El empacho es el término coloquial que se le da al conjunto de molestias varias derivadas de una ingesta copiosa, es decir, a la dispepsia. Esto suele ocurrir sobre todo durante las épocas de celebración, como la Navidad, por ejemplo.
Cometer excesos siempre resulta perjudicial para el organismo. Por ello, es importante prevenirlos. Sin embargo, cuando no se ha llevado a cabo ningún tipo de medida preventiva (por olvido u otros factores), las consecuencias aparecen y es necesario darles un tratamiento.
El empacho o dispepsia
La dispepsia se caracteriza principalmente por una sensación de llenura y dolor (a la altura de la boca del estómago) e inflamación en la zona abdominal. A menudo puede ir acompañada por gases, acidez, dolor de cabeza, mareos, diarrea o estreñimiento, vómitos, entre otros síntomas.
Dentro de las causas más comunes se encuentran:
- Comidas copiosas.
- Consumo excesivo de café.
- Ingesta de alimentos en mal estado o preparados sin higiene.
- Toma de ciertos medicamentos (antibióticos o analgésicos).
- Consumo excesivo de bebidas alcohólicas o alimentos irritantes (picantes o grasosos).
Sumado a esto, los estados emocionales negativos y otros malos hábitos pueden influir en la aparición de la dispepsia. Por ejemplo, saltarse las comidas, comer deprisa, no masticar bien los alimentos, beber demasiado líquido entre bocados, no reposar después de la comida, etcétera.
Por lo general, la dispepsia es una molestia pasajera. Sin embargo, cuando se presenta de manera habitual, es necesario que se consulte con el médico, ya que puede ser un síntoma de un problema mayor, como un cólico biliar.
¿Cómo tratar el empacho?
Se puede tratar el empacho con una infusión herbal de hierbabuena, manzanilla, menta, poleo, semillas de anís, o una combinación de estos. Hay quienes recomiendan beber un vaso de agua tibia con zumo de limón o un poco de agua de soda unas tres veces al día. También, puedes optar por los antiácidos o bloqueadores de la acidez y antiespasmódicos de venta libre.
Realízate masajes suaves con movimientos circulares para facilitar la expulsión de gases acumulados y, así, poco a poco, ir aliviando la inflamación.
Prevenir el empacho es lo mejor
- Dormir suficiente y controlar el estrés.
- No te duermas ni coloques en una postura completamente horizontal inmediatamente después de comer; trata de esperar al menos unos 20 0 30 minutos antes de hacerlo.
- No ingieras grandes cantidades de comida, procura masticar despacio los alimentos y evita beber líquido en abundancia entre bocados. Es preferible que tomes pequeños sorbos.
- Para evitar beber demasiado líquido mientras comes, bebe un vaso de agua unos 15 minutos antes de comer.
- No realices actividades que te hagan tragar aire: fumar, hablar mientras comes, masticar chicle o comer muy rápido.
- Evitar alimentos grasos, excesivamente sazonados, salados, picantes, así como las bebidas alcohólicas, gaseosas y la cafeína.
- Consumir mucha fibra, pues esta ayuda en el proceso de digestión de los alimentos y produce saciedad. Se encuentran en el pan integral, legumbres, frutas y verduras.
En resumen, el objetivo es mitigar el fuerte dolor de barriga por empacho que se presenta en el estómago. Además, reincorporar debidamente la función intestinal de manera que puedas disfrutar de ingerir alimentos sin tener efectos indeseados. ¡No olvides estas sugerencias!
Bibliografía
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