura, controlada y responsable, sin olvidar la parte divertida, claro está.
En este experimento aprovecharemos las propiedades del vinagre (ácido acético: C2H4O2) y el bicarbonato (NaHCO3) al mezclarse para inflar un globo. Para este experimento de ecología para niños necesitaremos:
- Gafas de seguridad. Si no tenéis, os aconsejamos que seáis los papás quienes realicéis el experimento.
- 1 globo.
- Medio vaso de vinagre.
- Una botella de plástico de medio litro.
- 4 cucharaditas de bicarbonato.
- Papel para fabricar un embudo.
- Cinta aislante.
Echa el vinagre en la botella y las 4 cucharaditas del bicarbonato en el globo. Coloca la abertura del globo en la boca de la botella (tened cuidado para que aún no caiga el bicarbonato; debéis aseguraros de que está bien colocado). Ahora, sujetad con fuerza el globo a la botella con la cinta y vuestras manos. Volcad el contenido del globo en el vinagre y… ¿Se ha calentado el contenido de la botella?
Esperamos que os resulten divertidas y entretenidas estas actividades de ecología para niños.
Después de todo, ¿qué es un científico entonces? Es un hombre curioso que mira a través del ojo de una cerradura, la cerradura de la naturaleza, tratando de saber qué es lo que sucede.
-Jaques Yves Cousteau-
Enseñar a respetar el planeta es fundamental para preservar la vida
En realidad no basta con utilizar la naturaleza como recurso educativo, hay que educar en función del medio ambiente, conocer el entorno y las formas correctas de habitarlo.
Se precisa para ello establecer nuevas relaciones con el medio y entender que la naturaleza no es una fuente inagotable de recursos ni mucho menos. Que estamos en un mundo frágil y que nuestra existencia depende de no romper el equilibrio ecológico.
Bibliografía
Todas las fuentes citadas fueron revisadas a profundidad por nuestro equipo, para asegurar su calidad, confiabilidad, vigencia y validez. La bibliografía de este artículo fue considerada confiable y de precisión académica o científica.
- Aragón, L., Sánchez, S., & Enríquez, J. M. (2021). El discurso científico en la etapa de infantil en el contexto del huerto ecológico escolar. Revista Eureka sobre Enseñanza y Divulgación de las Ciencias, 18(1), 1103-1103. https://revistas.uca.es/index.php/eureka/article/view/5657/6672
- Carvallo Corral, M. V. (2013). Uso de papel reciclado para Diseño Interior. Cartapesta (Bachelor's thesis, Universidad del Azuay). https://dspace.uazuay.edu.ec/handle/datos/2596
- Ecohortum. (05 junio 2014). Cómo hacer compost en tu apartamento [reseña en web]. Recuperado de www.ecohortum.com
- Feria de la ciencia. (última consulta julio 2016). Los peque sabios. Recuperado de www.feriadelaciencia.org