4 signos de que es momento de dejar el biberón

No es un secreto que el biberón es un instrumento que todo padre utiliza para facilitar la alimentación de sus bebés. En ocasiones también funciona como ayuda para calmarlos cuando no paran de llorar.  Sin embargo, su uso excesivo podría traer inconvenientes a tu hijo.
Si tienes un bebé al que alimentas con biberón es buena idea preguntarte si conoces los signos de que es momento de dejar el biberón. Si no es tu primer hijo, probablemente ya tengas una idea de cuándo disminuir y eliminar el uso del biberón. 

Cuando el biberón representa más para mamá que para el bebé

Es necesario reconocer que actualmente vivimos en un mundo muy agitado donde papá y mamá están absortos en asuntos laborales. Por eso, al llegar a casa y enfrentar el cuidado de los bebés se ve como una buena opción el biberón para tranquilizar a los peques.
Para llamar la atención de sus padres, los bebés hacen muchas travesuras y lloran de manera prolongada. Como mamá, es importante que no veas al biberón como una herramienta para calmar y mantener quieto a tu bebé siempre.
Los bebés necesitan tiempo con sus padres por lo es necesario planificar las tareas del día. Incluye un momento para compartir y jugar con tu bebé. De esta manera ya no necesitarás la ayuda del biberón para calmarlo en un momento de llanto continuo. Esto te ayudará a mantener una buena salud emocional y dejar el biberón atrás en el momento oportuno.

Ten en cuenta que el uso continuado del biberón puede generar problemas dentales o mandibulares, según un estudio publicado en la revista Brazilian Oral Research.

Cuando el biberón impide que tu bebé aprenda otras habilidades

Es difícil pronunciar palabras con un biberón en la boca, lo cual hace que el bebé tarde para poder hablar adecuadamente o el proceso sea más lento. Hay que tener en cuenta que el alimento no es para tenerlo todo el día en la boca pues ha demostrado poder ocasionar lo que los dentistas llaman “la caries del biberón”.
Tampoco es fácil para ellos dejar algo que conocen muy bien (el biberón), por algo que aún no conocen (un vaso). Sabemos que este cambio puede proporcionar en los pequeños un clima de inseguridad.
Como mamá es probable que quieras evitar este estrés a tu hijo permitiéndole usar el biberón más tiempo del que debería. Pero piensa que esto no le permitirá desarrollar sus habilidades. Equivocarse y derramar líquidos al dejar el biberón es normal y es necesario para que realice actividades acordes a su edad. No te conviertas en un padre helicóptero y deja que descubra su potencial poco a poco.

Cuando el bebé ya lleva una dieta completa y el biberón solo añade calorías extras

Alimentar a tu bebé con el biberón es buena idea cuando no está listo para comer alimento sólido. Pero los niños amantes del biberón que por nada del mundo lo dejan luego de pasar el año y medio, añaden calorías extras a su alimentación.
Este es un problema que no debes dejar crecer porque puede originar obesidad en tu hijo. También está el caso de los niños que no quieran comer alimentos sólidos y mantienen como su único medio de alimentación el biberón. Esto repercute en la salud ya que estarían tomando más leche de la necesaria, así como azúcar, lo cual acarrearía una mala nutrición.

Cuando el bebé ya puede dejar el biberón porque ya usa el vaso

La última de las señales de que es momento de que tu hijo debe dejar el biberón es cuando ya ha aprendido a usar una taza o vaso adecuados a su edad. Permite que tu pequeño siga con ellos y poco a poco reduce la cantidad de veces que le preparas la mamila.

No utilices el biberón más de lo necesario

Como puedes ver, el uso del biberón y el momento de dejarlo es algo que descubrirás de forma natural. Ve este objeto solo como lo que es: una ayuda para que tu pequeño se alimente correctamente cuando su fuerza o habilidades no le permiten otra opción.

Ten en cuenta que es importante que se acostumbren desde bebés a la textura y al sabor de los alimentos que conformarán su dieta posterios.