5 enseñanzas de El libro de la selva para niños

La famosa obra El libro de la selva, escrita por Rudyard Kipling, es una de las referencias en cuanto a la literatura infantil. Se trata de una colección de cuentos, cada uno con una moraleja importante, que luego fueron llevados al cine.

Protagonizada por niños y animales que hablan, estas historias brindan diversión y reflexión en unas pocas páginas.

Kipling era inglés, pero había nacido en Bombay, India, en 1865. Seguramente ese sea uno de los principales motivos por lo que los protagonistas del libro, además de Mowgli, el niño, son animales característicos de la jungla.
Se produjeron tres versiones cinematográficas de esta obra. La primera fue estrenada en 1942. La segunda, producida por Walt Disney, en 1967. La tercera y última, también de Disney y con una tecnología totalmente superior, fue estrenada en abril de 2016.

En principio, el libro no estaba dirigido solo a los niños, por lo que las películas contienen algunos cambios en cuanto a la historia principal.

Resumen de la trama

Si bien El libro de la selva presenta una colección de cuentos cortos, hay una trama que une los primeros relatos. Un matrimonio es atacado por Shere Khan, un tigre de bengala que será el villano a lo largo del libro.

Al huir, pierden a su bebé, quien luego es rescatado y criado por una manada de lobos. Raksha, la madre loba, lo bautiza Mowgli (‘rana’), dado que no tiene pelo.

El Consejo de la Roca, el “ente de gobierno” de la manada, exigió a los padres adoptivos del niño que dos miembros que no fueran lobos intercedieran por él para aceptarlo como integrante.

Es en este momento cuando aparecen Baloo, un oso que se volvería uno de sus principales compañeros, y Bagheera, una pantera.

A medida que crece, los animales enseñan a Mowgli la ley de la selva, donde están incluidas las grandes enseñanzas del libro.

Posteriormente, el niño deja la manada para irse a vivir a un pueblo cercano, debido a las notables diferencias con el resto de los lobos.

Conoce a su hermano adoptivo Nathoo, quien con los búfalos que criaba terminó siendo decisivo para matar a Shere Khan, la premisa que Mowgli heredó de su madre.

Al ver a los niños con los lobos, Buldeo, el cazador del pueblo, levantó a la población contra Mowgli, diciéndoles a todos que era un hombre lobo. Es ahí cuando el niño abandona nuevamente el lugar, después de que su madre adoptiva Massua también resultara herida.

Por la noche, en un ritual de celebración, los lobos piden a Mowgli que se reintegre a la manada, pero él los rechaza. De ahí en adelante, empezaría a cazar siempre con Akela y sus hermanos adoptivos, los hijos de Raksha.

Otros cuentos en El libro de la selva

Con la finalización de la historia de Mowgli, acaban los primeros ocho cuentos de la obra. Esta es la parte que aparece en la película de El libro de la selva. Después, aparecen nuevos personajes, como la foca blanca Kotick o la mangosta Rikki-Tikki-Tavi.

Ellos vivirán sus propias aventuras, totalmente independientes de la historia anterior. Sin embargo, también aportarán valiosos aprendizajes para los lectores de estos clásicos cuentos.

 5 enseñanzas de El libro de la selva

• Respeto por la naturaleza: la historia muestra al hombre como un integrante más de una comunidad que incluye animales y medio ambiente. El cuidado del planeta, presentado en el libro como un hogar, proveedor de alimento y refugio, es un valor esencial que el autor transmite a los jóvenes lectores.
• La familia real son aquellos que nos aman: si bien la separación de sus padres fue forzada y casi termina en tragedia, Mowgli fue criado por seres que nada tenían que ver con su linaje. Luego, es adoptado por una familia humana que también le provee amor. Dos ejemplos de un profundo acto de afecto como es la adopción.

• Fíjate bien en quién confías: en momentos de confusión y debilidad, Mowgli es tentado por la serpiente Kaa para que sea su amigo. Sin embargo, el niño no cae en su trampa, ya que sabe que sus intenciones no son precisamente las mejores.
• Los amigos siempre estarán: a lo largo de la historia, Mowgli enfrenta diferentes amenazas, rechazos y desafíos. Pero hay algo que permanece inmutable: Baloo y Bagheera, sus amigos desde el principio de sus aventuras en la selva. Un mensaje de lealtad sumamente rescatable para los más pequeños.
• Busca lo más vital: como dice Baloo en su pegadiza canción, no debemos ir en busca solo de lo material. Está también lo esencial, aquello por lo que vale la pena vivir. Ya lo dijo el oso: no abuses del trabajo, muchos frutos deliciosos tienen espinas por fuera.

Si lees El libro de la selva o ves alguna de sus películas, seguro que encontrarás otra moraleja que transmitir y discutir con tus hijos. Esta historia está repleta de momentos de aprendizaje, ¡por lo que es súper recomendable para los más pequeños!