Conoce las consecuencias de dejar a tu bebé solo cuando llora

Dejar a tu bebé que llore es uno de los peores errores que puedes cometer. ¡Descubre todas los daños emocionales que esto le puede generar al niño!

El llanto es un recurso comunicativo que usan los bebés durante sus primeros años para llamar la atención de sus cuidadores. Esto es debido a que en esa etapa aún no cuentan con la facultad de expresar con palabras todo lo que sienten.

De esa manera, un bebé puede llorar cuando siente miedo, cuando tiene sueño o hambre. Además, también suele recurrir al llanto cuando se siente solo o si tiene alguna dolencia que afecta su bienestar.

A causa de ello, los padres siempre deben estar atentos al llanto de sus hijos para tratar de descifrar lo que ellos les quieren comunicar. Del mismo modo, para encontrar los mejores métodos para calmarlos y devolverles el bienestar.

Sin embargo, en algunas familias se ha manifestado que dejar al bebé llorar solo en una habitación es una forma de no malcriarlo ni sobreprotegerlo. No obstante, esta decisión es un error que le puede generar heridas emocionales profundas al pequeño.

Es importante tener claro que el bebé en ningún momento trata de manipular a sus padres con el llanto. Pues, su única intención es encontrar un apoyo constante que le ayude a tranquilizarse y sentirse atendido.

Las consecuencias negativas de dejar al bebé llorar solo

Un bebé que llora en soledad se llena de nervios e incertidumbre, ya que comienza a pensar que está desprotegido y expuesto a una gran cantidad de peligros.

Por otro lado, llega a sentir que nadie está dispuesto a saciar sus necesidades, porque no muestran interés en interceptarlo para ver qué ocurre. Asimismo, puede creer que incomoda y que las personas que están a su alrededor lo abandonan porque no se sienten a gusto con su presencia.

En estos instantes los bebés también sienten que sus padres no les quieren, pues no los arropan ni les brindan una caricia o una palabra que les ayude a identificar que todo está bien.

A causa de ello, se debilita el vínculo afectivo con los padres porque no hay una cercanía cuando el bebé más lo necesita. Del mismo modo, porque el hijo comienza a crecer lejos de las muestras de afecto recurrentes.

La autoestima del bebé se ve afectada porque siente que nadie le brinda la seguridad que necesita. Adicional a ello, su confianza también se perjudica porque no encuentra una compañía que le permita estar seguro de que no le va a pasar nada malo.

Si esta situación no cambia, los bebés se pueden convertir en niños que esconden sus emociones. Además, no acostumbran a contemplar a sus padres como las personas que le permiten resolver todos los interrogantes que les surgen.

A tener en cuenta

Por todos esos motivos los padres deben tener claro que en esos momentos de llanto el bebé los necesita más que nunca. De esa manera, es fundamental expresarles amor y transmitirles que su necesidad pronto va a ser resuelta.

También, en algunas ocasiones el bebé puede llorar porque necesita sentir a sus padres cerca, pues cuando ellos están a su lado le generan una plenitud y una seguridad incalculable.

Así, lo único que hay que hacer es comprender la demanda del pequeño y hacerle saber que sus padres también disfrutan al estar junto a él. De esta forma la complicidad se fortalece y el bebé crece en un entorno emocional sano.

Por último, es importante tener en cuenta que si el llanto no cesa a pesar de brindarle todas las atenciones, es vital acudir a donde el pediatra. En este contexto es necesario descartar a tiempo cualquier afección de salud que genere problemas.